Ganadería fundada a finales del s. XVIII por Joaquín Zalduendo de Caparroso con reses navarras de su mujer, la navarra Juana Pascual, y de Tadeo Guendulain. Divisa amarillo y verde. Los primeros toros de este nombre que se lidiaron en Pamplona, lo fueron en el año 1804 (en 1800 se habían lidiado 6 novillos del mismo). Según Guerrita (Tauromaquia) esta ganadería debió de tener su origen por los años 1750 al 60, fundándose para ello en que "por dichos años vivía su primitivo dueño don Joaquín, y en que, lidiándose en una misma corrida toros de cualquiera de las demás castas navarras, entre ellas la de Guendulain, siempre eran los Zalduendos los que rompían plaza, por considerárselos como más antiguos". Incierto, ya que la ganadería de Zalduendo procedía en parte de la de Guendulain, que es mucho más antigua. Baleztena, en su Los toros en Navarra refiere que, en la corrida regia celebrada en Pamplona en el año 1828, se lidiaron toros de Zalduendo, Guendulain y Lizaso. Primero un toro de Zalduendo con divisa roja (el toro que rompía plaza llevaba siempre esta señal). Protestó Guendulain, alegando que a su ganadería le correspondía este honor, por ser la más antigua. A partir de entonces se tuvo muy presente la razón de su protesta. Al fallecimiento de Joaquín y de Juana, pasó la vacada a su hijo Fausto-Joaquín Zalduendo, a cuyo nombre se lidiaron toros de esta ganadería en Madrid, por primera vez, el 14-07-1817 (Cossío dice que en 1813). A la muerte de Fausto-Joaquín, la heredó su viuda, María Eugenia de la Pedriza, a cuyo nombre fueron lidiados toros en la Corte el 7 de octubre de 1849. Muerta María-Eugenia, la heredaron sus dos hijos, Fausto-Segundo y José-Ramón Zalduendo. Cuando el primero de éstos casó en segundas nupcias con Cecilia Montoya Ortigosa en el año 1867, vendieron ambos hermanos los 79 toros que les quedaban a la plaza de Barcelona, y quedó Fausto-Segundo como único dueño de la ganadería. A su muerte pasó ésta (en usufructo) a su viuda Cecilia, y de esta última, en propiedad, a su hijastro (hijo de Fausto-Segundo y de su primera esposa María Montoya Ortigosa), llamado Jacinto, de quien la heredó en 1917 su viuda María del Carmen Miranda, de Calahorra, la cual designó como representante suyo al ganadero, vecino de Tudela, Martín Amigot Sesma. Los últimos Zalduendos que se lidiaron en Tudela lo fueron el 25-07-1918, con la divisa rojo y azul adoptada a mitades del XIX. Colorados, pequeños, carifoscos, corniblancos y veletos, los Zalduendos constituían el asombro de los públicos y el terror de los lidiadores. "Relance" consideró a esta ganadería como la más brava de España. El historiador taurino García de Bedoya afirma (1850), que "estas reses son las más chicas de Navarra, pero bravas como todas las de aquel país". Según Guerrita, "en la lidia presentan alguna desigualdad en ocasiones, aunque en lo general son estos toros bravos, nobles y muy ligeros. El pelo más general en ellos es el retinto colorado y royo, y alguno negro". Esta ganadería, que conservó pura la casta navarra, y que desde su origen no salió de la familia del fundador, comenzó a decaer hacia 1885. En 1939 fue vendida a don Martín Amigot Serna, conservando el hierro, la antigüedad y divisa originales. En 1946 se hizo cargo de la ganadería su hijo, Javier Amigot Sánchez. En 1965 fue adquirida por la Sociedad Anónima "Villaralto". En 1987 es vendida a Fernando Domecq Solís que, conservando hierro, señal y divisa, elimina todas las reses y forma con la parte que le correspondió de la ganadería de Jandilla. Su actual divisa es encarnada y azul. Fincas "Moheda de Zalduendo", "Cobacha" y "El Puntal", Cáceres. Representante Fernando Domecq Solís. Ver TORO.
Bernardo ANAUT