Burlada es el núcleo más cercano a Pamplona de todo el valle de Egüés. Emplazada en la orilla derecha del río Arga, la parte antigua de la villa queda en un extremo de la moderna Burlada. Esta parte antigua se ha quedado muy reducida y casi oculta por la parte moderna, con casas muy viejas, algunas abandonadas y otras algo restauradas o ya modernas. Además de varias casas que responden al tipo de vivienda popular, destaca un palacio del siglo XVI con cuerpo horizontal flanqueado por dos torreones y con dos alturas, fachada de sillarejo y sillar con una centrada puerta de medio punto y ventanas de forja antigua en el piso inferior, y en el superior una ventana geminada con arcos conopiales. En algunos documentos aparece mencionado un palacio gótico correspondiente a un Palacio Cabo de Armería adosado a la parroquia por un patio interior y que fue destruido. Este palacio poseía sobre una puerta apuntada un matacán sobre tres ménsulas de rollo que indicaba su carácter guerrero y a los lados ventanas geminadas de tracería gótica. Burlada contó con un hospital de peregrinos de fundación muy antigua, del siglo XII y que permaneció en funcionamiento, por lo menos, hasta finales del siglo XVI. La antigua ermita del Salvador quedó destruida y su solar lo ocupan actualmente las nuevas escuelas.
La primitiva parroquia de San Juan Bautista sólo se puede reconstruir a través de fotografías, ya que no quedan restos. Fue románica con torre prismática y contrafuertes laterales. A ella estaba adosada el palacio anteriormente mencionado. La actual fábrica de la parroquia es moderna, de mediados de los años cincuenta del siglo XX y es obra del arquitecto J. Yárnoz Larrosa. Para saber más visite el artículo dedicado a este templo en la enciclopedia.
La parroquia de San Blas, de nueva construcción, alberga en sus instalaciones varias piezas de interés. Un crismón procedente de una ermita, un sagrario de piedra que procede de Ezcaba y una reja en forma de medio punto. Una curiosa pila bautismal en piedra, procedente de Gardalain, con forma de fuente y con recuadramiento moldurado coronado por frontón triangular, bajo el que se cobija una hornacina y un pedestal de donde brota el agua. Lleva la inscripción IHS/ ANO 1751. Además, en la sacristía se conserva una talla de la Virgen con el Niño romanista de comienzos del siglo XVII que conserva policromía original algo retocada. Por último resaltar la presencia de un Crucificado (82 x 70) barroco de estilo popular.
Carmina RIUS SALETA
La primitiva parroquia de San Juan Bautista sólo se puede reconstruir a través de fotografías, ya que no quedan restos. Fue románica con torre prismática y contrafuertes laterales. A ella estaba adosada el palacio anteriormente mencionado. La actual fábrica de la parroquia es moderna, de mediados de los años cincuenta del siglo XX y es obra del arquitecto J. Yárnoz Larrosa. Para saber más visite el artículo dedicado a este templo en la enciclopedia.
La parroquia de San Blas, de nueva construcción, alberga en sus instalaciones varias piezas de interés. Un crismón procedente de una ermita, un sagrario de piedra que procede de Ezcaba y una reja en forma de medio punto. Una curiosa pila bautismal en piedra, procedente de Gardalain, con forma de fuente y con recuadramiento moldurado coronado por frontón triangular, bajo el que se cobija una hornacina y un pedestal de donde brota el agua. Lleva la inscripción IHS/ ANO 1751. Además, en la sacristía se conserva una talla de la Virgen con el Niño romanista de comienzos del siglo XVII que conserva policromía original algo retocada. Por último resaltar la presencia de un Crucificado (82 x 70) barroco de estilo popular.
Carmina RIUS SALETA