Prosopografía de la emigración vasca. Emigrante, cocinera, vaquera, y pastora en el rancho Beverly de Idaho, nacida en Mendexa cerca de Lekeitio (Bizkaia), en 1928.
Recuerda la Guerra Civil de 1936-1939 y las bombas que caían, habiendo, incluso, una de ellas matado al Alcalde del pueblo, mientras visitaba a la familia Arriaga.
Recuerda también cómo escondían comida en el baserri (caserío) y cómo de noche caminaba 10 kilómetros por monte, con un burro cargado de cereales, a fin de moler harina clandestinamente. No pudo asistir a la educación primaria por necesitarse brazos en el caserío.
A los 17 años aprendió el castellano al aceptar su primer empleo como niñera en una familia adinerada de la zona. Permaneció casi 7 años con esta familia. Dejó el empleo tras morir el ama de casa y ser criticada por la cocinera por "ser vasca", y volvió a su Mendexa natal.
Conoció al que sería su marido en Lekeitio y casaron en Urkiola (Abadiño, Bizkaia) en 1950. Decidieron emigrar a pesar de las reticencias de Edurne. Fue pues, un alivio que un hermano les acompañara.
La idea que se tenía de América era que se trataba de gente rica, de millonarios que no trabajaban, e importantísimo para Edurne, que contaban con electrodomésticos y que la cocina era fácil.
Salieron en un barco británico, el Elizabeth II, y llegaron a Nueva York tras estar 6 días mareados, descansaron tres en una pensión vasca, y tomaron un tren hacia Boise (Idaho).
Una vez de allí, Edurne trabajó como cocinera en el Rancho Beverely Sheep para 25 vaqueros y pastores. No solo no contó con electrodomésticos; tampoco tuvo ayuda ninguna. Inclusive llegó a matar reses y a convertirse en carnicera. La calefacción de la casa consistía en una estufa que le obligaba a levantarse por las noches varias veces a abastecerla de leña. Su mundo no había mejorado como se le había prometido. Sus hijos nacieron en Boise pero se criaron en el rancho.
Gloria TOTORICAGÜENA EGURROLA
Recuerda la Guerra Civil de 1936-1939 y las bombas que caían, habiendo, incluso, una de ellas matado al Alcalde del pueblo, mientras visitaba a la familia Arriaga.
Recuerda también cómo escondían comida en el baserri (caserío) y cómo de noche caminaba 10 kilómetros por monte, con un burro cargado de cereales, a fin de moler harina clandestinamente. No pudo asistir a la educación primaria por necesitarse brazos en el caserío.
A los 17 años aprendió el castellano al aceptar su primer empleo como niñera en una familia adinerada de la zona. Permaneció casi 7 años con esta familia. Dejó el empleo tras morir el ama de casa y ser criticada por la cocinera por "ser vasca", y volvió a su Mendexa natal.
Conoció al que sería su marido en Lekeitio y casaron en Urkiola (Abadiño, Bizkaia) en 1950. Decidieron emigrar a pesar de las reticencias de Edurne. Fue pues, un alivio que un hermano les acompañara.
La idea que se tenía de América era que se trataba de gente rica, de millonarios que no trabajaban, e importantísimo para Edurne, que contaban con electrodomésticos y que la cocina era fácil.
Salieron en un barco británico, el Elizabeth II, y llegaron a Nueva York tras estar 6 días mareados, descansaron tres en una pensión vasca, y tomaron un tren hacia Boise (Idaho).
Una vez de allí, Edurne trabajó como cocinera en el Rancho Beverely Sheep para 25 vaqueros y pastores. No solo no contó con electrodomésticos; tampoco tuvo ayuda ninguna. Inclusive llegó a matar reses y a convertirse en carnicera. La calefacción de la casa consistía en una estufa que le obligaba a levantarse por las noches varias veces a abastecerla de leña. Su mundo no había mejorado como se le había prometido. Sus hijos nacieron en Boise pero se criaron en el rancho.
Gloria TOTORICAGÜENA EGURROLA