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NEGURI

La iglesia de San Ignacio de Loyola construida a finales del siglo XIX es fruto de la explosión de habitantes que el municipio de Getxo soportó durante esta época. Con un aire neorrománico muy acorde con los gustos del momento sufrió varias reformas, llegando hasta nuestros días un templo de planta rectangular, tres naves, crucero y cabecera poligonal. Se cubre al interior con varias soluciones de bóveda soportadas sobre pilares cruciformes y columnas adosadas y su decoración es llamativa siguiendo el estilo imperante con vegetales y geométricos en capiteles, balaustres, coro, etc. Tiene tres accesos, dos laterales y uno a los pies, el principal, que está inserto en el pórtico que genera el primero de los cuerpos de la torre campanario mediante arcos de medio punto. Ésta es de planta cuadrada, tres cuerpos y escalonada en altura, siendo su cubierta un tejadillo de sillar de tipo piramidal. Los vanos son en su totalidad de medio punto. Completa el patrimonio religioso la iglesia de Nuestra Señora del Carmen, que se trata de un templo de estilo nórdico diseñado por Emiliano Amann en 1909, de tres naves separadas por columnas, artesonado de madera y torre campanario exterior cuya parte baja enmarca el acceso principal a los pies. Alberga imagen de la Virgen obra de Quintín de Torre.

Neguri alberga el nuevo palacio consistorial de Getxo realizado entre 1917 y 1928 debido a diferentes contratiempos y consecuencia del escaso espacio que el anterior ayuntamiento tenia tras el auge demográfico de principios de siglo. El resultado fue una construcción muy acorde con lo que durante las décadas anteriores se estaba realizando en el municipio. De planta rectangular y tres alturas más un sótano para salvar el desnivel del terreno, se trata de un edificio regionalista, ecléctico, en sus elementos, y aire culto con algunas partes ciertamente reseñables. Totalmente realizado en sillar y techado con varias cubiertas todas de teja roja, tiene tres cuerpos diferenciados, el central más bajo que los laterales. Aunque no estrictamente, es simétrico en su retícula de vanos, destacando la arcada de triple arco rebajado de la planta baja en su parte central, o todos los huecos del último piso, logias en sus cuerpos laterales, en medio punto, y semicirculares en su centro, éstos enmarcados entre frescos con motivos vegetales. El resto de vanos son adintelados encuadrados en orejetas y algunos están protegidos con rejería de hierro a juego de las balconadas. El cuerpo de la izquierda, ligeramente adelantado al resto tiene cierto aire militar que recuerda a las casas-torre, con blasón municipal en la fachada, mientras el de la derecha, más palacial tiene la cornisa decorada y está flanqueado por pináculos en los extremos.

La vivienda culta se desarrolla en Neguri de forma importante desde finales del siglo XIX y es sin duda lo más destacable del patrimonio artístico. Como consecuencia del impulso que la burguesía vizcaína dio a esta zona como lugar de veraneo y residencia surgió un conjunto de palacios y viviendas nobles único en Bizkaia en el que desarrollaron su labor los más importantes arquitectos del momento (véase Getxo).

Manu CASTAÑO GARCÍA (2006)