Danse

Danza de la Cadena de Yécora

Danza que se repite numerosas veces en el recorrido procesional y en especial al depositar en sus distintas moradas la figura de La Virgen. Al parecer, antiguamente, también se utilizaba para ir recogiendo, una a una, a las autoridades locales.

Los danzantes evolucionan, al son de la gaita, tras hacer un saludo o reverencia a la imagen de la Bercijana, giran sobre sí, serpentean o se encadenan por filas, emparejándose avanzan al son de las castañuelas y acaban repitiendo el ceremonial saludo.

Esta danza parece que en su forma coreográfica, debido a procesos evolutivos o al gusto personal del maestro de danza, ha experimentado una serie de variaciones que le han dado la actual forma. La denominada "Danza de la Cadena de la Virgen de la Bercijana", como se ha indicado, consta de diferentes partes o ritmos:

La primera evolución es un saludo al unísono de los danzantes en honor de su patrona que inicia y finaliza la danza. Le sigue una serie de movimientos sobre el sitio y cambiando con el compañero, usando un paso clásico de "correcalles" o "pasacalles". Con dicho paso se realiza la evolución principal y ésta le da el sobrenombre de "danza de la Cadena", donde los danzantes por filas se toman de los brazos para impulsarse y moverse de forma serpenteante o formando una cadena. A continuación, enfrentados por parejas y con las manos elevadas, chasqueando los dedos o haciendo sonar sus castañuelas, elevan los pies a la vez que se van moviendo en sentido de la marcha procesional y terminan con la repetición de las dos primeras partes, los pasos en el sitio o cambios con el compañero y el obligado saludo a la Virgen.

Son diversas y muy variadas, este tipo de coreografías particulares realizadas de forma consuetudinaria en los recorridos procesionales (cortejos cívicos, religiosos o mixtos) para acompañar a las autoridades cívico-religiosas y a la imagen religiosa del momento. Otras veces, la función de estas danzas consiste en trasladar o acompañar a las imágenes religiosas o a las personas notables, desde su residencia habitual hasta el punto de inicio de la procesión o acto conmemorativo de la festividad.

Por lo general, la estructura coreográfica de estas danzas se fundamenta en la formación de dos hileras de danzantes que evolucionan en el sentido de la procesión e incluso, yendo y viniendo. Suelen estar dirigidas por un personaje o dos de especial significado (en el contexto geográfico que nos ocupa, suelen ser el ya citado "Cachimorro" y el maestro de danza o "Bastonero"). Danzas singulares y de gran influjo medieval que en ocasiones, aparecen asociadas o integradas en otro conjunto o ciclo de danzas que no poseen este cariz de desplazamiento, como pueden ser danzas de palos, arcos o cintas.

En definitiva, son danzas de acompañamiento (a veces, los danzantes se proveen de castañuelas) que a los sones de un pasacalles, sirven para desplazar y arropar a personas relevantes de la vida local, figuras religiosas o símbolos de gran significado comunitario.