Del resumen de las visitas de inspección efectuadas en 1860, por el inspector Julián de Ordozgoiti, se desprende que fueron un total de 177 las escuelas visitadas en Álava. La asistencia a las escuelas era mayor en la capital que en la provincia. El sistema de enseñanza, al igual que ocurre en Bizkaia y Gipuzkoa, era predominantemente el simultáneo, seguido del mixto según el tamaño de los grupos, aunque el sistema individual continúa aplicándose en pueblos pequeños. Los premios y castigos utilizados en las escuelas, según declaración de los maestros, tienen una gran variedad: cuadros de honor, retenciones, de rodillas, alabanza, billetes, avanzar puestos, leer máximas de moral, etc.
En ninguno de los informes emitidos por la inspección se hace consideración alguna sobre la utilización del castellano en las escuelas, aunque se insiste en la mayoría de ellas que se adopte, para la enseñanza de la gramática, el texto legal, es decir, la gramática de la Real Academia española.
La actividad del inspector de Navarra, Gorgonio Parra y Carazo, natural de Segovia, y que ocuparía el cargo entre 1875 y 1891, también debe ser destacada. En 1882 la Diputación lo designó para asistir al Congreso Pedagógico Nacional en Madrid. Este inspector, en 1886, confeccionó un mapa geográfico-estadístico-escolar, por el cual recibiría la Cruz de Caballero de Carlos III, así como premio en las exposiciones de Barcelona y París. Dicho mapa, de grandes dimensiones, se trata de una joya de precisión y detalle, donde figura la distribución de las escuelas por los pueblos de Navarra.