Industriak

BASCONIA

De la hoja de lata a la fabricación de acero.

En aras a integrar todo el proceso de fabricación La Basconia pasó a ser una empresa sidero-metalúrgica con la construcción en 1900 de una fabrica de acero con tres hornos Siemens-Martin, un tren de laminación para el desbaste de lingotes de acero en llantón y palanquilla, un tren de laminar fermachine y una fundición con cubilotes. En 1904 se montó el taller de palas, y unos talleres de forja, ajustaje y calderería. Para hacer frente a estas inversiones en 1902 se amplió el capital a 6 millones de pesetas, en 1904 a 7 millones y en 1913 alcanzó los 9,5 millones de pesetas. En 1904 se realizó una emisión de obligaciones por 5 millones y nueve años más tarde una segunda emisión por 2,5 millones. La marcha ascendente de la cuenta de resultados se truncó en 1910 al liberalizarse la importación de la hoja de lata. En 1902 accedió a la presidencia Juan Tomas Gandarias Durañona, cargo que detentó hasta 1940. Durante la Gran Guerra la Basconia salió reforzada, permitiéndole imprimir a su desarrollo y evolución una mayor intensidad. A comienzos de los años veinte, la fábrica estaba servida por varias vías de comunicación. Por carretera, la que se dirige de Bilbao a Pancorbo. El tranvía de Bilbao a Durango transportaba mercancías al pie de fábrica y conectaba con los muelles del Arriaga y el Arenal. En cuanto a los enlaces ferroviarios, por el ferrocarril de Santander a Bilbao se comunicaba con los ramales de Castilla y Azbarren, y Matico-Azbarren. Así como los ferrocarriles vascongados, en su ramal de Ariz-Basconia. El ferrocarril del Norte pasaba colindando con las instalaciones de la empresa, y desde la Estación de Dos Caminos partían varias vías que entraban en los muelles de carga y descarga. La buena marcha de la empresa promovió la ampliación de la producción de hojalata y el montaje de nuevos trenes laminadores. Por idénticas razones se amplió en 1926 la planta de hornos con la inauguración de un nuevo horno Siemens-Martin y se añadieron nuevos perfeccionamientos en la fabricación de hojalata. En 1920 adquirió en la antigua fábrica de Guriezo (Santander) un Alto Horno al carbón vegetal.. Sin embargo este horno no fue puesto en funcionamiento. En 1929 la Basconia elevó su capital a 14 millones de pesetas. En los años previos al inicio de la Guerra Civil española, con una plantilla cercana a los 2.500 trabajadores, los beneficios se asentaron en los 3 millones de pesetas. En los años treinta se montó el quinto horno Siemens-Martin y se inició la construcción de nuevos trenes laminadores de llantón, palanquilla y perfiles.