Udalak

ZALLA

Avellaneda.

Respecto al pleito sostenido entre Zalla y Sopuerta sobre la pertenencia del conjunto histórico de Avellaneda, la postura de Zalla es la siguiente: "En 1956 comenzaron las primera obras para rehabilitar la Casa de Juntas de Abellaneda, trabajo que se culminó en 1968, quedando hoy Abellaneda como un auténtico santuario de la historia de Las Encartacions. Con motivo de la inauguración se volvió a revivir el viejo pleito ente los municipios de Zalla y Sopuerta sobre el emplazamiento de Abellaneda. Removiendo los escombros de la obra restaurada, se encontró el viejo mojón de los límites municipales que determina que la Casa de Juntas se encuentra en término del Concejo de Zalla y en cambio la Casa del Corregidor, que tiene su acceso por Zalla, corresponde en una mitad al Concejo de Sopuerta." Javier de Ybarra y Pedro de Garmendia, en su obra Torres de Vizcaya, dan los siguientes datos: "La originaria torre de Avellaneda, denominada Torrejón, que ya no existe, situada en término de Zalla, dominaba la vertiente que desde lo alto de Avellaneda, junto a la senda que va a Santibáñez, mira a dicho concejo, y se levantaba a la izquierda de la carretera bajando hacia Ocharan. Sus propietarios representaban la línea primogénita de la estirpe de Avellaneda, que sucedió en los condes de Miranda y de Castrillo y en los duques de Peñaranda. Remóntase la ascendencia de los Avellaneda a una doña Urraca de Avellaneda, señora de esta casa en la Rioja, casada con don Martín López de Haro, hijo de don Lope Díaz de Haro, noveno señor de Vizcaya, y de su mujer doña Aldonza Ruiz de Castro, y de ahí que por los señores de Vizcaya llevan por armas los Avellaneda, en oro, dos lobos de sable, puestos en palo y cebados de dos corderillos, y bordura de gules con ocho sotueres de oro. En las proximidades de la desaparecida torre de Avellaneda, en el alto del otro lado de la carretera, en término municipal de Sopuerta, pero dominantes hacia Zalla, se levantan edificaciones de la Casa de Juntas de Avellaneda, que modernizadas en el pasado siglo y a principios del presente, están siendo transformadas en la actualidad por la Excma. Diputación de Vizcaya, que desea darlas una traza antigua y que constituyó una Junta que preside don Antonio de Arteche, marqués de Buniel. En este lugar se reunían los primeros encartados so el árbol, y allí se construyó después la Casa Juntera de la Merindad, en la que residía el teniente general de las Encartaciones, y que contaba con Casa-Audiencia, cárcel, torre fuerte, con merino y alcaide que cuidaba de los delincuentes, y capellán que tenía a su cargo la capilla. Hoy el conjunto de edificios lo componen la antigua posada de los junteros, a cuyo lado se levantaba la desaparecida ermita, y delante el también ausente árbol; la Casa del Corregidor, y la propiamente llamada Casa de Juntas de Avellaneda, en la que existe una escuela y un pequeño museo."