La Iglesia de Santa María Magdalena de Arrigorriaga, templo parroquial del municipio, tiene su origen mítico en la batalla de Arrigorriaga (hacia el año 870), donde según la leyenda, serían sepultados los nobles vizcaínos que murieron en la reyerta. Esta primera referencia, no tiene ninguna base demostrada, y no aparece documentada oficialmente hasta principios del siglo XII, en la que es cedida al Monasterio de San Salvador de Oña. A partir de aquí y hasta la actualidad, sobre todo en los siglos XVII y XVIII, ha sufrido innumerables reformas y arreglos, dejando una construcción ecléctica en cuanto a estilos y épocas.
Se trata de un edificio de planta cruciforme, con dos dependencias adosadas a los laterales a modo de crucero a la altura del segundo tramo de la nave, cabecera rectangular y cubierta a dos aguas. A sus pies se levanta una torre-campanario que combina mampostería y sillería, con troneras en su parte inferior, doble alineación de ménsulas en su tramo medio y campanario muy austero de tipo herreriano con vanos de medio punto para campanas rematado con cuatro chapiteles piramidales y tejadillo de pizarra con campana y cruz de hierro. El resto de la iglesia es de mampostería, jalonada con varios contrafuertes de sillar con talud. Interiormente la nave está cubierta con bóvedas de crucería en cada uno de sus tramos, salvo en el crucero que son apuntadas, apoyadas todas sobre pilastras de tipo cruciforme. Los vanos, tanto de ingreso como de iluminación son en arco apuntado, destacando los aparecidos en el coro, de pequeño tamaño y geminados, que podrían datarse de principios del siglo XVI. Un pórtico moderno recorre gran parte del perímetro, jalonado de arcos carpanel y con varias dependencias en su parte superior.El arte mueble viene definido en primer lugar por el sarcófago y la estela que se encuentran en el pórtico. El primero de ellos, según la misma tradición que sitúa el origen de la iglesia en la batalla de Arrigorriaga, sería el sepulcro del Príncipe Ordoño de León muerto en ella, aunque siguiendo su tipología y descartando orígenes legendarios, se podría datar en el siglo XIII. Posee tapa triangular con una cruz esculpida, y se encuentra sobre siete pequeñas columnas que le sirven de apoyo. Con respecto a la estela (aunque fue encontrada en la Ermita de San Martín de Finaga de Basauri, la analizamos por ser su lugar actual) tiene dos caras, una de ellas con inscripción que según Gómez Moreno se podría fechar en el año 1072 y otra con decoración: una cruz patada inacabada dentro de circunferencia ornamentada en su perímetro con decoración de picos. Otras dos estelas encontradas bajo su nave se encuentran fuera del municipio (Ermita de santa Cruz de Zeberio y Museo Arqueológico, Etnográfico e Histórico de Bilbao). El retablo barroco del altar mayor también merece mención, situándose su fecha de ejecución en el año 1692. Tiene cinco calles y ático, sobre sotabanco y predela, calles distribuidas por columnas salomónicas de gran tamaño y masividad de elementos decorativos. Culmina en el ático con un Cristo crucificado.
- Barrio Loza, J. A.(dir.): Bizkaia: Arqueología, urbanismo y arquitectura histórica. Vol. III. Bilbao y su entorno. Las Encartaciones, Bilbao, Diputación Foral de Bizkaia, 1989.
- Ibarra y Berge, J.: Catalogo de Monumentos de Vizcaya, Bilbao, Junta de Cultura Vasca, 1958, 2 v.
- Ramos Martín, F.: Monografías de Pueblos de Bizkaia. Monografía de la Anteiglesia de Arrigorriaga, Bilbao, Diputación Foral de Bizkaia, 1993, 270 pp.
- Zabala Uriarte, A. (dir.): Monumentos de Bizkaia, Tomo III, Bilbao, Diputación Foral de Bizkaia, 1987.