Topónimos

CIÉRVANA

Lugar del municipio de Abanto y Ciérvana (v. éste), partido judicial de Bilbao, Bizkaia
Pob1 1960: 1.276 h.
El monasterio de San Román fue donado a Sancho Ortiz Marroquín por el rey D. Alfonso III, en recompensa por los servicios prestados por dicho señor sobre todo en la batalla de las Navas de Tolosa. Ante la posibilidad de un ataque de naves holandesas contra la costa vizcaína, la Junta general del Señorío de Vizcaya acordó en reunión celebrada el 17 de abril del año 1624 reforzar las defensas de los puertos y costas de Vizcaya, así como nombrar capitanes y oficiales en todas las villas y anteiglesias del Señorio. Fueron nombrados capitanes de Ciérvana, los dos Abantos y San Julián de Muzques, D. Joaquín de Salazar y Muñatones y el alcalde don Sebastián de Manzanal. Las villas protestaron a causa de estos nombramientos, pues ya anteriormente estaba establecido que en caso de guerra los alcaldes fueran los capitanes de sus respectivas villas, entablando pleito con el señorío y dando lugar a que el rey Felipe IV revocara los nombramientos en noviembre del citado año. Ciérvana,junto con Sestao, Santurce y Muzquiz, con los que formaba los cuatro concejos de Somorrostro, decidió en el año 1650 establecer nueva cárcel y conceder mayor jurisdicción a sus alcaldes. Pero los demás concejos de las Encartaciones se opusieron a estas pretensiones y también la Diputación general del señorío se declaró en contra de los proyectos de los cuatro concejos. El Señorío de Vizcaya decidió en el año 1656 fortificar la costa vizcaína, ante el peligro de un ataque de la armada inglesa de Cromwel1. Entre otras medidas se decidió enviar a los puertos diversas cantidades de pólvora. A Ciérvana le correspondieron dos barriles de buena pólvora seca. A raíz de un encuentro entre dos fragatas francesas y una nao holandesa en aguas de Portugalete, en el año 1673, se efectuó un reconocimiento de la costa cercana al suceso. En Ciérvana había cinco piezas de cinco libras de bala, que sólo servían para impedir la entrada de las embarcaciones de remo. De un informe presentado por D. Lope de Andonegui a la Junta general del Señorío de Vizcaya en septiembre del año 1681 sobre la situación de la artillería de la costa, se desprende que Ciérvana poseía cinco piezas de artillería, pero sucias y roñosas por falta de limpieza. Entre Ciérvana, Poveña y Santurce la Diputación general del Señorío de Vizcaya repartió 166 hombres, de los mil que acordó situar en la costa del Señorío, para defenderla de un posible ataque, el 25 de enero del año 1703. De un contingente de marinería de trescientas plazas con que sirvió el Señorío de Vizcaya a la Armada real en el año 1729, desertaron veintitrés individuos de Ciérvana, Somorrostro, Lequeitio, Ondárroa, Mundaca, Plencia y Guecho. La Diputación general de Vizcaya acordó que, en el caso de no encontrar a los fugitivos, los puertos de los que provenían los repusieran con otros. El 20 de abril del año 1639 el Señorío de Vizcaya decidió, entre otras medidas de protección ante un posible ataque a la costa de naves francesas, que toda la gente de las Encartaciones acudiera en caso de rebato a Ciérvana, San Julián de Muzquiz y Santurce. [Labayru, «H.G.S.B.», t. V, p. 281, 374, 406, 476, 506; t. VI, pp. 14, 168]. En la guerra de 1936-1939 permaneció en poder de las fuerzas de la República hasta su ocupación, el 23 de junio de 1937, por la IV Brigada, cuando ya casi toda Vizcaya había caído en manos nacionales.

Ainhoa AROZAMENA AYALA