Religiosos

PRIMO DE RIVERA, Fernando

General del ejército español y primer Marqués de Estella, nacido en Sevilla el 24 de julio de 1831. En 1868 asciende a coronel en recompensa por los servicios prestados restableciendo el orden, en 1869 a brigadier por los prestados contra la insurrección republicana en Zaragoza. Por ese tiempo comienzan en Euskal Herria a operar las primeras partidas carlistas y Primo de Rivera marcha a luchar contra ellas. Tomó parte en el combate de Oroquieta obligando a los carlistas a repasar la frontera el 4 de mayo de 1872. Otro éxito fue el obligar a rendirse a los guerrilleros Redondo y Elío en Aranaz (Navarra). Toma parte en las acciones de Mañaria y Oñati destruyendo en la sierra de Urbasa a las fuerzas de Carasa y Lizarraga. En julio de 1872 fue recompensado ascendiendo a mariscal de campo. Prosiguió su persecución a los carlistas tanto en Vizcaya como en Alava, ahora por los valles de Cuartango y Villarreal, batiendo, además, en las cercanías de Lekeitio (Bizkaia) a los restos de las fuerzas vencidas, mandadas por Goiriena. Una vez desaparecidas las partidas carlistas de esa zona, dimitió del cargo de Capitán General de las Provincias Vascongadas y del mando del ejército del Norte, permaneciendo de cuartel hasta enero de 1873. Recibió el encargo de perseguir una importante partida mandada por Ollo y Radica. Marchó de inmediato sobre el pueblo de Aia defendido por 1.500 hombres. Al poco tiempo pidió el pase a situación de cuartel pero ya unos meses después, en septiembre, se le destina de nuevo al ejército del Norte tomando el mando de la división de la Ribera navarra. Atacó al enemigo en Allo, Dicastillo, Baigorri, Lanaja y Oteiza. Se distinguió en la famosa batalla de Montejurra del 7 de noviembre de 1873 mandando la vanguardia y el ala derecha del ejército mereciendo por ello la gran cruz roja del Mérito Militar. Otra de sus acciones militares fue la toma de Laguardia (Alava) cuyo asedio se decidió a los tres días al abrir una brecha por donde entrar. El 29 de enero es nombrado capitán general de Burgos con vistas a secundar el plan del general en jefe para lograr levantar el sitio de Bilbao. De nuevo vuelve a Euskalerria tomando posiciones de vanguardia en los altos de la Concepción y pueblo de Ontón. De inmediato libra duros combates, logrando avanzar hasta Somorrostro (Bizkaia.) a donde llegó el Duque de la Torre para hacerse cargo personal del ejército. De inmediato confía a Primo el mando del ala derecha. Toma en días sucesivos las alturas de Cortes y el pueblo de Putxeta. En el ataque de San Pedro de Abanto cae gravemente herido de un balazo en el pecho, lo que le vale el ascenso a teniente general. Su nuevo empleo es el de capitán general de Castilla la Nueva, momento en que es proclamado en Sagunto rey Alfonso XII. Ante la nueva situación, sale de Madrid el 19 de enero de 1875 para mandar el segundo cuerpo del ejército del Norte. Una vez en Tafalla (Navarra.) su primera acción es la de sorprender los altos del monte Eskintza apoderándose de los pueblos de Oteiza, Lorca y Lácar, rechazando a los carlistas. Es sorprendida, sin embargo, su extrema vanguardia en esa última localidad y acude personalmente al lugar de la batalla conteniendo el avance y evitando un desastre. El 6 de marzo de 1875 se hace cargo de la Capitanía General de Madrid. En diciembre es nombrado comandante en jefe del segundo cuerpo de ejército de la derecha para ir después a Navarra y entrar en acción. Desde Tafalla ataca la línea enemiga desde Artazu a Arróniz provocando encarnizados combates que le valen la caída en su poder de Santa Bárbara de Oteiza. Después de esta acción emprende la marcha a Estella que ocupa tras ásperos combates y lo mismo Montejurra y sus fuertes. La toma de Estella el día 19 de febrero de 1876 le valió el título de marquesado de Estella y la Gran Cruz de San Fernando. El día 1 de abril vuelve a ser Capitán General de Castilla la Nueva en cuyo mando permanece hasta el 2 de marzo de 1880 en que es nombrado gobernador general y capitán general de Filipinas. En 1907 desempeña la cartera de Guerra en un gobierno presidido por Maura, volviendo en 1917 a encabezar el mismo ministerio con Dato. Posteriormente era nombrado Presidente del Consejo Supremo de Guerra y Marina, cargo que no abandonó hasta morir en Madrid el 23 de mayo de 1921.

Bernardo ESTORNÉS LASA