Cinematográficas

Megasónicos

Película de largo metraje producida por Baleuko, productora afincada en Durango, en 1997. Los responsables de este film de animación son Karmelo Vivanco, Eduardo Barinaga, Idurre Cajaraville -producción-, Iñaki Madariaga -animación-, Javier González y Pepón Martínez -dirección- y Ramón Gutiérrez -música-.

Esta película es otra muestra más de la pujanza del cine de animación en Euskal Herria tras los primeros logros realizados en los ochenta a partir del estreno de Kalabaza Tripontzia (1985) de Juanba Berasategi. Megasónicos es un film innovador ya que es el primer largometraje de animación europeo realizado íntegramente por ordenador en 3d. Su estética tridimensional sigue la estela abierta por John Lasseter, autor de la famosa Toy Story (1995). De hecho Megasónicos es considerado el Toy Story europeo. Es una película brillante aunque no se pueda comparar con la obra de Lasseter. Las diferencias de presupuesto fueron en todo caso notorias. Frente a los 2.000 millones de presupuesto y un equipo de más de 200 personas de la película americana, Baleuko tuvo que conformarse con un presupuesto de 100 millones y un equipo de 12 personas. Los cineastas vascos utilizaron el programa Alias Power Animador 3D con el que lograron efectos especiales, travellings, originales movimientos de cámara y, evidentemente, toda la profundidad de campo que ofrece la animación en 3d. Megasónicos se sitúa en un futuro lejano donde la música está prohibida.

Los habitantes de la galaxia reciben diariamente una sesión de hipnosis quedando así su mente y voluntad a merced del tirano Sinteticom. Un día una cuadrilla de transportistas espaciales a bordo del carguero "Amadeus" sufre una avería y llegan a una luna prohibida. Allí habita Takna, un anciano guardián de la música de toda la galaxia que está allí desterrada. Takna saca a la tripulación de su estado hipnótico y les convence para que lleven la música al resto de planetas. Para ello los transportistas tendrán que enfrentarse al ejército del Sinteticom, el dictador obsesionado con destruir ese legado musical. Esta producción de Baleuko destaca, en fin, por su calidad y por su innovación en el terreno del cine de animación. En 1998 logró el prestigioso Premio Goya a la Mejor Película de Animación. También obtuvo premios en Festivales de Los Ángeles y Carolina del Sur.

  • Roldán Larreta, Carlos: El cine del País Vasco: de Ama Lur (1968) a Airbag (1997), Donostia, Eusko Ikaskuntza-Sociedad de Estudios Vascos, Ikusgaiak-Cuadernos de Cinematografía, núm. 3, 1999, 407 pp.