Antiguo régimen. La baronía de Lacarre dependía del rey de Navarra. Ya en el siglo XII, la familia gozaba del suficiente renombre en la Baja Navarra para que Bernard de Lacarre, canónigo de Bayona, acompañando a Fontaner, obispo de esta villa, en su viaje a la Baja Navarra del año 1168, "gracias a la influencia de esta familia", convenciera a Semen-García, vizconde de Baigorry, para que devolviera a los monjes de Sordes la tierra de Bolunce de la que se había apoderado anteriormente. El barón de Lacarre tenía la facultad de presentar al párroco de Lacarce y Gamarthe reunidos. En 1727 la población ascendía a 130 comulgantes. La renta de la parroquia ascendía a 400 l. La fija consistía en el diezmo del dominio de Lacarre y de las tierras navales, además de la primicia de los granos; corderos y los cerdos diferentemente pagada por las familias. El decimador era el señor.
Revolución. Al sobrevenir la revolución, el párroco, Socarro, se negó a prestar el juramento constitucional y se exilió en 1792. El 25 de frimario del año II se hizo el inventario y el secuestro de sus bienes muebles e inmuebles. Los revolucionarios subastaron los ornamentos y mobiliarios de la iglesia así como la casa presbiterial.
Inventarios de 1.906. En esta localidad no hubo incidentes a raíz del inventario de los bienes de la iglesia. El boletín religioso "Les Annales catholiques" señala el celo del maestro de Ainhice que colaboró en el inventario así como la amplitud del despliegue de fuerzas.
II guerra mundial. Durante la II guerra mundial quedó en zona administrada directamente por los alemanes, a petición de sus mismos habitantes que no querían verse excluidos del mercado de San Juan de Pie de Puerto. El monte Lacarra sirvió así a los resistentes que podían efectuar "pasos" clandestinos de la línea de demarcación aprovechando la oscuridad de la noche. Controlaba la vigilancia en esta zona un alto dignatario del partido nazi que residía en Ascarat y que se hizo estimar por la población civil. de tal forma que al acabar la guerra los mismos resistentes le ayudaron a pasar clandestinamente la frontera. El paso clandestino durante la ocupación alemana estuvo dirigido por el coronel Dutey- Harispe y su esposa.
Revolución. Al sobrevenir la revolución, el párroco, Socarro, se negó a prestar el juramento constitucional y se exilió en 1792. El 25 de frimario del año II se hizo el inventario y el secuestro de sus bienes muebles e inmuebles. Los revolucionarios subastaron los ornamentos y mobiliarios de la iglesia así como la casa presbiterial.
Inventarios de 1.906. En esta localidad no hubo incidentes a raíz del inventario de los bienes de la iglesia. El boletín religioso "Les Annales catholiques" señala el celo del maestro de Ainhice que colaboró en el inventario así como la amplitud del despliegue de fuerzas.
II guerra mundial. Durante la II guerra mundial quedó en zona administrada directamente por los alemanes, a petición de sus mismos habitantes que no querían verse excluidos del mercado de San Juan de Pie de Puerto. El monte Lacarra sirvió así a los resistentes que podían efectuar "pasos" clandestinos de la línea de demarcación aprovechando la oscuridad de la noche. Controlaba la vigilancia en esta zona un alto dignatario del partido nazi que residía en Ascarat y que se hizo estimar por la población civil. de tal forma que al acabar la guerra los mismos resistentes le ayudaron a pasar clandestinamente la frontera. El paso clandestino durante la ocupación alemana estuvo dirigido por el coronel Dutey- Harispe y su esposa.