Militarrak

Arana Landázuri, Juan Ramón

Militar y político. Nacido en Bilbao (Bizkaia), el 28 de diciembre de 1790; fallecido en Bilbao (Bizkaia), el 7 de enero de 1860.

Nacido en Bilbao fue hijo de José María de Arana Arriola y María Josefa de Landazuri Arezpe. Su hermano Antonio fue jefe de la Milicia Nacional de Bilbao en 1835. Casado en primeras nupcias (Bilbao, 18.03.1810) con María Cornelia Ampuero Maguna (Bilbao, 17.09.1793 / Bilbao 28.09.1818), contrajo un segundo matrimonio (Bilbao 2.10.1850) con María Carmen Engracia Parada Pasaman. Del primer matrimonio nacieron María Sofía Aurelia (30.09.1811 / Bilbao 20.04.1891) y Thomas José Aurelio (Bilbao, 29.12.1814 / Bilbao 23.10.1887); y del segundo Cristeta Ramos (Axpe-Atxondo, 27.03.1850), Teófilos Nicolás Rafael (Izurtza, 25.10.1851), Germán Nemesio Nicolás (Izurtza, 20.12.1852) y Ramiro Quirino Antonio (Bilbao, 31.03.1855). Su hija María Sofía contrajo matrimonio con Federico Victoria de Lecea Mazarredo.

A los trece años inició sus estudios en el Seminario de Bergara (4.12.1803) en el que permaneció durante casi cuatro años (20.06.1807).

El 12 de mayo de 1812 ingresó como cadete en el 2º Batallón de Voluntarios de Vizcaya, siendo ascendido a subteniente dos meses más tarde (15.07.1812). Al mes siguiente inició su participación en las operaciones militares: Bilbao (13, 22 y 27 de agosto), Gernika (13 y 15 de septiembre), y Dima (3 de octubre). El 10 de octubre de 1812 fue nombrado teniente, y poco tiempo después Capitán (17.11.1812). Su hoja de servicios denota una gran actividad bélica durante todo el período: Durango (30.10.1812), Zornoza (2.11), Antzuola (27.11), Azkoitia (30.11), Artziniega (1.01.1813), Bilbao (6.01), Zeberio (30.01, 5.02), Markina (8.03), Bilbao (25.03), Gernika (2.04), Nabárniz (5.04), Bilbao (10.04). El 30 de mayo de 1813 participó en la acción de Mendexa, en la que fue hecho prisionero, siendo conducido al depósito de Maçon (Francia), del que logró fugarse.

Tras la guerra pidió el retiro y se le negó la confirmación de sus nombramientos, señalándose como causa en el informe que "no es de los de mayor disposición y sus conocimientos limitadísimos", además de que su ascenso había sido excesivamente rápido. También solicitó se le concediese destino como guarda almacén en Palencia o tercer vista de la Aduana de Orduña. Mientras realizaba estas gestiones permaneció en Madrid.

Durante el Trienio estuvo alistado en la Milicia Nacional voluntaria de Bilbao, siendo elegido sargento segundo. Al producirse la entrada de los Cien Mil Hijos de San Luis en España, se retiró, al igual que numerosos liberales vizcaínos, hacia La Coruña. El 10 de septiembre embarcó en dicho puerto junto con su hermano Antonio y Pedro Edmundo Jabat. Su primer destino fue un puerto de Inglaterra (17.09), desde donde se dirigieron a Francia (5.10), a cuyas autoridades solicitaron permiso para residir durante seis meses en París.

En la capital francesa se mantuvieron alejados de los círculos liberales más politizados y en abril de 1824 visó su pasaporte para trasladarse a Burdeos, y tres meses más tarde partió hacia Bilbao. El Gobierno español le prohibió el regreso, aunque en 1825 sí tuvo éxito en su proyecto, pasando a establecerse inicialmente en Izurtza. En abril de 1827 regresó nuevamente a París, al objeto de que su hija realizase estudios en dicha ciudad, en la que permaneció casi un año.

Su regreso a la política tuvo lugar en julio de 1833, representando a Izurtza en las Juntas Generales. Su adscripción liberal movió a Sarsfield a nombrarle alcalde de Bilbao (26.11.1833), tras la expulsión de los carlistas. En 1835 fue nombrado nuevamente alcalde de la villa de Bilbao, por lo que se encontraba al frente de la misma durante el primer sitio. El 28 de febrero de 1836 fue elegido comandante de la Milicia Nacional de Bilbao, y pocas semanas más tarde diputado en los comicios de 1836 que no se reunieron a causa de la supresión de las Cortes por la sublevación de La Granja. Diputado electo por Bizkaia para las Constituyentes de 1836, participó en varias Comisiones. Protestó contra el sistema que se quería imponer para la elección de las Diputaciones, pero no consta ninguna intervención suya en el pleno de la Cámara.

Tras esta experiencia regresó a la política provincial como regidor gamboíno (1839) de la Diputación de Vizcaya. Durante los años siguientes participó en las Juntas generales representando a Izurtza (1841, 1846).

Ese mismo año formó parte de las personas que integraron el grupo inicial de socios de la Sociedad Bilbaína.

En 1841 participó en la sublevación moderada-fuerista contra Espartero, viéndose obligado a permanecer emigrado en Francia hasta 1843. Se le impuso una multa de 15.000 reales.

Arana tenía importante posesiones en la provincia. En 1827, desde París donde residía accidentalmente dio poder a su hermano Antonio, residente en Izurza, para que dirigiese la administración de todos sus bienes y "tome cuentas a quien dárselas deba especialmente a los dos administradores subalternos D. Matías de Landa, vecino de Bilbao, y D. Manuel de Gorostiza de Durango, ambos autorizados para el manejo y administración de sus bienes en sus respectivas dependencias...". Al celebrarse las elecciones de 1834 fue incluido entre los 18 electores "designados entre las personas más pudientes de este Señorío". Al concedérsele la Cruz de Isabel la Católica solicitó exención en el pago de derechos, porque su adhesión a Isabel II "le han causado pérdidas tan considerables en sus intereses, que le han conducido a un estado poco próspero. Público es Señora, y bien notorio en el Señorío de Bizkaia, que gran parte de las propiedades del exponente, han sido taladas, arruinadas y quemadas".

Fue socio fundador de la sociedad del ferrocarril de Madrid a Irún por Bilbao, y figuraba entre los accionistas del Tudela-Bilbao con una inversión de 25.000 pesetas.

En el inventario (1864) realizado tras su fallecimiento consta la propiedad de una casa-palacio y varios terrenos en Izurtza valorados en 248.170 reales. Además señala que era patrono de la iglesia de San Nicolás de Izurtza.

Su actuación durante el sitio de Bilbao le hizo merecedor de dos condecoraciones: la Cruz de Comendador de Isabel la Católica (15.02.1836), por su actuación como primer comandante de la Guardia nacional, y la Cruz supernumeraria de Carlos III (31.08.1836) por los servicios prestados como alcalde.