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Asiain

El casco urbano se dispone en llano, ocupando una amplia superficie, con la iglesia solitaria en uno de sus extremos. En la calle Kostio vemos una casa de sillar bien escuadrado, que se abre en planta baja por un arco de medio punto, dos ventanas en la planta noble, una de ellas con antepecho moldurado, y dos tragaluces en alto. Luce un escudo moderno, en el que una inscripción reza: ARMAS/ DE LOS PÉREZ DE OBANOS/ 1816. Más adelante se adosan dos casas con muros de mampostería y cadenas de sillar en esquinas y enmarques de los vanos. Tienen dos alturas, siendo los accesos de medio punto y rebajado, respectivamente, este último en ladrillo, y las ventanas rectas. Cerca vemos una casa reformada, con vanos modernos rematados con cabezales de madera.

La calle San Pedro presenta también algún somero alineamiento de casas. El edificio más notable tiene planta rectangular alargada, con dos alturas y tejado a dos aguas con limas. Los muros, sin enlucir, presentan sillería de buena calidad, con un acceso rematado con arco de medio punto y ventanas rectas. Ya junto a la carretera hay un caserón de similares planteamientos, aunque los muros son de mampostería y añade una altura más, destinada a albergar un desván. Cerca hay una casita con fachada de sillarejo con dos alturas, que repite el tratamiento de los vanos ya descrito.

Siguiendo por la carretera hacia el centro del pueblo vemos un caserón de planta cuadrada y dos alturas más ático. Los muros van enlucidos, con cadenas de sillar en los lugares acostumbrados, y todos los huecos son rectos, incluido el portalón de acceso. Cerca del cruce de la carretera vemos un edificio palaciego de planta desarrollada, tres alturas más tejado en pabellón. La fachada es de sillarejo bien labrado, con sillares de gran porte en los enmarques de los vanos. El acceso es un medio punto de largas dovelas sin moldurar, en la planta noble hay una ventana y dos balcones, y en el ático tragaluces. Un escudo moderno lleva la inscripción: ARMAS DE YRIBARREN. Cerca se ve una casa de menores pretensiones, que recuerda modelos vistos en el corredor de Sakana-Arakil. Los muros van enlucidos y con cadenas de sillar, la puerta se abre con arco escarzano y las ventanas son rectas, con alero poco saliente y tejado a cuatro aguas.

Al otro lado de la carretera se ve, muy alterado, el antiguo palacio de cabo de armería de Asiáin, que se cita en el Libro de Armería del Reino de Navarra (L.A.R.N. nº 32). En la actualidad consta de una planta amplia y conformada por cuatro alas, que definen un espacio cuadrangular con patio central. Los muros alternan paños de buena estereotomía con otros de simple mampostería, y en la zona que mira al río hay reconstrucciones realizadas en ladrillo y en bloques de cemento. En la parte que da a la carretera podemos ver algunos restos del palacio medieval. En concreto registramos un portalón de gran tamaño y perfil apuntado, con quince cortas dovelas, rematadas en la rosca por una simple moldura achaflanada. Su morfología puede remontarse hasta el siglo XV. Va acompañada en alto de una ventana que procede de la reducción de un ventanal geminado gótico, formado por dos arquillos apuntados con mainel central. La actual fachada se abre por un arco de medio punto muy posterior. En la parte que mira al río se aprecia un torreón bajo de planta semicircular peraltada. Parece ser un dispositivo destinado a reforzar el flanco que mira al camino y al puente sobre el río, edificado seguramente en el siglo XVI. Hemos encontrado trazas de un segundo torreón en el ángulo contrario del mismo lado, y sabemos que en origen los cuatro ángulos estuvieron reforzados por torreones de este tipo. Hasta el siglo XIX el viejo palacio conservó su foso. Sabemos además que este edificio, al que en algún documento se denomina "la fortaleza de Asiáin", fue atacado con artillería al mismo tiempo que el palacio de Arazuri, en el marco de las guerras civiles del siglo XV y debido a la filiación beaumontesa de sus poseedores.

En la carretera de Pamplona se alinean dos casas de desarrollo vertical, con tres alturas más desván. La fachada va en buena sillería en uno de los casos, y en mampostería con cadenas de sillar en el otro. Ambas llevan arcos de medio punto en los accesos y ventanas rectas. En una de ellas se ve un escudo barroco que parece incluir las armas del linaje Yániz. Más adelante se ve una casita de dos alturas que repite tratamiento de muros y vanos, con un escudo que parece incluir partido el escudo con los dos lobos del palacio de Asiáin, y cierra el casco urbano por este lado un caserón muy reformado, que conserva un arco de medio punto y un escudo barroco.

  • Ermitas

Pérez Ollo cita las ermitas de San Gregorio y San Pedro. De la primera de ellas, sita en el término denominado Abaxitas, no resta hoy sino parte de la nave, abierta por ambos lados, rematada con una bóveda de cañón y semienterrada y oculta por la vegetación. De la segunda, hoy desaparecida, sabemos que en el año 1796 el obispo Igual de Soria mandó adecentarla y blanquear sus muros, y que aún en el año 1804 se realizaron en ella algunos enterramientos.

  • Parroquia de la Asunción

La actual fábrica, tardogótica del siglo XVI, sustituyó al parecer a otra medieval preexistente. Participaron en su construcción los maestros Miguel Martíniz de Amasa, Corbarán de Igarabidea y Pedro de Echaburu. La planta, que posiblemente sigue la traza del templo preexistente, es de una única nave, dividida en cuatro tramos iguales, más una cabecera pentagonal. El acceso se ubica en el lado de la Epístola, en su segundo tramo, y enfrente se aprecia el volumen que aloja una escalera intramural para acceder al coro y a la torre. Dos pequeñas capillas se adosan de manera simétrica al cuarto de los tramos, conformando una suerte de transepto. A cada lado de la cabecera se adosan sendas estancias, que ejercieron en su momento de sacristía, más antigua la del lado del Evangelio.

Los muros van en un sillarejo de formato menudo e irregular estereotomía, enlucidos al interior. El acceso a las capillas laterales se realiza mediante arcos de medio punto, que en el caso de la capilla del lado de la Epístola conforma una portada decorada con yeserías de estilo flamígero. Para dar la adecuada iluminación al interior, estos muros van además perforados por una serie de vanos. En el lado de la Epístola registramos un óculo en la cabecera y dos ventanas rectas en los tramos primero y tercero, y un segundo óculo en el muro de los pies. A los pies de la nave se levanta un coro renacentista, con arco de embocadura de perfil escarzano, y en el que el antepecho original ha sido sustituido por una balaustrada de madera.

La fábrica se cubre con cuatro tramos de bóveda de crucería simple, separados por arcos fajones de perfil apuntado. Fajones y nervios apean en ménsulas encastradas en el muro. La cabecera recibe una bóveda de cinco paños, mientras que las capillas laterales se cubren con bóveda de cañón. El sotocoro luce también bóveda de crucería, así como la sacristía vieja, con tracería estrellada en este caso, mientras que la sacristía moderna, situada en el lado de la Epístola, lleva un simple cielo raso.

Al exterior, la torre se levanta sobre el primer tramo de la nave, siguiendo los preceptos de la arquitectura religiosa del entorno medieval de la Navarra rural. Su planta es rectangular, y el fuste es corto y de pesadas proporciones, y se perfora en alto por sendos arcos rebajados para alojamiento de las campanas. Una lonja describe un ámbito delante de la puerta, y se abre mediante un arco de medio punto y grandes dovelas, de sabor civil. La puerta propiamente dicha va cobijada por un arco escarzano, decorado con ovas y dentellones de sabor clásico, que apea sus empujes en dos de los contrafuertes de la fábrica. Consta el acceso de un arco de medio punto con pronunciado abocinamiento, que se salva mediante cuatro arquivoltas baquetonadas, que llevan decoración de follaje y bolas. Apean en otras tantas columnitas por lado, que a su vez llevan basas y capiteles, estos últimos decorados con cabecitas de serafines. Encima, una inscripción reza: ESTA IGLESIA SE HIZO DE LOS BIENES DE LA IGLESIA Y DEL PUEBLO DE ASIAIN, SIENDO ABAD D. JUAN DE DONAMARIA.

En el presbiterio vemos un retablo romanista, bajo la advocación de la Asunción, ejecutado a principios del siglo XVII por Francisco de Olmos y Juan Bazcardo, y que reaprovechó algunos elementos procedentes de un retablo anterior. La arquitectura tiene planta ochavada, para adaptarse al perfil de la cabecera, y consta de banco, dos cuerpos de cinco calles y ático con frontones triangulares y curvos, rematados con pirámides del tipo escurialense. Se estructura mediante columnas de orden corintio, y conserva un sagrario de su primera época. La escultura va en bulto redondo en las tres calles centrales, y en relieve en las de los extremos y en el banco. En el citado banco vemos los relieves de la Oración en el huerto, Camino del Calvario, Cristo a la columna y el Prendimiento. En el primer cuerpo el relieve del Abrazo ante la Puerta Dorada, los bultos de San Sebastián y San Andrés, y el relieve de la Natividad de la Virgen. El friso que separa los cuerpos va con las figuras, recostadas al modo miguelangelesco, de los Cuatro Padres de la Iglesia Latina, es decir San Agustín, San Gregorio, San Ambrosio de Milán y San Jerónimo. En el segundo piso se suceden el relieve de la Anunciación, los bultos de San Miguel y San Gregorio Ostiense, que flanquean a la imagen titular de la Asunción de María, y una escena en relieve de la Visitación. En el ático, como es habitual, vemos un Calvario, además de Santa Bárbara, San Francisco de Asís, San Pedro y Santa Catalina de Alejandría. En el frontón central se encuentra la tabla pintada del Padre Eterno.

En el lado de la Epístola podemos ver un Crucificado romanista, seguramente perteneciente al primer retablo de Blas de Arbizu, luego desmontado y reaprovechado para ejecutar el actual. Cristo se representa muerto, con un buen estudio anatómico. La pila de bautismos es medieval, procedente de la desaparecida fábrica, y consta de fuste cilíndrico, capitel decorado con palmetas, y copa semiesférica sin decoración. Junto a la puerta hay una pila aguabenditera de copa gallonada, propia del siglo XVIII.

En la capilla del lado del Evangelio podemos ver un retablito dedicado a la Virgen del Rosario, protobarroco de mediados del siglo XVII. La traza consta de banco, un cuerpo de tres calles y ático entre aletones, rematado por frontón curvo y partido. Una cartela situada en el banco permite leer: EL AÑO 1654 SE ACABO ESTA OBRA A 14 DE AGOSTO. En cuanto a la iconografía, se compone de tallas modernas, salvo la Virgen del Rosario titular y la Santa Ana del ático, que pertenecen a la época del retablo. En la sacristía, como es habitual, se custodian varias piezas de orfebrería.

  • ASIRON, J.: El palacio señorial gótico en la Navarra rural. Palacios de cabo de armería, torres de linaje, casas fuertes. Tesis doctoral sin publicar.
  • CARO BAROJA, J.: La casa en Navarra, Pamplona, vol. II, C.A.N. 1982, pp. 432.
  • GARCÍA GAÍNZA, M.C.: La escultura romanista en Navarra, Pamplona, Gobierno de Navarra, 1986, pp. 27, 53, 57.
  • GARCÍA GAÍNZA, M.C. (et. alt.): Catálogo Monumental de Navarra, vol. V**, Merindad de Pamplona, Imoz-Zugarramurdi, Pamplona, Gobierno de Navarra, Arzobispado de Pamplona, Universidad de Navarra, 1996, pp. 420-426.
  • PÉREZ OLLO, Fernando: Ermitas de Navarra, Pamplona, C.A.N., 1983, pp. 44.
  • LACARRA DUCAY, Mª Carmen (et. alt.): Navarra, guía y mapa, Estella, C.A.N. 1983, pp. 218-219.
  • MENÉNDEZ PIDAL, Faustino; MARTINENA, Juan José: Libro de Armería del Reino de Navarra, Pamplona, Gobierno de Navarra, 2001, pp. nº 32.

JAS 2009