El lugar se localiza en un leve promontorio, en el que las casas se disponen de manera exenta casi siempre, aunque vemos también una embrionaria alineación, formando calle, en uno de los lados de la carretera. Junto a la iglesia hay una casa exenta, con los muros enlucidos y su planta adaptada al desnivel del terreno. Siguen varias casas alineadas, de las cuales la primera, con muros enlucidos y cadenas de sillar en esquinas y enmarques, muestra dos alturas y tejado a doble vertiente. El acceso consta de un arco de medio punto, sobre el que se ha remetido un escudete con el anagrama de Cristo IHS. El resto de los vanos son rectos, y alguno lleva antepecho moldurado para resaltar su importancia. Otra casa repite formato y tratamiento mural, aunque carece de labras heráldicas. Constituye un bloque prismático de dos alturas, más ático, adaptado al desnivel del terreno, y puede datarse como del siglo XVIII.
En el otro lado de la carretera vemos una casa de similares características, aunque en estado ruinoso, así como un caserón muy remozado, con planta rectangular, vanos agrandados y tejado a doble vertiente, en el que se abre una mansarda moderna.
- Parroquia de San Juan Bautista
Al parecer el templo tiene un origen medieval, del que han quedado algunos elementos aislados, como la portada y la pila bautismal, aunque la fábrica responde a una intervención moderna, tal vez incluso del siglo XIX. La planta, de extrema sencillez, consta de una única nave, dividida en tres tramos de desigual longitud, de los cuales el último hace las veces de cabecera, rematada en testero recto. El acceso se practica desde el lado de la Epístola, en su segundo tramo, y va protegido por un pórtico ligero. La sacristía, por su parte, es una estancia de planta cuadrada, adosada a la cabecera por el lado de la Epístola.
Los muros son de sillería, aunque en el recrecimiento se utilizó un sillarejo más menudo. Algunos paños van enlucidos, siguiendo la estética de la arquitectura civil de la zona, y al interior los muros van también pintados. Se perforan mediante dos ventanas, una de ellas abierta en la cabecera por el lado meridional y otra en el muro de los pies. Son abocinadas y rematan con arcos rebajados. A los pies de la nave se levanta un coro moderno de madera.
La nave se cubre con un tramo de bóveda de arista más dos tramos de bóveda de lunetos de tradición barroca. Van separados por arcos fajones de medio punto, que transmiten sus empujes a los muros exteriores, mediante ménsulas encastradas a media altura y unidas por una imposta que recorre el perímetro del templo.
Al exterior vemos en primer lugar la torre, que apoya sobre el primer tramo de la nave, siguiendo los dictados del tipo de templo rural medieval navarro. Su fuste es corto y macizo, y se perfora en alto con dos medios puntos para alojamiento de las campanas. Se cubre con tejado en pabellón. El pórtico es moderno y lleva estructura de madera y tejadillo simple, y apea sobre un pilar de piedra. En cuanto a la puerta, consta de un arco apuntado cuyo derrame se salva mediante dos arquivoltas que apean en otros tantos pies derechos por lado. Unas molduras muy simples, a la altura del salmer, hacen las veces de capiteles, sin decoración. Data del siglo XIII, y procede del desaparecido templo medieval.
El presbiterio está ocupado por un pequeño retablo del siglo XVII, obra al parecer de Juan Martínez. Su arquitectura consta de banco, un cuerpo de tres calles y ático rematado en medio punto con aletones laterales. Se articula mediante columnas muy decoradas. El retablo va presidido por una talla del San Juan Bautista, flanqueada por dos pinturas sobre tabla, donde se representa el Bautismo de Cristo y la Degollación del Bautista. En el ático hay una talla del Crucificado.
A ambos lados de este retablo mayor hay sendos colaterales, obra del siglo XVIII. Van dedicados al Sagrado Corazón de Jesús y a la Inmaculada Concepción, y la imaginería es moderna, salvo una talla barroca de la Virgen del Rosario.
En el lado del Evangelio podemos ver un Crucificado barroco del siglo XVII, y en el muro opuesto una pila aguabenditera del XVIII, barroca. En el bajo coro hay una pila de bautismos medieval, con fuste cilíndrico muy corto y una taza semiesférica gallonada. En la sacristía se custodian algunas piezas de ajuar litúrgico, y en una dependencia aneja una talla de San Antonio de Papua, barroca del XVIII.
- CARO BAROJA, J. La casa en Navarra, Pamplona, vol. II, C.A.N. 1982, pp. 413.
- GARCÍA GAÍNZA, M.C. (et. alt.): Catálogo Monumental de Navarra, vol. V**, Merindad de Pamplona, Imoz-Zugarramurdi, Pamplona, Gobierno de Navarra, Arzobispado de Pamplona, Universidad de Navarra, 1996, pp. 131-134.
JAS 2009