Castillo erigido hacia 1476 por Fernando de Baquedano sobre una pequeña altura. Es una torre cuadrada, semiderruida con un resalte para alojar una escalera de caracol. Falta la coronación almenada sin duda, y en la base, ésta se ensancha para terminar en sus cuatro esquinas por cuatro torretas circulares. Tuvo foso por todo el perímetro y puente levadizo por el que se salvaba el foso. Altadill lo describió a comienzo de siglo (Castillos medievales) de la siguiente forma: "Aunque esta fortaleza denota a primera vista ser de las más modernas dentro del período de nuestra independencia, puesto que fue erigida el año 1473, no por eso ha de desmerecer hacia ella nuestra atención, primeramente porque corrobora la lealtad de una noble familia nabarra al trono del extinguido reino, en aquella época luctuosa de falsedades y traiciones, y porque el castillo de Gollano, que aún se yergue altivo, es renovación o resurgimiento del primitivo, que ocupó el mismo paraje y seguramente no alcanzaría el poder defensivo del actual. El resurgimiento se debe a la iniciativa y espensas del Señor D. Fernando de Bakedano, quien asoció en su obra a la condición de castillo, la de palacio, cual correspondía a su categoría de protonotario del Rey D. Juan II, entre cuyos partidarios figuró, frente a los adictos e incondicionales del Príncipe de Biana. Y no cabe negarse que supo imprimir a la nueva fortaleza estimables cualidades defensivas, como puede deducirse de las proporciones y disposiciones geométricas de las torres avanzadas ocupando los cuatro ángulos del profundo foso, la elevación del cuerpo central y la terminación que consiente adivinar la barbacana o matacanes del coronamiento; este cuerpo central presenta en uno de sus ángulos un saliente de la misma época, el cual protegía a un puente levadizo de acceso a aquél y al propio tiempo se alojaba en su interior una sólida escalera de caracol, por la que pudimos en nuestra visita ascender unos veinte ,escalones sin que nos consintieran proseguir unos maderos y escombros que obstruían una mayor ascensión. Hallamos también que ese cuerpo central presentaba otra puerta en el centro de la fachada que mira al S. O., de corte ojival, pero cuya altura en la clave apenas llegaba a 2,40 metros. Algunas ventanas ornamentadas al exterior daban fijamente la impresión de corresponder a las señoriales habitaciones de sus antiguos moradores, los Marqueses de Fuerte-Gollano. Alternaban con esos huecos no pocas saeteras, mejor dicho aspilleras. Las cuatro torres cilíndricas o cubos avanzados presentaban algunos signos de parcial derrumbamiento, pero se adivinaban todavía los accesos a las mismas desde el foso; el adarve había desaparecido, lo cual se explica por las noticias que se nos dieron de haberse utilizado piedra para construcciones particulares, procedente a esta fortaleza, siendo probable que el coronamiento de las cuatro líneas del foso hubiera corrido la misma suerte. El interior del castillo presentaba señales que consentían con alguna probabilidad determinar los departamentos distinguidos o preferentes de la familia, por la disposición de las ventanas, vestigios de chimeneas y algunas mensulitas talladas en piedra; se deducía también que el edificio se había hallado distribuido en cuatro plantas, una baja y tres superiores; careció de patio de armas, sustituido por los fosos o por el perímetro entre los muros exteriores y los de la torre central. Los escombros ocultaban completamente la bajada que en vano busqué de descenso a los subterráneos. Parroquia de San Bartolomé (antigua colegiata). Es un edificio construido hacia el 1200 en estilo protogótico influenciado por el Cister y con reformas del s. XVI. En el coro alto se halla una sillería de estilo gótico tallada en 1480. La silla abacial y las inmediatas llevan el escudo de los Baquedano.
Palacio de Cabo de Armería de Gollano. En estado ruinoso, perteneció al linaje de Baquedano y fue construido en la segunda mitad del siglo XV, con carácter de fortaleza por Fernando de Baquedano. Edificado en cantería, poseía planta rectangular, estaba rematada en matacanes y arpillada de saeteras. Subsisten tres lienzos de la torre del homenaje y arranques de dos arcos apuntados de sección pentagonal. También, restos de los torreones del sistema defensivo exterior del palacio.
Parroquia de San Bartolomé. Corresponde el actual edificio con lo que fue la antigua colegiata de Gollano, levantada en la primera mitad del siglo XIII. Construcción románica de influencia cisterciense, conserva su primitivo planteamiento arquitectónico, exceptuando algunas modificaciones llevadas a cabo durante el siglo XVI. La planta está formada por una larga nave dividida en siete tramos que no diferencian crucero y que se prolongan hasta la cabecera recta. La bóveda se articula en los tramos de la nave a través de una larga estructura de medio cañón apuntada sustentada por robustos arcos fajones. La cubierta de la cabecera se resuelve en el siglo XVI por bóveda estrellada.
Externamente conserva el aspecto medieval, composición horizontal en cuyos muros de mampostería se abren algunas ventanas apuntados. En el muro de la Epístola se encuentra ubicada la portada románica de principios del siglo XIII; de arco apuntado que se abocina a través de tres arquivoltas lisas que descansan sobre capiteles sin decoración. En el interior se conservan unas imágenes del siglo XVIII entre las que se incluye la correspondiente al titular de la parroquia.
Fernando GARCÍA NIETO
Palacio de Cabo de Armería de Gollano. En estado ruinoso, perteneció al linaje de Baquedano y fue construido en la segunda mitad del siglo XV, con carácter de fortaleza por Fernando de Baquedano. Edificado en cantería, poseía planta rectangular, estaba rematada en matacanes y arpillada de saeteras. Subsisten tres lienzos de la torre del homenaje y arranques de dos arcos apuntados de sección pentagonal. También, restos de los torreones del sistema defensivo exterior del palacio.
Parroquia de San Bartolomé. Corresponde el actual edificio con lo que fue la antigua colegiata de Gollano, levantada en la primera mitad del siglo XIII. Construcción románica de influencia cisterciense, conserva su primitivo planteamiento arquitectónico, exceptuando algunas modificaciones llevadas a cabo durante el siglo XVI. La planta está formada por una larga nave dividida en siete tramos que no diferencian crucero y que se prolongan hasta la cabecera recta. La bóveda se articula en los tramos de la nave a través de una larga estructura de medio cañón apuntada sustentada por robustos arcos fajones. La cubierta de la cabecera se resuelve en el siglo XVI por bóveda estrellada.
Externamente conserva el aspecto medieval, composición horizontal en cuyos muros de mampostería se abren algunas ventanas apuntados. En el muro de la Epístola se encuentra ubicada la portada románica de principios del siglo XIII; de arco apuntado que se abocina a través de tres arquivoltas lisas que descansan sobre capiteles sin decoración. En el interior se conservan unas imágenes del siglo XVIII entre las que se incluye la correspondiente al titular de la parroquia.
Fernando GARCÍA NIETO