Concept

Hospicio de Expósitos de Vitoria

El Hospicio de Expósitos en Vitoria, también llamado Ramo de Expósitos, fue fundado en 1778 por Real Cédula de Carlos III y era una institución de acogida a niños huérfanos o abandonados.1

Era una unidad autónoma independiente dentro del hospicio general que atendía a pobres y vagabundos de la ciudad.

Sus promotores fueron un grupo de ilustrados alaveses de la Real Sociedad Bascongada de Amigos del País encabezados por Valentín de Foronda.2

Comenzó a ser dirigido por la Real Junta de Diputación a Pobres y se instaló en el edificio del que fuera Colegio de San Prudencio fundado en 1653.3

Actividad

En 1778 inició su actividad asistencial y contaba con un torno para niños abandonados.

Tras recibir a la criatura, se buscaba una nodriza remunerada que alimentara al niño. Generalmente era ésta una mujer que había perdido recientemente su hijo y todavía tenía leche.

Esta mujer debía portar un certificado de salud emitido por autoridad sanitaria, generalmente el médico de su pueblo, y un certificado moral emitido también por una autoridad que podía ser al alcalde o el párroco del pueblo en el que vivía. Con éstos certificados se buscaba que la criatura tuviera la mejor de las leches posibles y que en el propio acto de la lactancia (como creencia del momento histórico) la nodriza transmitiera al lactante su moralidad y sus valores. 1

A los cuatro años de vida, la nodriza podía prohijar al niño y en caso contrario era devuelto al hospicio donde recibían educación 4 y se les enseñaba un oficio como costureras, maestras o artesanos.

Conseguir la integración social de todos y cada uno de los expósitos fue una obsesión para la dirección del hospicio. A todos se les facilitó educación para poder ser integrados en la sociedad al llegar a la mayoría de edad.1

Sólo los portadores de grandes limitaciones físicas o intelectuales continuaban en el hospicio durante la vida adulta.1

Ya en el siglo XX, la Diputación provincial fundó la Casa Cuna de Vitoria con capacidad para 55 niños y dirigida por el médico vitoriano Heraclio Díaz Atauri.5

Conclusión

El hospicio de Vitoria cumplió la función para la que se fundaron estas instituciones en el siglo XIX que no era otra que salvar la vida del numeroso grupo de niños abandonados de la época.

Sin embargo, presentaba dos particularidades diferenciales:

La primera fue que sus fundadores pertenecían a una sociedad filantrópica como era la Real Sociedad Bascongada de Amigos del País.

La segunda que además de velar por la vida de los niños, se ocupaba de proporcionarles una educación con la que se podían valer en la edad adulta.

Referencias

  1. a b c d Lezaun, Juan. «El Hospicio de Vitoria y su Ramo de Expósitos». Eusko Ikaskuntza
  2. «Foronda y González de Echávarri, Valentín de». Enciclopedia Auñamendi.
  3. «Antiguo Hospicio de Vitoria». Lugares que ver.
  4. Colá y Goiti, José. «El Hospicio de Vitoria». Fundación Sancho el Sabio.
  5. «Casa Cuna». Vitoria en fotos.