Organista y compositor de música religiosa guipuzcoana, nacido en Ordizia, en diciembre de 1882 y muerto en San Sebastián, el 11 de abril de 1960.
Discípulo de Martín Rodríguez en Balmaseda, el año 1920 ocupó el cargo de organista de la parroquia donostiarra de San Vicente que todavía desempeñaba al fallecer tras haber sido de Berastegi (1904) y Zumaia (1905-1919). Durante 28 años perteneció al claustro de profesores del Conservatorio Municipal de Música donostiarra. Legó muchas obras religiosas; uno de sus últimos trabajos, que realizaba por el año 1958, fue escribir unos acompañamientos para la Colección Cantos para la Santa Misa que, con texto vasco y castellano acababa de publicar el Seminario Diocesano de San Sebastián. Compuso, para el Homenaje pianístico a la memoria de Juan Crisóstomo de Arriaga un Breve responso gregoriano, página completamente sacra, lo que supuso originalidad en una pieza encomendada al piano.