Concept

Murallas (version de 1982)

Castillos, efectos, alcaides. Según Yanguas: los de Navarra, cuyos alcaides, o castellanos, se pagaban por el erario en los siglos XIII, XIV y XV, son los siguientes [además de estos castillos, casi todas las iglesias eran otros tantos fuertes] : Ablitas; Aicita, Axita o Agita (en 1474 decía el rey D. Juan II que el castillo de Axita era muga entre Castilla y Navarra y que lo había derruido el condestable D. Luis de Beaumont]; Andosilla: castillo y cuevas. [Cuevas. Eran unas habitaciones abiertas artificialmente en las cortaduras de los montes y cerros inmediatos a los pueblos y en parajes de difícil acceso, y solían servir de asilo, en casos de guerra, para guardar en ellas lo que los habitantes querían sustraer de los saqueos de la gente armada.] Araciel; Arguedas; Araus; Artajo; Artajona; Asa, Acxa o Dacxa [Asa estaba en el territorio de Laguardia; en 1433 el rey dio a su recibidor Nicolau la serna del castillo de Acxa, con su presa y regadío, en el territorio de Laguardia]; Ataun; Azagra: castillo y cuevas; Azcona; Belmecher o Beumerches en Estella; Betelu; Buradon; Burgui; Cadreita; Caparroso; Cárcar: castillo y cuevas; Cascante; Castejón; Castellón, cerca de Sangüesa; Castelrenal en la Baja Navarra; Castillonuevo; Cintruénigo; Corella; Cortes; Desojo; Dicastillo; Echarri-Aranaz; Estella: los castillos de Belmecher y Zalatambor; Falces; Ferrera en Moncayo; Fontellas: torre fuerte; Funes; Gallipienzo; Gárriz en la Baja Navarra; Garayno en la Montaña; Gaulia; Gorriti; Guerga, cerca de Unzue; Huici; Irurita; Irurlegui, situado entre Idoate, Laquidain e Ilundain; Isaba; Labraza; Lana: cuevas; Larraga; Laguardia; Leguin; Leiza; Lerín; Lestaca o la Estaca en la Bardena; Lodosa; Los Arcos; Luxa o Lucxa en la Baja Navarra; Marañón; Maya o Amaya; Mendavia; Milagro; Miranda; Mirapex, en la parte de Tudela a la izquierda del Ebro; Monferrat; Monjardín; Monreal; Monteagudo; Montedarran, entre Baztán y Francia; Murillo el Fruto; Murillo de las Limas; Olite; Ongazarri; Oro; Oyeregui u Oraregui; Ozcorroz, cerca de Lesaca y Vera; Pamplona; Peña; Peñaflor; Peñarredonda, a la parte de Bardenas; Peralta; Petilla de Aragón; Pintano en Aragón; Pitillas; Punicastro; Rada; Renart; Resa: cuevas; Rocabruna; Rocafort, cerca de Sangüesa y otro del mismo nombre en la Baja Navarra; Ruesta; San Adrián; Sanchoabarca; Sangüesa; San Juan, en la Baja Navarra; San Martín de Unx; Santacara; San Vicente; Tafalla; Tiebas; Toloino o Tolonio; Toro; Tudejen, Tudeyen, Turuillen o Turujen; Tudela; Ujué [en el castillo de Tudela, y sobre la capilla de él, tenían los reyes en 1433 una sala llamada el pequeño Paraíso, petit paradis]; Urroz; Yerga; Valcarlos; Valtierra; Viana: torres; Zalatambor en Estella; Zaldiarán. En 1277 había en Navarra ocho castillos llamados mayores. El sueldo de los alcaides solía ser de 7 a 8 libras y de 35 a 40 cahices de trigo al año. Juraban sobre la cruz y evangelios que guardarían bien el castillo: que harían su residencia en él y lo entregarían airado y pagado al rey, bajo la pena del fuero. En el inventario de la entrega del castillo de Tudela, hecha en 1308 por D. Hugo, teniente que fue del senescal de Tudela, a Hutier de Fontanas, caballero y senescal de dicha ciudad, resulta que existía, entre otras cosas, lo siguiente. Una ballesta de torno de cuerno, y dos de torno de madera; cinco ballestas de cuerno de dos pies, y dos de madera también de dos pies; diez ballestas de cuerno de estribera; veinticinco ballestas de madera de estribera; trece cintos de ballestas de dos pies; dos cubiertas de linzuelos para cubrir las ballestas; una arca para meter lorigas: dos molinos guarnecidos de toda su herramienta y picos para moler; dos muelas y una pieza de muela para aguzar cuchillos, nueve lorigas y un lorigon; siete capillos de hierro; dos tornos para armar ballestas; varias escaleras de cuerda; siete lanzas; siete escudos grandes; veintisiete cajas con saetas; un pozador para sacar agua; siete hierros con sus anillos para presos; una gran barra de hierro para lo mismo; una gran nuez de ballesta de garrote; una cuerda de cáñamo para tener los presos; una porra de hierro con cadena; 210 capellinas de madera; 6 cubas de cada seis metros; 74 cuños de monedas; dos pares de astas para tener lanzas; 78 guisarmas en cinco cajas; 140 segures; 2 asadores; 18 bordones el uno sin arpón; 15 estacas para atar caballos; un cepo para tener presos; un añafil en la torre. Entregándose también dos presos de la orden del Temple, el uno de los cuales se llamaba D. Fr. Domingo de Exexa, comendador de la casa del Temple de Ribaforada, y el otro Fr. Gil de Burueta. Otro religioso de la misma orden que había muerto, decía D. Hugo que estaba enterrado en un paraje de la plaza del castillo junto al Porch donde con frecuencia solían oirse los pleitos, añadiendo, que si el senescal dudaba de ello, que era pareillado de facer cavar en dicho lugar, et fer muestra de los huesos. En un inventario del castillo de Estella, hecho en 1339, resulta que había lo siguiente: 109 ballestas de cuerno pintado llamado lerragua; 2 ballestas grandes de torno; un libro dominical grande; una vestimenta de decir misa; un cáliz de plata con su platena y otro de plomo sin ella; un torno de garrote; nueve capieillos de fierro; quince collares de fierro para pescuezos de hombre; una pechuguera de cuerno blanco para caballo; dos venablos; cinco lorigas de caballos y dos fierros que tenían un hombre y una mujer que estaban presos. En 1355 se hizo entrega del castillo de Cadreita al nuevo alcaide Miguel García de Urniza: resulta que había entonces en el castillo 7 escudos viejos; 3 ballestas viejas y una ballesta de cuerno, todas sin guarnición. En 1356, al tomar posesión del castillo de Garayno Miguel Semeniz, se hallaron en él las armas siguientes: tres ballestas viejas. un brazo viejo de ballesta, un cinto viejo, dos arcaces viejos llenos de saetas, una capellina vieja, otra capellina de madera, un torno para armar ballestas, cuatro piezas de madera y un cepo con dos cerrajas. En 1357 los efectos existentes en el castillo de Ozcorroz se reducían a una arca navarrisca que podría caber 3 robos de trigo, una tabla para amasar y una gaiza para tener la sal. En el mismo año existían en el castillo de Lestasa 200 saetas, una campaneta inglesa y un molino de mano. Martín García de Veraiz, portero, dio posesión del castillo de Maya en 1360 a Sancho Martínez de Echevelza, mediante comisión del infante D. Luis: llegado el portero a la puerta mayor del castillo la ferió por tres veces con el anillo de fierro (el llamador); é de partes de dentro, Sancho Sanchez de Lizarazu, escudero, alcaide del dicho castillo, repúsole enta fuera, quien era é que queria; et el dicto portero respondióle que era Martín García de Veraiz, inviado por el infante D. Luis para que le rindiese el castillo y las armas: y en efecto se las entregó y se reducían a unos lares de hierro. En el mismo año el infante D. Luis mandaba al merino de la Ribera, que fuese personalmente al castillo de Sancho Abarca y pusiese, además de las gentes que solía haber en él, veinte hombres que velasen de noche y de día, y que hiciese provisión de ballestas y otras armas; al mismo tiempo había mandado venir a Remón de Mauleón, alcaide de dicho castillo, para hablar con él, y prosigue diciendo al merino: et esto que dicto es, favor luego lo mas celadament, et al menos escándalo que podiéredes, et por Dios que, en todas las vias et maneras que podiéredes, sepades qui et cuales han seido, et son, qui han querido facer el ensay de furtar el dicto castiello, et aqueil ó aqueillos tomédes presos, ó tomar fagades, en cualquiera manera á fin que parezca de vuestra diligencia. A su virtud pasó el merino y visto que el castillo estaba mal aparejado puso doce hombres hasta cumplimiento de los veinte que solía haber, y compró una docena de ballestas de dos palos con las armas reales, y seis de ellas con las culuendas (culatas) forradas, y las otras seis planas a precio de 15 sueldos cada una: una docena de cintos de cáñamo a tres sueldos y dos dineros, y una docena de paveses a dos sueldos el pavés. En 1374 existían en el castillo de Peña 4 ballestas de estriberas sin nueces ni cuerdas, y 4 arcaces de saetas sin plumas. Tomás de Gallar, portero, dio posesión del castillo de Monteagudo a Juan de Ulloz en 1394. Estando aquél a la puerta del castillo clamó una, dos é tres veces, á la puerta diciendo ¿quién está aquí, o quien guarda este castillo? é luego el tenient de Lope Martiniz de Uriz, que se llamaba Lop Abarqua, escudero, dijo, Yo Lop Abarqua; é el dicho portero le requirió para que le dejase dicto castiello por quoanto el rey lo mandaba; el quoal respondió que le placia con quel mostrase mandamiento del rey. Cuando en 1428 tomó posesión del castillo de Garayno Carlos de Beaumont, alférez de Navarra, como alcaide de él, se hallaban los efectos siguientes: dos jaques viejos: siete bacinetes chicos para hombres de a pie sin camaillas o forros: una ballesta vieja: unos hierros para presos; cinco camas sin ropa y una arca vieja sin cubertería. Efectos existentes en el castillo de Pamplona en 29 de julio de 1522. En la cámara de los bastimentos, en las maderas de arriba, había muchas piezas colgadas de vaca que eran 22 vacas. En la estancia más adentro 21 tocinos y medio salados, que hacían once puercos, cuatro cargas de pescado salado, una tinaja pequeña con seis arrobas de aceite, un granero con 350 robos de trigo, dos cubetas de vinagre con 50 cántaros, y cinco cubas de vino tinto y blanco con 380 cántaros. En la casa de la pólvora 20 barriles, llenos de pólvora, con 50 quintales, un quintal y medio de salitre, un quintal de azufre, 60 alcancías para echar fuego, 120 pelotas grandes de cañón, 120 pelotas de culebrina, y 350 pelotas de sacres. En la casa de la munición 18 pedazos de plomo, 400 pelotas de plomo de falconetes y ribadoquines, dos guindaletas viejas, cuatro calderas de arambre que se podía cocer en ellas media vaca, cuatro linternas, seis palancas de hierro, 24 azadones y palas sanos y quebrados, 6 candiles, 25 escopetas con sus frascos, 250 picas, 24 alabardas, 40 libras de mechas, una comporta, un quintal de candelas de sebo, 6 hachas de partir leña, 6 cedazos, dos docenas de cestos de echar tierra para los reparos; 4 barrenas chicas y cuatro azuelas sin mangos. En la capilla de Nuestra Señora 100 coseletes, muchos de ellos sin faldajes, y 80 petos: artillería, un cañón grande y una culebrina desencabalgada, 5 falconetes las ruedas quebradas, tres ribadoquines desencabalgados, dos sacres, el uno cortado por la boca, y nueve cargadores de la artillería con sus atacadores. Los castillos de Navarra, excepto el de Pamplona, fueron derruidos de orden del emperador Carlos V por los años 1523. Hablando en esa época del de Tafalla decía el Consejo de Navarra que había sido derribado. Hubo seis de ellos en la Bardena, llamados Aguilar, Estaca, Mirapex, Peñaflor, Peñarredonda y Sanchoabarca: El castillo de Tudején o Turullén existió en el mojón de Castilla y el de Garaino en los términos de Saldise del valle de Ollo. [4 M.: "Diccionario de Antigüedades del Reino de Navarra"].