Acogido en Inglaterra por Wellington, residió posteriormente en Tours y en París. Muerto Fernando VII, pudo regresar a España a finales de 1833. Estando en Madrid, las autoridades alavesas le solicitaron realizase gestiones para el traslado de la Universidad de Oñate a Vitoria. Perteneció al Estamento de Próceres en la legislatura 1834-1835.
En diciembre del 34 el gabinete Martínez de la Rosa le nombró embajador en Londres para aprovechar su amistad con Wellington y contrarrestar un posible acercamiento del gobierno tory a los carlistas. Durante su misión realizó gestiones para humanizar la guerra, que en abril de 1835 abocaron a la firma del convenio Elliot; también negoció la solicitud española de una intervención militar por parte de los firmantes de la Cuádruple Alianza para acabar con el levantamiento carlista.
El conde de Toreno, sucesor de Martínez de la Rosa nombró a Álava ministro de Marina, cartera que desempeñó por unos meses. Con la caída de Toreno, Mendizábal le propuso para la presidencia del Consejo de Ministros y la Secretaría de Estado, que rechazó. Sí aceptó (octubre de 1835) la embajada en París, con instrucciones de obtener de Francia el paso de tropas gubernamentales por la frontera y el aprovisionamiento de las guarniciones fronterizas, permitir el refugio de tropas hostigadas por los carlistas; y desarmar e internar a los carlistas que entrasen en territorio francés. En 1835 recibió las grandes cruces de Carlos III y de San Hermenegildo.
Con la sublevación de sargentos de La Granja y el restablecimiento de la Constitución de Cádiz, se negó a acatarla, por lo que cayó de nuevo en desgracia. Pasa entonces (septiembre de 1836) a vivir en Tours, conspirando contra el gabinete Calatrava; inicialmente se negó a jurar la Constitución de 1837, acatándola finalmente al año siguiente.
El 14 de julio de 1838 fue nombrado Embajador en Gran Bretaña; renuncia dos años más tarde, retirándose a Vitoria.
Muere en los baños de Barèges (Francia), el 14 de julio de 1843. Sus restos serían trasladados al cementerio de la capital alavesa en junio de 1884.