Ipuia

Landa Etxebeste, Mariasun (1986ko bertsioa)

Escritora guipuzcoana en lengua vasca, nacida en Errenteria el 5 de junio de 1949. Es licenciada en Filosofía y Letras y profesora de euskara. Comienza su carrera publicista con la colección de cuentos Amets uhinak (Elkar, 1982) y Kaskarintxo (Elkar, 1982). Ese mismo año obtiene el I Premio "Lizardi" de cuentos infantiles convocado por el ayuntamiento de Zarautz con Txan fantasmaren etengabeko istorion (traducido al castellano y al catalán, La Galera, 1984). Al año siguiente publica (Elkar, 1983) Elisabete lehoi domatzailea y obtiene el III Premio de cuentos Ciudad de San Sebastián con Nire eskua zurean. En 1984 publica Partxela, Txan fantasma, Joxepi dendaria e Izar berdea (Elkar, 1984), traducidos los dos últimos al castellano, catalán y gallego (Ed. Galera y Galaxia). También obtiene ese año el III Premio Ciudad de San Sebastián con el cuento Etorri behar duena.

Ainhoa AROZAMENA AYALA

Escribió sus primeros cuentos a los doce o trece años. Tras licenciarse en Filosofía en París, decide volver a Euskadi en la década de los 70 del s. XX y aprender euskera. En 1974, Landa comienza a impartir clases en la ikastola de Zarautz y más tarde en la de Lasarte-Oria. Según la estudiosa Marijose Olaziregi, será la lectura de G. Rodari la que influirá en la línea fantástica adoptada por la autora, y libros como Cuentos por teléfono (1973) se constituirán en intertexto de sus primeras obras. En una entrevista, Landa declaró que con Rodari descubre una utilización muy sugerente de la fantasía, "en cuanto que es una fantasía que se aleja de los cuentos de hadas tradicionales y se incrusta en la realidad, desarrollando, a partir de elementos y situaciones muy reales, una crítica social impregnada de gran humor".

En 1982 publicó sus primeros cuentos, ambos mediante la editorial Elkar: Amets uhinak y Kaskarintxo. Dos años más tarde llegó una de sus narraciones más famosas: Txan fantasma. También han sido muy traducidas Errusika (Elkar, 1988), Iholdi (Erein, 1988), Kleta bizikleta (Elkar, 1990) y Maria eta aterkia (Elkar, 1988). Asimismo ha publicado Elixabete lehoi domatzailea (Elkar, 1983), Aitonaren txalupan (Elkar, 1988), Nire eskua zurean (Erein, 1995) y Amona, zure Iholdi (Erein, 2000). Es de destacar que buena parte de estos libros han sido ilustrados por Asun Balzola, por deseo expreso de la escritora.

Resumiendo en los siguientes párrafos el estudio que ha realizado la profesora Marijose Olaziregi sobre esta escritora (Breve historia feminista de la literatura española, Edit. Anthropos, 2000), se puede decir que Landa es en la actualidad la autora más prolífica y conocida del panorama de la literatura vasca, y que junto al escritor Bernardo Atxaga es la pluma con mayor proyección internacional. Realmente es la autora de libros de literatura infantil en euskera que más proyección ha tenido en el extranjero, con traducciones al francés, inglés, alemán, griego, albanés, gallego, catalán y castellano, entre otros idiomas.

Una de las constantes de la obra de Landa es el extenso elenco de protagonistas femeninas de sus obras, que invierten los estereotipos tradicionales machistas. Otra característica es la proliferación de la primera persona narrativa. La preocupación de la autora por los roles y estereotipos que trasmite la literatura quedó patente en la conferencia que impartió en 1993 en la Universidad Vasca de Verano titulada Mezu ideologikoak gure literaturan. "Y es que Mariasun, en su periplo parisino, se trajo junto a la licenciatura en Filosofía toda una serie de lecturas feministas que no hicieron más que confirmar el compromiso de la autora", escribió Marijose Olaziregi. De los 20 libros que hasta el 2000 había publicado Landa, 11 tienen protagonistas femeninos, 4 protagonistas animales, y el resto, protagonistas masculinos.

Otra constante de los libros de Landa es que narradora nos habla en estos textos de la necesidad de tratar de cumplir los deseos de realización personal aunque ello conlleva, la mayoría de las veces, la renuncia a una relación afectiva estable en el ámbito del matrimonio. Recordemos que la mayoría de las protagonistas que deciden cumplir sus anhelos y deseos personales viven solas (como Partxela), se separan (como la madre de Maider en Cuando los gatos se sienten tan solos) o son viudas (como el personaje de Mi mano en la tuya). Hay que destacar también la proximidad literaria entre las obras de la austríaca Christine Nöstlinger y Mariasun Landa, una afinidad reconocida por la propia escritora vasca. Nöstlinger es una de las máximas exponentes del llamado realismo crítico, que a través del humor y la fantasía trata de denunciar las injusticias sociales del mundo que nos rodea. Txan fantasma, que ganó Premio Lizardi de Literatura Infantil y Juvenil en 1982 y fue editado en castellano (Chan el fantasma) en 1984, es un buen ejemplo de realismo crítico. Narra la historia de una niña de rasgos autistas que es internada en un psiquiátrico.

Otras veces, Landa toca temas considerados como "poco adecuados. para la literatura infantil, por ejemplo la muerte (La barca de mi abuelo), el derecho a la huelga (Una bicicleta en huelga) o la denuncia del conformismo y la intransigencia (Potx). Olaziregi cree que Landa se destaca también por el humor y la ironía de sus narraciones. Bernardo Atxaga definió el humor de Landa como un humor "más oriental, más japonés que el resto. Poética del detalle, así es como describiría yo su punto de vista". Cuentos que destacan por su humor pueden ser Rusika (1993) y Julieta, Romeo y los ratones (1994). Pero según esta estudiosa la obra más lograda de Landa es seguramente Iholdi, publicaca por Erein en 1988 y con una versión en castellano editada por Edebé en 1994, dentro de la recopilación Cuadernos secretos. Ahí fue donde Landa comenzó a colaborar con la ilustradora Asun Balzola, "formando un tándem cuasi-perfecto", en palabras de Olaziregi.

Si con Chan el fantasma Mariasun traía la modernidad a la literatura infantil y juvenil escrita en euskera, con Iholdi dará un paso adelante en su evolución poética y se aproximará a estéticas más posmodernas. Iholdi es un libro fragmentario, compuesto por 16 microrrelatos cuya sencillez aparente, exactitud y poder de sugerencia sorprende a cualquier lector. La mayoría de los cuentos muestran el punto de vista infantil de los protagonistas. Aparecen bastantes veces sentimientos de soledad, incomprensión y tristeza. En estas narraciones queda de nuevo de manifiesto que para esta escritora la infancia es todo menos obvia y simple.

Landa es poseedora de premios importantes, como el Lizardi de 1982 (por Txan fantasma), el Euskadi de 1991 (por Alex), y la Lista de Honor del IBBY de 1994 (por Iholdi).

Texto antológico
Andereñoak ipuin motz bat idazteko agindu digu. Nirea gelako motzena izan da.

'Ikastola batean haur guztiak oso txikiak ziren. Egun batean, haur bat galdu egin zen eta zorri batek jan zuen. Eta inor ez zen konturatu. Amaiera'.

"Benetan laburra hire ipuina!" esan dit andereñoak, eta kezkatua somatu dut. Gero galdetu dit ea nire ipuina gizon bati erakusten utziko niokeen, eta nik baietz erantzun diot. Gizon horrek Sikologo izena du.

"La maestra nos ha mandado escribir un cuento breve. El mío ha sido el más corto:

'Una vez, en una escuela, todos los niños eran muy pequeñitos. Uno de ellos se perdió y se lo comió un piojo. Y nadie se dió cuenta. Fin'.

Ya lo creo que es breve este cuento! -ha dicho la maestra, y parecía preocupada. Luego, me ha dicho a ver si le dejaba que se lo enseñase a un señor, y yo le he dicho que sí. Ese señor se llamaba Sicólogo".

(Iholdi, Edit. Erein, 1988)

Félix IBARGUTXI OTERMIN