Escritor en euskera, nacido en Lasarte-Oria (Gipuzkoa) el 4 de agosto de 1975.
Estudió Derecho. Desde muy joven se destacó en los Premios Urruzuno, creados por el Gobierno Vasco para escolares. Fue miembro del grupo literario Lubaki Banda, junto con Garikoitz Berasaluze, Asier Serrano, Xabier Aldai y otros. Ha ganado los premios de cuentos Imajina Ezazu Euskadi (1992), Donostia Hiria (1993) e Ignacio Aldecoa (1998). Su primer libro fue de poesía: Kea behelainopean bezala (Edit. Susa, 1994). También en 1994, publicó el libro de narraciones Paulov-en txakurrak (Erein). En 1995, Radiografiak (Erein), también en prosa, y la novela Beluna jazz (Susa). En 1997, la recopilación de cuentos Telefono kaiolatua (Edit. Alberdania), y en 1998 la también recopilación Bizkarrean tatuariko mapak (Edit. Elkarlanean, 1998). En 1999 publicó su segunda novela: Pasaia blues (Susa). Esta ultima novela la escribió durante una estancia en Nueva York, y mientras tanto redactó varias crónicas sobre esta ciudad para el diario "Euskaldunon Egunkaria", de estilo bastante literario. Posteriormente, aprovechó las anotaciones de aquellas crónicas para escribir un libro inusual, titulado Piano gainean gosaltzen (Erein, 2000), a caballo entre el cuento y la crónica, insertando elementos fantásticos en la descripción de la realidad neoyorkina.
En el año 2001 publicó su segundo poemario (Norbait dabil sute-eskaileran, Edit. Susa).
En lo referente a la poesía, el escritor ha declarado que, así como su primer libro tenía algo de surrealista y un lenguaje más bien barroco, en el segundo buscó un estilo más directo y simple. Se trata de poesías "sobre las miserias cotidianas, sobre el cepillo de dientes", según el poeta, quien ha confesado sentirse deudor de Carver, Bukowski y Maiakovski. Buena parte de los poemas de su libro del 2001 fueron escritos en su estancia en Nueva York varios años antes y reflejan el paisaje y las gentes de aquella ciudad.
En cuanto a la narrativa, y resumiendo los datos ofrecidos por Iratxe Gutierrez Retolaza (90eko hamarkadako narratiba berria: Literatur kritika, Labayru Ikastegia-BBK, 2000), en sus novelas, Beluna jazz y Pasaia blues, Cano juega con dos planos narrativos. En la primera, se cuenta por un lado la vida de un saxofonista famoso, llamado Bob Ieregi; y por otro se narra lo que sucede en un manicomio; además, al comienzo de la novela se da cuenta de un asesinato.
En Pasaia blues, en cambio, nos encontramos con estos dos planos: un grupo de ertzainas que investiga a un grupo armado y las relaciones entre varios miembros de ese grupo, con la presencia incluida de un infiltrado. En la primera de las novelas, Ieregi habla sobre el jazz, y en la otra el infiltrado ofrece su opinión del blues. En ambos casos el narrador es omnisciente e incluso nos da su opinión. Ambas novelas tienen también en común su estructura: se asemejan a un puzzle de pequeños textos. La primera está ambientada en Rotterdam, porque según el autor en el País Vasco apenas hay cultura jazzística y no resultaría muy creíble; y la segunda en Pasai Antxo. Pero también hay grandes diferencias entre las dos novelas: si bien en la primera está bastante presente lo onírico y lo surrealista, en Pasaia blues esos elementos no realistas ocupan un lugar mucho menor. Según Cano, en esta evolución hacia una novelística más realista han tenido mucho que ver sus lecturas de Carver. En su primera novela tuvo la influencia de Lunar Caustic, de Malcolm Lowry, según confesó a la prensa. La novela Pasaia blues tiene bastantes características del género negro, pero finalmente resulta algo así como un "falso policíaco". La prosa de Cano está bastante influenciada por la poesía; abundan las metáforas y las imágenes atrevidas. Otra característica de los textos es su fuerte ironía.
En cuanto a los libros de narraciones breves, Cano ha publicado dos con colaboracones realizadas para el programa Goizean behin, de Euskadi Irratia: Radiografiak (1995) y Bizkarrean tatuariko mapak (1998). El primero ofrece catorce biografías semiinventadas de personajes famosos, y el segundo 49 narraciones acerca de otras tantas ciudades, en las que el autor no ha estado, pero que son recreadas por su imaginación. Telefono kaiolatua (1997), en cambio, ofrece cuentos sueltos en prosa más bien poética, intercalando en ocasiones algunos poemas. La presencia de la muerte es incesante y también aparece continuamente algún teléfono, de ahí el título de la obra. En cualquier caso, al igual que en sus novelas, Cano usa en los cuentos un lenguaje impregnado de ironía y humor.
En el 2000, Cano puso en marcha un recital poético-musical, junto con el cantante Igor Calzada, titulado Uztail oparo ostean. Se trataba de una experiencia minimalista y que vio la luz también en forma de disco, con cuatro canciones y dos poemas recitados. En el año 2001 comenzó a trabajar en los guiones de la serie de ETB Hasiberriak.