Udalak

LUQUIN

La parroguia de San Martín Obispo, aunque es de origen medieval, sólo conserva del siglo XIII parte de los muros de la nave y la torre de sillería. En el siglo XVI se realizó una amplia transformación, pero tuvo mayor transcendencia para la actual configuración del templo, la remodelación barroca del siglo XVIII. Planta de cruz latina con nave de tres tramos, crucero y cabecera recta. Cubierta de medio cañón con lunetos y fajones en la nave y la cabecera, y de media naranja rebajada sobre pechinas, en el crucero. Al exterior, destaca la monumental portada retablo de un solo cuerpo con ático rematado por un frontón curvo roto y envuelto en volutas. En el ático se encuentra la escultura del titular. Del lado del Evangelio, un pequeño retablo barroco de configuración muy movida. En el sotocoro, un Crucificado de hacia 1600 y una imagen de candelero de la Soledad, barroca. Centrando el templo en forma de amplia exedra, se encuentra un retablo rococó con decoración de rocalla y traza de carácter clasicista, que le da un gran empaque y elegancia. En la calle central del retablo se halla un expositor de frágil arquitectura en forma de templete abierto con planta circular. Sobre él, en una hornacina, la talla de San Martín Obispo, que va sobre rica ménsula de rocallas. La mesa del altar con frontal rococó tiene seis candelabros de bronce de la época del retablo. Se encuentran diversas piezas de orfebrería comprendida entre los siglos XVII, XVIII y XIX en la sacristía. La basílica de Nuestra Señora de los Remedios y del Milagro, actualmente situada en el solar del Palacio Viejo, es un edificio de nueva planta, barroco, realizado hacia 1712 por Francisco de Ibarra, Joaquín de Armendáriz y Miguel de Anamusaga. Planta de cruz latina de tres tramos desiguales, crucero y cabeza recta. Cubierta de bóveda de medio cañón con lunetos y fajones y media naranja elíptica para el crucero. La sacristía se adosa detrás de la cabecera y va cubierta por bóvedas de arista. La portada de sillería, en contraste con los muros de sillarejo, se abre del lado de la Epístola. Es una estructura plana de dos cuerpos y culmina en espadaña. Del lado del Evangelio, un púlpito de hierro forjado con tornavoz rococó de madera dorada que datan de la segunda mitad del XVIII. De esta misma fecha es la reja que separa la nave del crucero. Del primer cuarto del siglo XVIII, son todos los retablos que decoran el interior de la iglesia, realizados por Lucas de Mena. En este lado se encuentra el llamado del Resucitado que cobija en la hornacina central una fina talla de Cristo Resucitado fechada en 1795. El retablo mayor, de gran empaque, posee un solo cuerpo que se eleva sobre alto banco y se divide en tres calles separadas por columnas salomónicas muy decoradas. Corona el conjunto un abigarrado ático de estructura curva. Bajo el doble arco de la hornacina principal se encuentran las tallas de las titulares. La imagen de Nuestra Señora de los Remedios es una imagen del siglo XIII con resabios románicos como el hieratismo y la frontalidad. Nuestra Señora del Milagro data de la primera mitad del siglo XVI, de estilo renacentista, tiene además influencias flamencas. Imagen también sedente, vestida con pesada indumentaria que contrasta con el desnudo del Niño. La ermita de San Isidro Labrador es de construcción moderna. Preside la ermita un pequeño retablo del siglo XVII. Tiene éste una imagen renacentista y una de San Isidro, de estilo barroco popular. Bajando de la iglesia parroquial se localiza una casa con dos escudos cuartelados, con dos lobos pasantes en cada uno de sus cuarteles más orla de aspas. Uno es de comienzos del s. XVII y el otro de finales de la misma centuria. En la carretera, el n.º l3 es un edificio del s. XVIII con dos cuerpos y ático de sillarejo; centra el primero de ellos una puerta adintelada y sobre ella monta blasón barroco, fechable a comienzos del s. XVIII, con mascarón inferior, niños tenantes y yelmo por timbre. En la casa n.° 20 se emplaza un escudo rococó de la segunda mitad del s. XVIII provisto de yelmo en el timbre. Prosiguiendo por la crta. se localiza un blasón circular de finales del s. XVIII con busto barbado inferior, trofeos y yelmo por timbre entre figuras de niños, de gran belleza. En las afueras se conserva un edificio adornado con dos blasones, uno de ellos de comienzos del s. XVII con cartelas de cueros recortados y cuatro cuarteles. El segundo, de finales del s. XVII, aparece con cartela de cueros retorcidos con decoración de estilizados follajes y presenta cuatro cuarteles cada uno con lobo pasante más bordura de aspas. No lejos se emplaza la casa-palacio de los Azcona, monumental inmueble barroco de hacia 1700, unido por un lateral a una construcción del s. XVII. Forma el conjunto un gran bloque de marcada horizontalidad, compuesto por dos cuerpos y ático de sillería. Culmina el edificio un rico alero de madera con ménsulas talladas en volutas y hojarasca. Preside la fachada un ostentoso escudo, también de hacia 1700, con rica bordura de follajes, incluyendo mascarón inferior montado por niño y entre otros dos niños, leones y yelmo por timbre con dos niños sedentes en sus extremos. Junto a este blasón se localiza otro del s. XVII con cartela de cueros retorcidos y yelmo por timbre. La casa cuenta con otros dos escudos del s. XVI. La casa n.° 3 de la calle del Chorrico es del s. XVI, muy rehecha, con gran portalón de medio punto con escudo liso en la clave. El n.° 7 tiene un pequeño blasón de comienzos del s. XVII con cartela de cueros retorcidos y con jabalí rampante dentro de su campo. En la calle de la Fuente, el N.° 10 luce un escudo barroco de finales del s. XVII acompañado de mascarón inferior, niños tenantes y yelmo en el timbre. Frente a él se localiza otro escudo del s. XVIII con cinco bandas terciadas en orla de estrellas. En la misma calle se localiza otro escudo barroco, de finales del s. XVII, con enmarque enriquecido por mascarón inferior, niños tenantes y yelmo. Un escudo semejante y de idéntica cronología queda en las proximidades de la basílica de la Virgen de los Remedios. Junto a este templo se levanta una casa del s. XVI con dos cuerpos desarrollados en altura más ático. En su primer cuerpo se abre un portalón de medio punto, cuya clave ostenta pequeño escudo con cinco bandas terciadas y orla de roeles. Sobre este portalón hay adosado otro blasón de campo cuartelado con animal y faja repetidos alternativamente [Ref. C. M. N. , M. de Estella].