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Euzkadi

Diario nacionalista del PNV editado en Bilbao desde el 1 de febrero de 1913.

Constituyen el consejo de redacción José M.ª de Goya, Luis Arroyo Olabe y Javier Gortazar, siendo su mentor más caracterizado hasta 1927 Engracio Aranzadi "Kizkitza". Reflejo, a grandes rasgos, de comunión nacionalista, será promocionado por la sociedad "Euzko-Pizkundia" y financiada por los fondos de prensa del EBB, Sota y la acaudalada Victorina Larrinaga. Su primer redactor jefe en castellano fue Alfredo Echave y en euskara Evaristo Bustinza "Kirikiño". Entre los diversos colaboradores pueden hallarse las firmas de Manuel Aznar, Juan Bilbao, Juan de Irureta, José Larrea, José Gorostidi y Pedro Malaechevarria. Al sobrevenir en 1921 la separación en dos de los seguidores de Arana, "Euzkadi" fue el portavoz de comunión, mientras "Aberri" lo fue del PNV.

En su plantilla de colaboradores van ingresando Crisanto Lasterra, Ramón Fuente Ercoreca, Luis Esnaola, Pedro Rico, Beascoechea, Juan de Arámburu y Casimiro Ullibarri. Dirige P. Ramirez de Olano y marca la pauta ideológica Engracio de Aranzadi. En vísperas ya de las elecciones municipales que darán el triunfo a la República, este periódico manifiesta la indiferencia del nacionalismo por una u otra forma de gobierno. Luego este diario impulsó desde el primer momento la campaña de los municipios vascos en pro del Estatuto vasco de Autonomía. En las elecciones del 28 de junio de 1931, su director, Pantaleón Ramírez de Olano, fue designado por la Comisión de alcaldes vascos para formar parte de la candidatura constituida en Alava en defensa del Estatuto de Estella. En los primeros días del mes de noviembre de 1932 apareció en el periódico "El Socialista" un artículo en el que se acusaba al nacionalismo vasco de unos hechos ocurridos en Bermeo. A ello contestó "Euzkadi" con las siguientes palabras:

"Del cúmulo de falsedades que preceden sólo queda en claro que los socialistas no quieren el Estatuto. Siempre lo hemos entendido así como de otros sectores lo entendemos... Unos habían prometido una autonomía como el País Vasco no podio soñar. Otros llevaban en sus programas la reintegración foral. Todos eran esclavos de sus promesas hechas sin mucha intención de cumplirlas. Sólo el nacionalismo se ha mostrado sincero. En Lizarra como en Iruña. Antes como ahora. En todo momento. Y a ello debe su incremento. Si este incremento asusta a los socialistas, disgusta a tradicionalistas, sabe mal a los republicanos ¿por qué sandia razón han de descargar su mal humor hablando de la torpe conducta del PNV? ¿No serán ellos los torpes y los miopes? ¿O se habrá perdido tanto en Euzkadi la sensibilidad política que el pueblo prefiera a la habilidad de los otros la torpeza nuestra?

En el lugar de quienes nos combaten, nosotros reflexionamos sobre esté hecho y obraríamos en consecuencia: Lo que no haríamos nunca es emplear la falsedad como "El Socialista" lo hace. En Bermeo como en San Salvador del Valle, como en todos los sitios las agresiones sangrientas han partido de los antinacionalistas. Es una cosa tan comprobada que sólo mintiendo puede sostenerse lo contrario, para fundamentar en esta mentira una aminoración repentina en las locas ansias autonómicas hasta ahora fingidas. Pero ya es tarde. Podrán multiplicarse los hechos, elevarse hasta el infinito las persecuciones. No pasarán de ser insignes torpezas con las que nosotros ganaremos tanto cuanto pierden los demás, incluyendo en los demás el mismo prestigio del poder público".

Con motivo de las elecciones organizadas por los Municipios vascos para el 12 de agosto de 1934 y que fueron prohibidas por el Gobierno, este periódico fue multado con 5.000 pesetas por un artículo publicado bajo el título: "La verdadera maniobra en el pleito.-Informaciones falsas, noticias tendenciosas, defensas interesadas y demás artimañas puestas en juego para desvirtuar la actitud de los Ayuntamientos y hacer fracasarla elección señalada para mañana". Este mismo tipo de sanciones se repitieron en varias ocasiones. Al sobrevenir la guerra civil siguió publicándose hasta junio de 1937 y, en Barcelona, desde 1938-1939. En sus talleres aparece, desde el 6 de julio de 1937, "El Correo Español", diario de FET y de las JONS.