Sailkatu gabe

EUSKARA (LENGUAJE EN GENERAL)

Lenguaje oral y lenguajes culturales. Además de las "señales" y de los "signos" existen los "símbolos". Así como la huella del pie sobre la arena de la playa es señal de que alguien ha pasado, el olor a gasolina es señal de que alguien ha andado con ella o no anda lejos, el símbolo evoca, en una cierta medida, a algo real que existe. No es totalmente signo convencional, como la palabra, ni señal como la huella o el olor. Participa de ambos. La "serpiente", p. ej., es símbolo de la "traición". Y es que el hombre asocia al "arrastrase" físico de la serpiente por el suelo con la conducta "rastrera".

Todo sistema de señales, signos y símbolos constituye un lenguaje cultural-paralelo al de signos orales. El lenguaje oral identifica al hombre con su grupo. Cuando digo euskalduna naiz (lit. "poseo el euskara") digo realmente "soy vasco". La diferencia radica en que el oral reside en la fisiología, mente y espíritu de cada hombre en tanto estos otros son totalmente externos. La ciencia que los estudia es la Semiología o Semiótica. De esta índole son la escritura, numeración, marcas, emblemas, banderas, notación musical, gráficos y esquemas, señales de tráfico, toques de campanas, señales luminosas, etc. Ni la naturaleza física y biológica escapan a la función semiológica patente en los síntomas de las enfermedades que también caen dentro del estudio de la Semiología.

Por estos motivos el lenguaje oral tiene un estatuto propio muy ligado al de los lenguajes culturales pues es la condición de los mismos.

Nos dice Vossler que la lengua "no pertenece por entero al individuo ni a la comunidad, sino que hace el papel de inquieta mediadora entre comunidad e individuo" (Filosofía del Lenguaje, 1947, p. 184).