Platero del siglo XIV que vivió en Pamplona en la Corte de Carlos III el Noble.
Se cree que tenía tienda abierta. En 1374 realizó un relicario de San Andrés para la parroquia de San Pedro en Estella (Navarra) en colaboración con otros plateros; en 1377 realiza un cáliz de plata, dorado y esmaltado y en ese mismo año ejecuta 12 escudillas de plata y 12 marcos, tazas, aguamaniles, copas y platos. Su sello personal, conservado en un documento de 1386, presenta un San Miguel, con espada y escudo, matando al dragón.