Novelista, dibujante y pintora navarra, nacida en Esla, Navarra, en 1921.
Reside en el lugar de Iurrita de Baztán, aunque ha vivido en Pamplona y San Sebastián. Cursó estudios de Derecho en la UNED, aunque no finalizó la carrera, y es Diplomada en Relaciones Humanas.
Vivió su adolescencia en el momento de la guerra civil española. Autora de novelas y cuentos, fue finalista del premio Nadal con la novela Tomás Marbella y del Concurso de Cuentos Ciudad de San Sebastián con el relato Mil machacantes, que figura en la antología de la IX edición. En Tomás Marbella, la escritora planteaba la problemática de la adopción de niños en la Navarra de postguerra.
Ha publicado distintos artículos sobre las más distintas cuestiones en Diario de Navarra, particularmente sobre asuntos de materia educacional. En 2003 dio a conocer una novela escrita en 1965, La familia Gabaldica (Editorial Ttarttalo, San Sebastián). Protagoniza la novela una familia y su asunto central se sitúa en los primeros días de la guerra civil española de 1936, en un pueblo del corazón de Navarra, de donde procede la autora. La vida cotidiana de esta familia, durante los tres años de la guerra compone el núcleo narrativo central.
"En este corazón de Navarra -afirma la autora- la conmoción es enorme durante los primeros días y horas de la guerra. Todos los bajos instintos, hasta las rencillas más pequeñas, se exacerban en medio de una gran desorientación; y comienzan las arbitrariedades. Los Gabaldica son las primeras víctimas con la detención de Marino, el hijo mayor; y el padre, pocos días después, huye cuando van a detenerlo. Los otros dos hijos, Juan y Felipe, se alistan voluntarios para combatir en el frente y así salvar la situación de una familia que queda reducida a la hija y a la madre; mujer, ésta, inteligente y ejemplar, y que ha luchado por substraer a su marido e hijo de las políticas que nada aportaban a sus vidas". Se trata de "una novela retenida por causas obvias, a pesar de las inmejorables opiniones de la crítica, y que ha esperado mejores tiempos para su publicación".
La propia autora ha confesado que, cuando Julio Caro Baroja leyó dicha novela afirmó que no encontraría forma de publicarla hasta medio siglo después, como así ha ocurrido, dada la problemática que plantea en sus páginas. Es autora a su vez de un estudio Cuaderno de relaciones humanas (1973).