Políticos y Cargos Públicos

Marco Ilincheta, Amadeo

Político navarro nacido en Navascués el 31 de marzo de 1900. Era hijo de familia roncalesa, de Uztárroz. Realizó los estudios primarios y secundarios en los escolapios de Zaragoza (1906-1916) y estudió Derecho en dicha ciudad y Madrid. Obtuvo también los títulos de Magisterio y Comercio, pero no llegó a terminar las carreras de Medicina y Náutica.

Al advenimiento de la República en 1931 es elegido por unanimidad alcalde de Navascués y presidente de la Junta de Veintena. Así comenzaba su larga carrera política favorecida por su buena situación económica. Al constituirse el 21 de abril de 1931 las Comisiones Gestoras de las Diputaciones, Amadeo Marco fue designado componente de la de Navarra por la merindad de Sangüesa, tomando posesión el día 29 -pese a hallarse disconforme con el método de designación- y lo hizo "por el bien de la Patria y por respeto al poder constituido" jurando defender los fueros navarros y los principios religiosos. Presidía entonces la Gestora de Navarra Constantino Salinas Jaca y ese mismo año Amadeo Marco dimitió por motivos religiosos y desavenencias con quienes compartían en la diputación las ideas de la II República.

Ya en plena República se mostró partidario del Estatuto Vasco propiciado para las provincias de Navarra, Álava, Gipuzkoa y Bizkaia. A propuesta suya, el ayuntamiento de Navascués acordó solicitar al Gobierno de Madrid la derogación de todas las leyes abolitorias de los Fueros y el restablecimiento de los derechos y Fueros de Navarra en toda su integridad. Con respecto al Estatuto Vasco se acordó por unanimidad el voto favorable del ayuntamiento en cuantas ocasiones le fue requerido. En 1936 tomó parte en la Guerra Civil como voluntario y fue capitán de Requetés. Por sus méritos en la guerra se le dio la medalla militar individual y otra colectiva, tres cruces de guerra y dos cruces rojas al mérito militar. En mayo de 1940, ya terminada la guerra, fue nombrado diputado foral, saliendo reelegido en las elecciones de 1949, 1955, 1961, 1967 y 1974, siempre por la merindad de Sangüesa a la que pertenece Navascués.

En 1971, habiendo fallecido Félix Huarte, fue nombrado vicepresidente de la corporación provincial por ser el diputado de más edad. En 1978 convino la Diputación Foral con el Gobierno de Madrid que el gobernador civil dejase de ser en lo sucesivo presidente de aquella corporación lo que motivó la designación de presidente a favor de Amadeo Marco. En 1979, y en representación de Navarra, firmó el Real Decreto para la democratización de las instituciones forales, considerado por los políticos navarros como el Primer Amejoramiento del Fuero. Amadeo Marco, de carácter íntegro y de fuerte personalidad, dejó la política en 1979 después de una etapa de gran actividad. Retirado a su casa de Navascués y habiéndose hallado algún tiempo internado en el monasterio de la Oliva murió el 13 de abril de 1987.

Es de señalar que con la dictadura fue Consejero nacional del Movimiento (1941-1955), presidente de OPPOSA, presidente y miembro del consejo de administración de la Caja de Ahorros de Navarra, procurador en Cortes en su condición de Consejero nacional y procurador en Cortes en representación de la Diputación Foral de Navarra. También poseía la condecoración del Águila Azteca que le impuso el presidente de México José López Portillo en su visita a Navarra, su tierra originaria, el 15 de octubre de 1977.

Así mismo era hijo predilecto de Navascués, presidente perpetuo de Aspurz, hijo adoptivo de Uztárroz (valle de Roncal), Bigüezal, Javier y Castillonuevo, presidente honorario de la Junta General del Valle de Salazar y alcalde mayor e hijo adoptivo del valle. En su favor es de señalar que gracias a Amadeo Marco y al párroco de Navascués no fue asesinado ni fusilado ningún vecino de Navascués ya señalados de antemano para ello por los represores que recorrían Navarra de lado a lado con tal fin. Hacia 1980 hizo unas declaraciones al Diario de Navarra que resumen en pocas líneas su postura en el problema Navarra-Euskadi:

"No me parece mal que las tres provincias vascas se unan a su madre, a Navarra, y que juntas integren el Reyno de Navarra. Ah, claro, así no lo quieren. Pues en esa solución, Navarra no perdería nada. Y que nadie diga que reniego de mi origen vasco-navarro. Soy de Roncal, en vasco hablaban mis antepasados. Y ya se sabe, quien a sus antepasados parece, honra merece".