Municipios

Yárnoz

El núcleo se encuentra en alto, en la falda septentrional de la sierra de Alaiz, junto al antiguo trazado del camino jacobeo, en el tramo que une las localidades de Monreal y Tiebas. Consta básicamente de una calle en pendiente, que culmina en alto con la iglesia y la vieja torre medieval, en una disposición que se nos antoja ya clásica en Navarra y en el propio valle de Elorz.

Hasta hace algunos años era aún posible encontrar algunos vestigios góticos entre la decena de casas que componen el casco urbano de Yárnoz. No obstante, algunas reformas agresivas y la edificación de alguna casa de nueva planta han provocado que hoy en día los únicos restos medievales sean los de la torre. Por lo demás, señalaremos una casa de desarrollo longitudinal, con muros sin enlucir en la actualidad y dos alturas, rematando con tejado a dos aguas con grandes limas. Las ventanas son rectas, pero muestra un arco de entrada de medio punto, con once dovelas largas y sin decoración. Otro edificio, de menores pretensiones, muestra parecida distribución, aunque los vanos llevan enmarques de ladrillo muy simples. Junto a la torre hay otra casa muy reformada, que hasta hace pocos años tenía al parecer un cuerpo adosado a la torre medieval, hoy eliminado, y donde residen aún sus propietarios.

La torre de los señores de Yárnoz es un bloque exento de planta cuadrada y cerca de ocho metros de lado, alcanzando unos quince metros de altura, divididos en cinco plantas más la de coronamiento.

  • Ermitas

Pérez Ollo menciona la ermita de Santa Engracia, de la que al parecer no quedaba sino el topónimo para el año 1782. Igual de Soria, en 1799, no menciona ninguna.

  • Parroquia de la Natividad

Como tantas otras veces acontece en el valle de Elorz, el templo tiene un origen medieval, pero fue profundamente reformada en el siglo XVI. Se realizaron también otras obras en 1677. La planta es de extrema sencillez, con una única planta dividida en tres tramos de longitud desigual, más una cabecera algo más estrecha y terminada en testero recto. El acceso, cobijado por un pórtico, se encuentra en el segundo tramo del lado del Evangelio, y vemos también un cuerpo adosado para alojar la escalera de subida al coro y a la torre. En cuanto a la sacristía, es de planta cuadrada y se adosó a la cabecera por el lado de la Epístola.

Los muros van en sillería muy menuda, y acusan al exterior el recrecimiento realizado en el siglo XVI, cuando se cambiaron las cubiertas. Al interior van enlucidos. A los pies de la nave hay un coro alto, de madera y moderno.

La fábrica se cubre con un variado sistema de bóvedas. Los tres tramos de la nave reciben crucería simple, cuyos nervios apean en ménsulas encastradas en el muro. El primer tramo se separa del resto por un fajón que procede de época medieval, de perfil apuntado, y que puede ser el único resto de una primitiva bóveda de cañón apuntado. La cabecera recibe una bóveda más compleja, de terceletes con ligaduras. La sacristía se cubre con una bóveda de cañón reticulada.

Al exterior vemos el volumen prismático de la torre, que como va dicho apoya en el primer tramo de la nave. Tiene planta rectangular, y lleva un fuste macizo y ciego, tan sólo perforado por algún tragaluz, y por un medio punto para alojamiento de las campanas. Remata con tejado en pabellón. Un pórtico de piedra, abierto por un único arco escarzano, da cobijo a la puerta del templo, con un dintel monolítico de forma semicircular y reforzado por dos largas ménsulas cóncavas.

El presbiterio va ocupado por un retablo mayor muy sencillo, ejecutado por Tomás de Gaztelu y Juan Carrasco en la primera mitad del siglo XVII, en estilo barroco. Consta de banco con un sagrario de la época, faltando dos pinturas de tamaño menor que fueron robadas hace tiempo. Lleva una única caja, flanqueada por sendas columnas de fuste estriado y capitel jónico, y frontón triangular decorado con dentellones. Alberga un lienzo al óleo que representa la Natividad de la Virgen, titular de la parroquia, en un estilo manierista más retardatario que la traza del retablo. La composición es diagonal, con figuras monumentales de movimientos algo teatrales y forzados.

En el muro del Evangelio cuelga un Crucificado barroco, muerto, con poderosa y expresiva anatomía, no exenta de tosquedad. En el lado de la Epístola vemos una pila de bautismos con fuste cilíndrico y taza moldurada. Vemos también una talla en bulto de la Virgen con el Niño, románica de principios del siglo XIII. Según Clara Fernández-Ladreda, pertenece al cuarto grupo de las tallas derivadas del tipo de Pamplona-Irache, junto con las de Izco, Zolina, Ardanaz, Biurrun, Abárzuza, Leyún y la de la iglesia del Crucifijo de Puente la Reina. María aparece representada como "sedes sapientiae", sobre la que se dispone el Niño de manera centrada. La frontalidad es acusada, así como la actitud hierática y algo deshumanizada. El rostro de la Virgen, no obstante, no carece de cierta expresividad amable. La talla va totalmente dorada, imitando la apariencia de los modelos más nobles, ejecutados en oro y plata, y la citada autora destaca el hecho de no haber sufrido alteraciones posteriores de relevancia. En la sacristía, por último, se conservan algunas piezas de platería.

  • ASIRON, J. El palacio señorial gótico en la Navarra rural. Palacios de cabo de armería, torres de linaje, casas fuertes. Tesis doctoral sin publicar.
  • CARO BAROJA, J. La casa en Navarra, Pamplona, vol. III, C.A.N. 1982, pp. 65.
  • FERNÁNDEZ-LADREDA, Clara: Imaginería medieval mariana, Pamplona, Gobierno de Navarra, 1988, pp. 84-92.
  • GARCÍA GAÍNZA, M.C. (et. alt.): Catálogo Monumental de Navarra, vol. IV*, Merindad de Sangüesa, Abaurrea Alta-Izalzu, Pamplona, Gobierno de Navarra, Arzobispado de Pamplona, Universidad de Navarra, 1989, pp. 268-270.
  • PÉREZ OLLO, Fernando: Ermitas de Navarra, Pamplona, C.A.N., 1983, pp. 264.
  • LACARRA DUCAY, Mª Carmen (et. alt.): Navarra, guía y mapa, Estella, C.A.N. 1983, pp. 297.
  • MENÉNDEZ PIDAL, Faustino; Martinena, Juan José: Libro de Armería del Reino de Navarra, Pamplona, Gobierno de Navarra, 2001, nº 586.
  • V.V.A.A. El Valle de Elorz. Naturaleza, Historia y Arte. Pamplona, Ed. Ayuntamiento del Valle de Elorz y Príncipe de Viana, 1990, pp. 199-202.

JAS 2009