Auzoak

ORENDAIN

Barriada del municipio de Guirguillano, partido judicial de Estella, Navarra. Está ubicada a los 1° 50' 27" y 42° 41' 59", al SE. del término y de la capital del mismo, Echarren de Guirguillano, junto a los Altos de Sarriá, en la orilla izquierda del barranco de su nombre, afluente del río Arga.
Población: en 1800 tenía 23 habitantes; en 1960: 3 habitantes.

Iglesia parroquial de San Andrés Apóstol

Edificio gótico, de la segunda mitad del s. XIII, de sillería, con una sola nave dividida en tres tramos y cabecera poligonal.
Bóveda de cañón apuntado sobre arcos fajones que apean en ménsulas a mitad del muro de la nave y bóveda de paños nervados en la cabecera.
Portada gótica, de hacia 1300, en el segundo tramo de la nave de la Epístola; arco apuntado con seis arquivoltas, apeando en columnillas con capiteles corridos decorados con motivos zoomórficos y vegetales.

Melodía de canción recogida por el P. Donostia en Orendain, Navarra. (Euskal Eres Sorta, n.° 193).
Lugar del valle de Mañeru, del 1.er partido de la merindad de Estella. Reino de Navarra.
Nombres. En la documentación medieval recogida por Yanguas y Miranda, recibe los nombres de Orendain, Orindain, Olendain y Olandain.
Noticias medievales
Según consigna Yanguas, en 1196 el rey Sancho el Fuerte fijó sus pechas en común con Muzkitz, Artazu y Zurindoáin o Zurindáin, y le dio fuero para que no se les exigiese otra cosa. En 1234 Teobaldo I lo dio con otros pueblos en cambio a doña Toda Rodríguez por la villa de Cortes y su castillo. Sin embargo, consta que en 1244 el mismo rey, en consideración a los servicios de los labradores de Orendain, les concedió que pagasen anualmente por todas sus pechas 35 cahíces de trigo y otra tanta cebada, de la medida de Pamplona, y 40 sueldos de la moneda que corriese en Navarra, y les prometió que no daría en honor el pueblo a rico-hombre, ni caballero ni hombre nacido en este mundo ni por nacer, sino que fuesen realengos por siempre jamás, y que merino, ni sayón, no entrase en el pueblo a pedir ni llevarlos a labor ninguna; el rey se reservó las colonias o multas, hueste y cabalgada.

Ainhoa AROZAMENA AYALA