Concept

Gascón

J. Antonio del Camino afirma en su trabajo sobre San Sebastián (Diccionario Geográfico-Histórico de España, II, Madrid 1802, 320-321) que:

"... en la unión de Castilla y Gascuña (1202-1204) debe ponerse, al parecer, la época y origen de haberse introducido en San Sebastián y pueblos de alrededor la lengua gascona que fue muy corriente y aún se usó en instrumentos públicos..."

Serapio Múgica, a su vez, un siglo más tarde recoge la opinión del Dr. Camino y añade que la pertenencia de San Sebastián a la diócesis de Bayona se explicaría por razones de lengua, ya que los gascones de San Sebastián eran numerosos y mantenían intensas relaciones con los gascones del otro lado del Bidasoa. Y añade:

"... dígase si no parece justo el que los gascones de San Sebastián se entendieran con Bayona en gascón en todo lo concerniente a asuntos eclesiásticos".

Por su parte J. Mª Lacarra en su estudio "A propos de la colonisation "franca" en Navarre et Aragon", Annales de Midi, 65 (1953) considera que la repoblación de San Sebastián con gascones no tuvo nada que ver con la revuelta de los gascones contra el poder inglés instalado en Bayona en 1152, o el asentamiento de bayoneses en San Sebastián en 1204, como resultado de la política matrimonial entre Alfonso VIII y Leonor de Aquitania, sino que fue el resultado de la política de Sancho VI el Sabio, quien fundó San Sebastián en 1181 con gascones bayoneses y con un propósito muy concreto, la creación de un puerto para su reino.

A su vez Serapio Múgica, autor que se ocupó del tema en diferentes trabajos, siguiendo a Gamón, añade:

"Mejor se puede creer que el lenguaje de los gascones se propagó aquí, porque era el lenguaje de los primeros pobladores que tomaron asiento al pie del Urgull, que también lleva nombre gascón ..."

A pesar del largo espacio de tiempo de su permanencia en la villa donostiarra son pocos los testimonios escritos redactados en gascón que nos han quedado. El Dr. Camino que llegó a conocer el Libro Becerro de San Sebastián antes del incendio del Archivo en 1813, nos dice en su obra Historia de San Sebastián, que en dicho Libro había un documento de 1309 escrito en gascón, que trataba de la Ordenanza sobre el consumo de vino y sidra, así como otros diversos instrumentos del siglo XV con sentencias pronunciadas por los jueces nombrados por San Sebastián, Pasajes y Bayona.

Conocemos dos documentos más, redactados por el notario de San Sebastián, Johan de Bassessarri, en 1301 y 1304 y un tratado de paz de 1328 de los marinos de Bayona con los de San Sebastián, redactado igualmente en gascón y copiado en el Livre des Establissements de la Ville de Bayonne. En el proceso contra las brujas de Fuenterrabía de 1611, estudiado por Juan Arzadún (RIEV, 8, 1918), se cita entre los testigos a Isabel García, la cual estando en presencia del aker, le oyó que llamaba a los de San Sebastián y Pasajes en gascón y a los de Irún y Hendaya en euskera. Ello permite pensar que en el siglo XVII la población de San Sebastián debía ser trilingüe. Por un lado el euskera y el gascón como lenguas populares y por otro el castellano, como lengua oficial y culta.

H. Gavel refiriéndose a ciertos manuscritos de L. Bonaparte depositados en la Diputación de Guipúzcoa, dice que en 1918 localizó una nota relativa a Pasajes, titulada Des gascons à Pasaje. En dicha nota se decía que en Pasajes de San Juan había varias familias que hablaban gascón. Según Georges Lacombe se trataría de pescadores gascones que se habían establecido en Pasajes a causa de las dificultades de navegación que presentaba el Adur por los bancos de arena en su desembocadura. Razón por la cual se afincaron en el puerto de Pasajes de calado más seguro y llegaron a formarse sociedades vasco-gasconas dedicadas a la pesca de ballenas y bacalao. Según H. Gavel, el gascón desapareció completamente en San Sebastián en 1918, siendo de habla castellana la mayoría de sus habitantes, quedando el euskera recluido a algunos barrios. Por el contrario en Pasajes, cuando se perdió el gascón, el euskera fue general.

Serapio Múgica en el trabajo ya citado anteriormente recogió frases en gascón en Pasajes a gentes ya mayores en 1918, como: "Vespeyat avetz?" ¿habéis merendado?; "supat avetz?" ¿habéis almorzado? ; "minchat avetz?" ¿habéis comido?. Entre los topónimos de origen gascón cita: Monte Urgull (San Sebastián, del gascón urgull 'altanero'); Cabo Higuer (cabo de Fuenterrabía, del gascón higuer 'higuera'); Molinao (en Pasajes, del gascón moli nau 'molino nuevo'). Asimismo cita varios nombres de calles donostiarras, como Narrica, del gascón na 'señora'; Enbertrán, del gascón en 'señor'.

Estos testimonios y otros, incontestablemente gascones, se explicarían, según Henri Gavel, por la presencia de pequeñas colonias gasconas de pescadores afincadas entre San Sebastián y el Bidasoa desde la Edad Media hasta comienzos del siglo XX, al borde del mar.