Festival Internacional de Teatro de Vitoria (1975-1980). Por su parte, Vitoria celebró un Festival Internacional de Teatro en setiembre y octubre de 1975, organizado en aquella ocasión por el grupo Farándula dependiente del Consejo de Cultura de la Diputación Foral de Alava y contando con la participación de varios grupos: Teatro del Mediodía, Ensayo Uno en Venta, La Farándula, Els Joglars, Pequeño Teatro, de Valencia; Grupo Podzravi, de Yugoslavia, y Grupo Ziasos. Este Festival, celebrado con éxito a pesar de la grave situación política (fusilamiento de Txiki y Otaegui), propiciará un nuevo Festival organizado en aquella ocasión, y ya posteriormente, por la Cooperativa Denok, señalándose en 1976 la intervención de El Espolón del Gallo, Teatro Algabeño, Grupo Tiempo, Teatro Campesino, La Farándula, Esperpento, Caterva, Cizalla, Grupo Cinque y A Comuna.
En el mismo año la organización intenta extender el Festival a barrios y pueblos, pero la mayor dificultad estriba en la falta de locales apropiados. La muerte del Presidente de la Diputación de Guipúzcoa, Sr. Araluce, obliga a aplazar la actuación del Grupo Farándula. La representación de "Fogo" por el grupo portugués A Comuna y la del americano Teatro Campesino obtienen los más encendidos aplausos del público. El Festival de 1977 se celebra con la participación de agrupaciones que representan a diversas regiones y nacionalidades de España, prescindiendo de grupos extranjeros.
Así acuden Dagoll-Dagom, Adefesio Teatro Estudio, Aula 6 -que sustituye a Esperpento-, A 71, Teloncillo, El Lebrel Blanco, Teatro Estable, de Zaragoza, y Zorrocloco Escuela de Actores de Canarias. Dos circunstancias alteran de algún modo el ambiente normal del Festival: de una parte la detención de Albert Boadella, director de Els Joglars; se redactan comunicados y se recogen firmas en protesta del hecho. De otro lado los sucesos en la Universidad canaria de La Laguna tienen especial incidencia en el Festival, dado que uno de los grupos participantes procede de la misma. Lo cierto es que tras haber atravesado algunos momentos difíciles, el Festival de Vitoria sigue adelante y la asistencia de público a las representaciones es muy estimable, pudiéndose constatar que en el Festival del año 80 la media de entrada por representación fue de 600 personas.
En el mismo año se intentan en Vitoria algunas experiencias parateatrales como el Cabaret, las Variedades y los Pasacalles, con resultados satisfactorios en la mayoría de los casos. Se pretendía que el Festival Internacional de Teatro de Vitoria de 1981 llevase el enunciado de Teatro de Ralces (Históricas, Folklóricas, Antropológicas...) al coincidir con el Octavo Centenario de la Fundación de la Ciudad. (En el 78 se celebró también en Vitoria un Festival o Muestra de Teatro de las Nacionalidades, con grupos representantes de Andalucía, Cataluña, Euskadi, País Valenciano y Galicia).