Concepto

Molinología

Hasta el momento se ha establecido la tipología de los molinos y las fechas de aparición de los mismos en el mundo. A continuación se analiza el caso concreto de Euskal Herria.

Numerosos restos de este tipo de molinos han aparecido en los yacimientos arqueológicos de Euskal Herria, tanto de los de vaivén como de los rotativos.

De los barquiformes se han encontrado en las ruinas de Los Cascajos (zona de Los Arcos, Navarra) de hacia el 4.400 a.C.; en Elvillar (Álava) en un yacimiento del Eneolítico II datado del 2.780 a.C. y en yacimiento de Salbatierrabide, cerca de Vitoria, del siglo IX. a.C. (Aguirre, 1988, p. 28).

Según la investigadora Sonia San José, la primera muela rotativa encontrada en Gipuzkoa fue en el poblado fortificado de Munoaundi en Azkoitia-Azpeitia, en un yacimiento de la Edad del Hierro (San José, 2008, p. 451). Otra durmiente semejante, datada de entre el siglo III-II a.C. apareció en Laguardia, Álava (Ajamil, 2008, p. 106).

Existieron máquinas de moler manuales de muchos tipos y clases. Hay que recordar por ejemplo que en la Edad Media, en todos los castillos y ciudadelas había, o bien un molino para ser accionado por una caballería, o lo hacía una persona mediante una manivela, ya que cuando estaban sitiados no podían bajar al molino del río a moler. Solían ser estructuras de madera, con ruedas dentadas (catalinas) que movían dos pequeñas piedras. Así existe constancia documental en los inventarios, por ejemplo en los castillos de Cortes (1267), Tudela (1308), Olite (1367), Laguardia (1433), etc. (Aguirre, 1988, p. 32).

Algunos buenos ejemplares de este tipo de máquinas se pueden ver en el Museo de la Confitería de la familia Gorrotxategi de Tolosa (Gipuzkoa).

También se usaban este tipo de molinos en las alfarerías para moler los colorantes.

El cronista moro Raxis, describió en el 802 las aceñas que estaban a orillas del río Ebro a su paso por Tudela (Martín, 1978). A partir del siglo X los reyes navarros donaron un sinfín de molinos a diferentes monasterios. De todo ello ha quedado una amplia documentación.

También contamos con testimonios tempranos que nos hablan de molinos pertenecientes al patrimonio monástico: es el caso de las donaciones datadas en 822 (Ubieta, 1960) en Alava y en el 831 en Burgos (Gutiérrez, 1984).

Hay que anotar que aunque en los documentos anteriores al siglo IX son escasas las citas de molinos, en los del siglo X aparecen con mayor frecuencia, y en el XI de forma abundante, casi siempre como elementos complementarios de otros bienes: huertas, montes, viñas, etc. (Aguirre, 1999, p. 9-23).

Recientemente hemos conocido un texto histórico que nos refiere un molino en Bizkaia el año 1013 (Hidalgo, 1988), lo que supone un avance de medio siglo respecto a la anterior constatación de labores molineras en esta provincia (VV.AA, 1883).

El territorio que ha legado más tardía documentación de molinos medievales es Gipuzkoa, pues del año 1141 data la primera alusión , contenida en una orden del rey navarro García el Restaurador por la que entregaba a la comunidad de San Miguel de Excelsis las molendinis de Berástegui (Ostolaza, 1982). Pensamos que el menor carácter cerealista del territorio, y, sobre todo, la escasez documental en Gipuzkoa, explican tal retraso.

No disponemos, desgraciadamente el censo de todos los molinos de Euskal Herria, pero poseemos un dato muy interesante, como es el censo de los molinos de Pascual Madoz, que publicó en su enciclopedia realizada entre 1834 y 1845. Gracias al estudio que en dicha obra realizó el investigador Koldo Lizarralde sabemos que Madoz cita el siguiente censo de molinos (Lizarralde):

ZonaMolinos
Álava413
Bizkaia665
Gipuzkoa355
Navarra419
Total1.852

Pero a no dudar existieron muchos más, ya que mientras Madoz cita, por ejemplo, 355 molinos en Gipuzkoa, nosotros hemos censado 661 molinos.

En el golfo de Gascuña aparecen desde el siglo XII, y poco después en Gipuzkoa y Bizkaia, durante un periodo sin duda propicio, en que la explotación de la energía hidráulica empezó a aplicarse de forma general en las actividades más variadas (ferrerías, batanes, minería...). Juzgamos nosotros que posiblemente fueran los gascones quienes trajeron a nuestras costas la técnica de construcción de los molinos de marea.

Tras nuestras investigaciones hemos censado los siguientes molinos de mareas en el Golfo de Bizkaia, empezando en el Adour, en la provincia de Lapurdi, y terminando en Somorrostro, Bizkaia (Aguirre, 1988, p. 73).

  • Lapurdi
  1. Baiona I: Un molino de mareas situado en el margen izquierdo del Adour, en la confluencia entre éste y el Nive, en los solares ocupados en la actualidad por el Hotel de Ville y el teatro. Desaparecido hace muchísimos años.
  2. Baiona II: Un poco más adelante del anterior estaba situado el segundo, en lo que hoy es la Alameda de la Marina y un grupo de casas. Se puede ver dibujado en un plano de Baiona de 1599.
  3. Baiona III: Estaba situado en los solares donde se construyó la plaza de Armas de la villa, solar donado por Enrique IV en 1600. Aparece también en el plano antes citado. Se encontraba a la derecha del Adour.
  4. Baiona IV: El de Castera, citado por Maurice Daumas en su célebre libro L'Archeologie Industrielle en France, y que sobrevivió hasta 1972. Hoy desaparecido. Se encontraba a la derecha del Adour.
  5. Saint-Bernard: Existía uno en el límite con Boucau, a la derecha del Adour, a las afueras de Baiona. Está ya documentado en 1580.
  6. Saint Jean de Luz I: El de Errepira, situado en los solares ocupados en la actualidad por la estación de ferrocarril, a la derecha del Nivelle, citado en 1625.
  7. Saint Jean de Luz II: El de Billitorte, situado a la salida de la ciudad hacia Cambó, y a la derecha del Nivelle.
  8. Ciboure: Citado por Daumas, desaparecido por la construcción de un barrio industrial.
  • Gipuzkoa
  1. Irun: En la zona de Santa Elena, citado en 1527.
  2. Hondarribia: El de Santa Engracia, edificado en 1576. Funcionó hasta finales del siglo XVIII.
  3. Pasaia: Existieron posiblemente dos molinos de mareas: el de Molinao y el de Iparraguirre-errota.
  4. San Sebastián I: El de Malvernet, también llamado de Albernat o de Iparraguirre, molino de mareas que estaría situado en Alza, en la zona de La Herrera, y documentado ya a principio del siglo XVI.
  5. San Sebastián II: El de Errota-txiki, construido sobre el Urumea.
  6. San Sebastián III: El Santiago-errota, con contrato de compra-venta fechado en 1538.
  7. San Sebastián IV: Juandegi-errota, edificado hacia finales del XVI.
  8. San Sebastián V: El Errota-aundieta, posible molino de mareas en la zona de Benta-Berri.
  9. San Sebastián VI: Komporta-errota levantado en 1574 por la villa, en la citada zona de Benta-Berri.
  10. San Sebastián VII: El de Errotaberri, situado en la zona de Loyola y que está documentado a principios del siglo XVII.
  11. Orio: A principios del XVIII la villa sufragó la construcción del Mare-errota.
  12. Zumaia: El Zubiaurre-errota, documentado ya en 1610 y levantado posiblemente a mediados del siglo XVI.
  13. Deba: Errotazar, que ocupaba los actuales terrenos del campo de fútbol.
  • Bizkaia
  1. Lekeitio: El molino de mareas de Isuntza, construido posiblemente hacia 1554 por el maestro Olabide por encargo de la Cofradía. Reconstruido como museo.
  2. Arteaga I: El de Koba edificado en 1638, el único que se mantiene entero. En el Boletín Oficial del País Vasco del 13 de mayo de 1999 se declara Bien Cultural al citado molino.
  3. Arteaga II: El de Arraburu, situado muy cerca del anterior y en ruinas.
  4. Arteaga III: Errotazar, desaparecido. Al igual que los dos anteriores situado a la derecha de la ría de Gernika.
  5. Kortezubi I: Errotatxu, en ruinas, a la derecha de la desembocadura de la ría de Mundaka.
  6. Kortezubi II: El molino de mareas de Errotaberri, convertido hace muchísimos años en simple caserío y situado cerca del anterior.
  7. Murueta: Itxas-errota, ahora ya desmantelada su maquinaria, siendo casa de labranza.
  8. Buzturia: El Mare-errota, en el barrio de San Cristóbal y que dejó de funcionar al llenarse de barro su represa en las riadas de agosto de 1983.
  9. Plentzia I: Molino de Gazteluondo, construido por la villa en 1506. Derruido para construir en su lugar un puente.
  10. Plentzia II: El de Errotaberri, edificado en 1847 y actualmente desaparecido.
  11. Plentzia III: Molino de Ardanza, vendido por el Ayuntamiento en 1806 a un particular. Ruinas.
  12. Leioa: El de Txakurzulo derribado en 1981.
  13. Barakaldo: Existió uno en los solares adquiridos por Altos Hornos de Vizcaya, a la izquierda del Nervión.
  14. Somorrostro: Había uno en el lugar hoy en día ocupado por Petronor.

En resumen, en la zona por nosotros estudiada, en el llamado Golfo de Bizkaia, existieron 36 molinos de mareas: 8 en Lapurdi, 14 en Gipuzkoa y 14 en Bizkaia.

No tenemos datos de la existencia de este tipo de molinos en Euskal Herria.

Tenemos constancia de la existencia en Euskal Herría de los siguientes molinos de viento (Aguirre, 1988, p. 61):

En Bizkaia conocemos la existencia de diez molinos de viento, aunque ninguno mantiene su maquinaria ni, por tanto, está en condiciones de funcionar, pero sus edificios de fábrica y demás particularidades hacen recomendable su visita. Además, están enclavados en altozanos y cumbres, con lo que las vistas son siempre excelentes.

En Abadiano se halla el molino de Azpazar, en lo alto del barrio de Larrigan, con los montes Aitz-tiki y Alluitz a sus espaldas.

Sobre la ermita de Santa Cruz de Ispaster, en la carretera que une Lekeitio y Gernika (entre los kilómetros 45 y 46) está el molino de Aixeder. Se terminó en 1729. En 1746 ya no funcionaba.

En Luno (Gernika) estaba el molino de viento de Izerrota, hoy desaparecido.

También Sondika cuenta con uno de estos viejos testigos de la época preindustrial en su monte Artxanda y se llama molino de Aixerrota. Fue construido en 1726 y fue reconstruido después de que durante la guerra civil un obús lo redujera casi a escombros.

En Getxo, fronterizo con Sopelana y en una loma cercana a la playa, se pueden visitar los restos del molino de Azkorri o Arnabarre, restos que hoy se reducen a unas piedras. En 1875 sirvió de fortín improvisado para las tropas carlistas, siendo escenario de un intenso enfrentamiento bélico.

Tal vez más interesante sea el de Axerrota, también en Getxo, sobre el acantilado de la playa de Arrigunaga, orillando la antigua carretera de Algorta a punta Galea. Se construyó entre 1726 y 1727. En 1787 vivía en él Edmundo de Shee, un comerciante de origen irlandés. Hoy es galería de arte y entrada a un restaurante.

En Karranza, concretamente en Treto debió existir un molino de viento ya que éste es el topónimo de un altozano, propio para tal fin.

En Narbanitz, según don José Miguel de Barandirán debió haber un molino de viento en el alto de Gaztañetxuetagana, en el monte Arrola.

Terminamos indicando que en el siglo XVIII existió un molino de viento en el barrio de Las Arenas (en el lugar donde luego se erigió la parroquia de Las Mercedes) destinado a desecar las marismas.

Pasando ahora a Álava, según nuestras investigaciones parece probable que en el alto de Opacua existieran dos molinos de viento y otro en la zona de Irurita, tal y como nos indican los topónimos. Hoy no quedan restos.

Sobre la existencia o no de molinos de viento en la antigua San Sebastián hay distintas teorías. Está demostrado que en 1370 la ciudad recibió permiso real para construirlos, pero se ignora si se hicieron. Fausto Arocena barruntaba que hubo varios en Urgull, cosa harto improbable. El único molino de viento que se ha conocido con seguridad es el que despuntaba sobre el alto de Aiete, junto a "La Cumbre", llamado Aize-errota. Se edificó a principios del siglo XIX y fue destruido con la segunda carlistada.

Según recogió Jimeno Jurío debió existir uno en Artajona ya que en 1300 había un cerro con el nombre de "rueda del viento".

En Olite en 1345 el Concejo decidió construir un molino de viento para uso como batán.

En la Cendea de Galar de Subiza sabemos que en 1581 había un molino de viento.

En San Martín de Unx, en el parque de aerogeneradores de la sierra de Guerinda en el año de 1996 se ha reconstruido totalmente un molino de viento de Olleta, de tipo castellano que se puede visitar.

A partir de los años de los años 1980 se inicia una curiosa moda de construcción de "panémonas", sencillos molinos de viento de eje vertical realizado con material de reciclaje y bidones metálicos (Alegría, 2002, p. 487-500).

Respecto a los molinos de viento de Iparralde, solamente hemos encontrado una referencia en un plano en el que aparece claramente un molino de viento frente a la iglesia de Ciboure, frente al mar, y cuyo topónimo se mantiene.

En base a los datos anteriores señalaremos:

ZonaMolinos de viento
Álava3
Bizkaia10
Gipuzkoa1
Iparralde1
Navarra4
Total19

Al parecer muchos de estos molinos, caso de los de Bizkaia de los que de algunos conocemos sus fechas de construcción se levantaron entre 1726 y 1729, durante un período de pertinaz sequía. Ante la imperiosa necesidad de moler grano para fabricar pan y como quiera que los ríos apenas llevaban caudal, se tomó la decisión de levantar estos artefactos impulsados por la fuerza del viento.

Hoy nuestras cumbres se están poblando de aerogeneradores (Aguirre, 2002, p. 394-399).

Tras su estudio, hemos llegado a la conclusión de que la mayoría de los molinos de viento de Euskal Herría fueron construidos a mediados del siglo XVIII, con motivo de una época de gran sequía que paralizó la práctica totalidad de los molinos de río.