Concepto

Aguadores

Puede afirmarse que la industria eibarresa es consecuencia, en buena medida, del tradicional dominio de los trabajadores en el manejo de las técnicas de transformación del hierro y de la capacidad de adaptarse a las distintas condiciones de producto mercado que se han dado en el pasado reciente, al menos hasta la crisis, que se manifestó en 1975.

Hasta principios de los años veinte, en Eibar se daba un acusado predominio de la fabricación de armas, hasta tal punto que toda la zona se ha llegado a conocer como la armera. Esta situación tenía graves consecuencias negativas, dado el carácter cíclico de la demanda de estos productos, por lo que, no sin problemas, los eibarreses, hacia 1925/1930, lograron diversificar su industria, iniciando y desarrollando, principalmente, la fabricación de bicicletas y máquinas de coser e impulsando la producción ferretera. Después de la guerra civil y a pesar de las dificultades existentes, desde la falta de trabajadores cualificados hasta la de materias primas, de nuevo los eibarreses se adaptan a las nuevas condiciones derivadas de la política autárquica, desarrollando sus ya habituales producciones e iniciando otras como las máquinas de escribir, las máquinas-herramienta, la industria auxiliar de la automoción o la fabricación de ciclomotores.