Monarkia eta noblezia

Subh La Vascona

Célebre sultana de Córdoba de la segunda mitad del siglo X, cuando Córdoba alcanza su máximo esplendor y, al decir de Menéndez Pidal, "ejerce una supremacía pacífica sobre toda España y garantiza la tranquilidad general que entonces reinó en la península". Fue la primera de las esposas de Al-Hakam II en proporcionarle herederos; en el año 962 dio a luz a Abd al-Rahmán, muerto a los pocos años, y en el 965 al que luego sería Hisham II, con lo que se convirtió en la primera dama del califato. Sobre la pasión que llegó a sentir el califa por Subh (Aurora en árabe, ¿ "Usua" arabizado?) puede leerse a Ibn Hazm en su Tawq al-hamama ("Collar de la paloma"). Se sabe que vestía, siguiendo la moda de Bagdad, como un efebo y que su esposo le daba el nombre masculino de Chafar. Desde su influyente posición tomó parte activa en los asuntos palatinos del califato y promocionó a un oficial de la Corte denominado Abu Amir Muhammad ben Abi Amir, el que luego sería célebre y todopoderoso Almanzor. Según las malas lenguas de las que se hicieron eco los cronistas, lo hizo su amante a la muerte de su esposo en el 976 y pese al matrimonio del célebre estratega con la hija del general Galib (978). Pero la incontenible ambición de Almanzor, que, nombrado visir, llegó a arrinconar poco a poco al califa, provocaría, con el paso de los años, que el amor de Subh se convirtiera en odio. Trató, demasiado tarde, de que su hijo le destituyera, concertó diversas alianzas en su contra (997), pero no consiguió nada, hallando sólo refugio en la religión y muriendo en las postrimerías del siglo.