Sailkatu gabe

DECLINACIÓN (ADICIONES FONÉTICAS)

Leyes: 1ª a 15ª.
Ley primera. Aznar, bat, Olazabal + k = Aznarrek, batek, Olazabalek ekarria, traído por Aznar, por uno, por Olazábal.

Ley segunda. Eibar, bat, Aizarnazabal + n = Eibarren, baten (1), Aizarnazabalen, en Eibar, en uno, en Aizarnazábal.

Ley tercera. Aznar, bat, Olazabal + gaz (o kin) Aznarregaz (Aznarrekin), con Aznar, bategaz (batekin), con uno, Olazabalegaz (Olazabalekin), con Olazábal. Aun con temas terminados en vocal se hace uso de esta epentética (precedida de la r) ante el sufijo kin, no ante su sinónimo gaz: gurekin y gugaz, con nosotros, Santigaz, con Santiago. Se tratará de esto algo más minuciosamente en el estudio de las Variantes (á 510). La epéntesis de e en el caso impulsivo no constituye ley sino fenómeno particular. Tanto como Aznarrégaitik, bangaitik, Olazabalegaitik, se oyen Aznargaitik, batgaitik (bakaitik) y Olazabalgaitik. Ley cuarta. Legor, bat, Olazabal + z = logorrez, por tierra, batez beste, por término medio, Olazabalez itz egin, hablar de Olazábal. La vocal e se agrega en segundo lugar a temas de vocablos específicos o comunes, terminados en consonante (y expresivos de seres inanimados), ante las desinencias de los casos proverbal, inesivo, ablativo y los cuatro directivos (6.°, 7.°, 8.°, 9.°, 10.°, 11.° y 12.° del paradigma).

Ley quinta. Ezker + ko = ezkerreko, de la izquierda, egun (día) + ko = eguneko, del día, ert + ko = ertzeko, de la esquina, ondarzabal (B-I) + ko = ondarzabaleko, de la playa (liter. de la planicie de arena).

Ley sexta. Ezker, egun, ertz, ondarzabal + n = zekerrean, en la izquierda, egunean, en el día, ertzean, en la esquina, ondarzabalean, en la playa.

Ley séptima. Ezker... + tik = ezkerretik, desde la izquierda, egunetik, desde el día, ertzetik, desde la esquina, ondarzabaletik, desde la playa.

Ley octava. Ezker... + ra = ezkerrera, a la izquierda, egunera, al día, ertzera, a la esquina, ondarzabalera, a la playa.

Ley novena. Ezker... + rantz = ezkerrerantz, hacia la izquierda, egunerantz, hacia el día, ertzerantz, hacia la esquina, ondarzabalerantz, hacia la playa.

Ley décima. Ezker... + ragino = ezkerreragino, hacia la izquierda, ertzeragino, hacia la esquina, ondarzabaleragino, hasta la playa.

Ley undécima. Egun... + rarte = egunerarte, hasta el día, datorren ilerarte, hasta el mes que viene...

Ley duodécima. Ezkerr + rako = ezkerrerako, para la izquierda, egunerako, para el día, ertzarako, para la esquina, ondarzabalerako, para la playa. Al redactar la fórmula que comprende las ocho leyes precedentes se ha puesto un paréntesis en el que se restringe la teoría a solos seres inanimados; porque tratándose de vocablos, en consonante y comunes, de seres animados como mutil, muchacho, gizon, hombre, alkar, uno y otro (seres animados), éstos reciben sí la epentética e, pero no inmediatamente o antes de la desinencia, sino mediante uno de los infijos semánticos que se expondrán más tarde. No decimos mutilean, mutiletik, mutilera; gizodean, gizonetik, gizonera; alkarrean, alkarretik, alkarrera, como ezkerretik, ezkerrera, sino lau mutilegan, lau mutilegandik, lau mutilegana, zein gizonegan, zein gizonegandik, alkarregana, etc., la desinencia ko, como se verá en el Paradigma, de ninguna manera afecta directamente a un vocablo de ser animado.

Ley decimotercera. Tratándose de adverbios declinables, como no son específicos sino individuales y bien determinados, aun cuando terminen en consonante, no se les agrega la epentética e en ninguno de los siete casos mencionados en el párrafo 467.

A) La desinencia del inesivo no se aplica nunca a estos temas, pues esta idea complementaria la llevan consigo. No se dice gaurean, atzoan sino gaur hoy, atzo ayer. Aun en castellano se dice "desde hoy, para hoy, desde ayer, para ayer", mas no "en ayer, en hoy, en mañana, en luego..." Unicamente dos vocablos de tiempo adverbiales tenemos que reciben el inesivo, ordu y aspaldi: orduan entonces, aspaldian o aspaldion en esta temporada. En otros casos no suena, naturalmente, esta desinencia: ordutik desde entonces, orduko para entonces, aspaldiko, aspalditik... etc.

B) La desinencia del caso proverbal se les aplica así: gaurkoa de esta noche, egungoa de este día (de hoy), noizkoa el de cuándo, lengoa el de antes, emengoa el de aquí... no gaurekoa, egunekoa, noizekoa..., etc.

C) La desinencia del ablativo se les aplica directamente a los adverbios locales, a los temporales mediante el infijo dan y a unos y a otros sin la vocal epentética. Nondik desde donde, emendik desde aquí, ortik desde ahí, andik desde allí... y noizdanik desde cuándo, lendanik desde antes, oraindanik desde ahora, gaurdanik desde hoy (esta noche), egundanik desde hoy (este día). Muchos, habiendo perdido este precioso infijo semántico, dicen, como si se tratase de adverbios locales: noiztik, lendik, oraindik, gaurtik... etc.; pero nadie dice con la epentética nonetik, emenetik... noizedanik o noizetik... etc.

D) Los temas adverbiales de tiempo son refractarios a los casos directivos. Unicamente le es propio el terminal arte y aun él lo reciben, no (como los vocablos comunes de tiempo, como egun día, il mes, urte año... etc.) mediante la epentética r (egunerarte, datoren ilerarte, lengo urterarte), sino sin ella: atzoarte hasta ayer, etziarte hasta pasado mañana, noizarte hasta cuándo. Las locuciones de B-mo atzotik gaurera y gaurtik biarera están indudablemente calcadas en las castellanas "de ayer a hoy y de hoy a mañana".

Ley decimocuarta. Los temas adverbiales de lugar non, omen, or, an reciben con toda propiedad las desinencias de los casos directivos, siempre (por lo menos en dialecto B) sin la vocal epentética. Nora, norantz, noragino, norakoa, hacia, hasta, para donde; ona, onantz, onagino, onako... para acá; ora, orantz, oragino, orako... para ahi; ara, arantz, aragino, arako... para allá. En algún otro dialecto como AN y G dicen con la vocal epentética; onera, onerantz, oneragiño, onerako; orrera, orrerantz, orreragiño, orrerako; arera, arerantz, areragiño, arerako. (Estos terceros no son usados en tantas comarcas como los anteriores.) En cambio, como se verá algo más tarde, ante el infijo ta usamos la vocal epentética en B, no en otros dialectos: uri, onetan, onetatik, onetara... orretan, orretatik, orretara... atan o aretan, atatik o aretatik... etc.; al paso que fuera del B dicen ontan en este, ortan en ese, artan en aquel; ontatik, ortatik, artatik, ontara, artara... etc.

Ley decimoquinta. Temas de vocablos propios no adverbiales, aunque terminados en consonante, como son los nombres de lugar Burgos, Eibar, Irún... y cualquier otro de sus condiciones, son de suyo absolutamente refractarios a la epéntesis en los casos arriba citados. Decimos Burgostik, Burgoskoa; Eibartik, Eibarkoa; Irundik, Irungoa, mas es contra el espíritu de la lengua decir Burgosetik, Burgosekoa, Eibaretik, Eibarekoa... etc. Tratándose del caso inesivo se ha dicho ya en la ley segunda (&466) que pide epéntesis: Burgosen, Eibarren, Irunen. Respecto de las desinencias directivas es tal el uso que se hace, en general, de la epéntesis de r (ranrantz, ragino, rako por a, antz, agino, ako), que cual si este elemento fuere orgánico se oye tal vez más generalmente Burgosera, Eibarera, Irunera, que Burgosa, Eibara, Iruna.