Industrial y promotor de origen vizcaino nacido en Madrid el 27 de octubre de 1869 y residente en San Sebastián desde los dos años.
Estudió el bachillerato en Tolosa (Gipuzkoa) y estudios superiores de Ingeniería de Caminos en Madrid (1892). Iniciado desde joven en el negocio papelero como ingeniero de varias factorías vascas [Papelera Vasco-Belga, Cadagua (1894-1902)] junto con Rafael Picavea, fue uno de los fundadores del trust La Papelera Española (1902), de la que fue gerente, puesto en el que se ganó bastantes simpatías entre los trabajadores adoptando innovaciones y mejoras laborales. En 1914 crea también la Central Papelera. En 1919 la Sociedad cooperativa de fabricantes de papel, almacenes generales y la Sociedad Anónima de Manipulados. La construcción de la fábrica modelo de Rentería y la de mantas de lana de la misma localidad se deben también a su iniciativa. Su conocimiento del mundo de las artes gráficas le posibilitó el paso del papel a la prensa; en 1917 funda el que sería celebérrimo "El Sol", modelo de diario moderno y liberal en España, en 1918 la editorial "Calpe", en 1919 el Instituto "Ybis" y luego, en 1920, el vespertino más popular "La Voz". En 1920, invitado por la Sociedad de Estudios Vascos, de la que era socio, pronunció en el II Congreso celebrado en Pamplona, la lección Posible desarrollo industrial con especies forestales producidas en el país. Fue decisivo su papel en la fusión con Espasa, "Espasa-Calpe". En 1925, gravemente enfermo, abandona la dirección del PE y se dedica de lleno a la de sus periódicos. Su programa en los mismos es "defender toda manifestación de carácter regional sin mengua de la unidad de la Patria" (ref. ASEV, ES, carta a P. Elósegui del 19 de abril de 1928). En 1927 formó, junto con el director de "La Vanguardia", la delegación española del Congreso Mundial de Prensa de Ginebra. En vísperas de grandes cambios políticos se adhirió a la Agrupación al Servicio de la República. En 1931 perdió "El Sol" pero funda "Crisol" que, en 1932, se denomina "Luz" ("periódico republicano y nacional"). Por esos años comienza a manifestarse una gran depresión que lo aleja de su país al que sólo vuelve en 1939, tras la guerra y una larga estancia en un sanatorio suizo. Restablecido hacia 1944 y hasta su muerte, acaecida en Madrid en 1951, redacta sus memorias que, junto con su archivo, sirven a Mercedes Cabrera para escribir su biografía Nicolás María de Urgoiti (1869-1951), Alianza, 1994. La "Revista de Historia Social" de Madrid, en su número correspondiente a 1984 publicó Las fundaciones de Nicolás María de Urgoiti: escritos y archivo con gran aparato documental al que remitimos para ampliar información sobre este espíritu inquieto, pionero de la comunicación moderna en España.Ainhoa AROZAMENA AYALA