Écrivains

Pérez de Lazarraga, Juan

Juan Pérez de Lazarraga (ca. 1547 - 1605). Señor de la Torre de Larrea en Álava; llamado El poeta.

Procede del linaje de los Lazarraga, conocida familia perteneciente a la pequeña nobleza alavesa. Esta familia se desarrolló a la sombra de los señores de Guevara y, aunque su solar originario se sitúa en Oñate, los encontramos ampliamente representados en la llanada oriental alavesa ya desde 1439.

Sus padres, Pedro Pérez de Lazarraga y Elena López de Uralde Ordoñana, contrajeron matrimonio el 7 de octubre de 1546; considerando que Juan era el mayor de los cinco legítimos de la segunda esposa de su padre, y que éste había engendrado ya anteriormente otros hijos, legítimos e ilegítimos, el investigador Pruden Gartzia concluye que Juan Pérez de Lazarraga debió nacer en 1547; Patri Urkizu, por su parte, propone los años 1548 y 1549 como fechas de nacimiento más probables; José Luis Vidaurrazaga, más prudente, proponía una horquilla más amplia, entre 1547 y 1550.

Hasta la fecha de la boda, nada sabemos de su vida, excepto que en el año 1567 se encontraba seguramente en Madrid, según una anotación encontrada en uno de sus manuscritos. En 1575 se casó en Arriola con Catalina González de Langarica y Vicuña, con quien tuvo dos hijos, Agustín y María; el hijo le siguió como señor de la Torre de Larrea, y la hija desposó con Juan Velasco y Galarreta. El poeta Lazarraga falleció el 12 de abril de 1605.

Conocemos dos obras compuestas por Juan Pérez de Lazarraga: una crónica genealógica del linaje de los Lazarraga (redactada en castellano) y una colección de obras literarias (escritas en su mayor parte en lengua vasca, y en menor medida en castellano). Se ha escrito acerca de una tercera obra relativa a la historia de Álava, pero no hay datos seguros sobre ella, y en cualquier caso no se conocen ejemplares del trabajo mencionado; es posible que no sea una obra diferente de la propia crónica genealógica.

El título completo de la relación genealógica es, según el ejemplar inédito del Archivo Histórico de la Diócesis de Vitoria (sig. 5041-1), como sigue: Relación histórica de las casas y apellidos de Lazarraga (privilegio de la Fundación de la Torre de Larrea dada en el año de 839), linage de Erdoñana, de los Otaloras y Zuazo Gamboa, de los Velascos, de los puestos y dignidades de unos y otros, todo con remisión a documentos y otras cosas perteneciente a ella. Este ejemplar es, seguramente, el original escrito de su puño y letra por el propio Juan Pérez de Lazarraga, pero se conocen copias en diferentes archivos públicos y privados, como son el de la Biblioteca Nacional de Madrid (Ms. núm. 11.263; 1601, 5 de marzo) o el del archivo del Palacio Lazarraga de Oñate (actualmente propiedad del Duque de Sotomayor); todos ellos están siendo estudiados por el señor Borja Aguinagalde.

La señora María Comas transcribió y publicó en 1936 una parte sustancial del ejemplar de la Biblioteca Nacional de Madrid. Según esta investigadora, la obra debe ser datada entre 1589 y 1601. Fue redactada en castellano por Juan Pérez de Lazarraga, y continuada posteriormente por su yerno Juan Velasco. El título es transparente respecto al contenido: la obra pretende ensalzar las hazañas de la familia y su antigüedad. La sucesión de los miembros principales de la familia proporciona a la obra su línea argumental central, en torno a la cual van pasando cónyuges y descendientes; el relato es aderezado en ocasiones con anécdotas interesantes.

Es su otra obra, sin embargo, la que ha revalorizado el nombre de Juan Pérez de Lazarraga. Se trata del que se ha venido en llamar Manuscrito de Lazarraga, tras su presentación en público el 18 de febrero de 2004 por parte de la Diputación Foral de Gipuzkoa, quien adquirió para la Biblioteca Koldo Mitxelena de Donostia la obra descubierta por el señor Borja Aguinagalde, por lo que se sabe, en la tienda de un librero anticuario de Madrid. La presentación del manuscrito constituyó en sí mismo un acontecimiento mediático importante, totalmente novedoso en la historia de la filología vasca: el eco del descubrimiento llegó a todo tipo de medios de comunicación y el manuscrito en su totalidad fue puesto inmediatamente a disposición de todo tipo de público, en un CD-Rom el mismo día de la presentación ante la prensa, y pocos días después en Internet. Los primeros informes técnicos de los especialistas estaban en Internet también dos días después de la presentación: el historiador Borja Aguinagalde realizaba un estudio paleográfico de urgencia, y proponía una datación (1564-1567) y la atribución a Juan Pérez de Lazarraga; el filólogo Joseba Lakarra presentaba una primera aproximación filológica, destacando la importancia del manuscrito para los estudios de literatura, dialectología e historia de la lengua vasca, en el contexto de los textos vascos anteriores al siglo XVII conocidos. La editorial Susa necesitó pocos meses para publicar en su página web Armiarma la primera transcripción completa del texto, elaborada por Iñigo Landa para los aficionados a la literatura. La editorial Erein comercializó antes de finalizar el año una edición preparada por Patri Urkizu, que presentaba un estudio de la obra firmado el 4 de mayo de 2004, y los textos en grafía moderna, reorganizados y acompañados de notas explicativas poco sistemáticas. Finalmente, Pruden Gartzia ganó el Premio Juan Zelaia de ensayo con la obra Lazarraga. Ernazimentua euskaraz (defendía que la obra de Lazarraga prueba la existencia en Álava y en el País Vasco, en el siglo XVI, de un renacimiento incipiente que utilizaba la lengua vasca). Sin embargo, aunque se han publicado también otros estudios parciales, la fijación del texto sigue aún pendiente y sigue siendo necesaria una edición fiable, escrupulosa y honesta, que procure despejar los numerosos pasajes obscuros del texto, enmarañado por dificultades paleográficas y lingüísticas.

El manuscrito está compuesto por 51 hojas (aproximadamente 111.000 caracteres, que completarían más o menos 52 páginas estándar), en su mayor parte escritas en lengua vasca (aproximadamente un 88 %), y en menor medida en castellano; pero los pliegos no están completos, y nos consta que se han perdido al menos 16 hojas en la parte que conocemos, más el principio del manuscrito, puesto que el texto comienza in media res. Se trata de una colección de textos literarios diversos, escritos por más de una mano en diferentes redacciones. No se ha publicado aún ningún trabajo que estudie las diferentes manos presentes en el manuscrito, pero parece que el texto principal (que podemos atribuir con mayor seguridad a Lazarraga) supone aproximadamente el 70 % del texto, sin descartar que parte de los textos marginales puedan ser suyos también.

En el texto principal se distinguen dos partes claramente diferenciadas: la primera es una novela pastoril (ocupa el 32 % del texto principal), escrito en su mayor parte en prosa, aunque integre en su cuerpo partes versificadas; la segunda parte es una colección de poemas y canciones.

El manuscrito no ha conservado ni el principio ni el final de la novela pastoril. Patri Urkizu propone el título de Dianea para el conjunto de la novela; Patxi Salaberri Muñoa prefiere, sin embargo, el título de Sirena, Silbero, Silbia eta Doristeo, aludiendo a los personajes principales. La novela pastoril fue un género exitoso en la Europa del siglo XVI y la obra Los siete libros de la Diana (1559), escrita en castellano por Jorge Montemayor, fue traducida e imitada en toda Europa; parece que la obra en prosa de Lazarraga debe ser entendida en ese contexto. El hilo argumental principal lo constituye una cadena de amores no correspondidos: Silvero ama a Sirena, Sirena a Doristeo, Doristeo a Silvia, y Silvia a Silvero.

Es más complicado describir y clasificar (temas, metros, fuentes, poemas populares y poemas que pretenden ser cultos...) la colección de poemas y canciones; y la afirmación vale tanto para el texto principal como para los añadidos de los márgenes. El tema más representado es el del amor, pero hay también poemas religiosos, narrativos, burlescos... El metro y el estilo de algunos poemas parece popular (hasta el punto de que no sabemos si se trata de composiciones de Lazarraga o de obras recogidas en la tradición popular), pero en otros adopta metros y formas del cancionero castellano más o menos moderno. En el caso de algunos poemas escritos en castellano, nos consta que no han sido compuestos por Lazarraga, sino copiados en estos pliegos como parte de la colección; también en el caso de algunos poemas escritos en lengua vasca se conocen sus correspondientes en otras lenguas; por tanto, parece que, a la espera de estudios más completos, se puede afirmar que diferentes autores (pensemos en la mano de Lazarraga para el texto principal y, para el resto de los textos, tanto en Lazarraga como otras manos posteriores) han recogido en un único cuaderno tanto obras compuestas por ellos mismos como obras aprendidas por alguna otra vía.

En cualquier caso, los textos constituyen un corpus copioso e interesante para el conocimiento y estudio de la lengua vasca (especialmente en su variedad alavesa) de los siglos XVI y XVII: incluye varios hapax y el primer testimonio de numerosas palabras, confirma usos que se consideraban raros o excepcionales, atestigua estructuras que eran desconocidas, y proporciona información nueva para contribuir a conocer mejor la historia de los dialectos.