Reuniones diplomáticas celebradas en la ciudad francesa de Noyon, Oise, entre mayo y agosto de 1516, entre Francisco I de Francia, Carlos I de España y Catalina I de Navarra; propuesta por ésta última con miras a la recuperación de Navarra, usurpada por Fernando el Católico en 1512. A ellas asistieron por parte francesa el señor de Boisy, el obispo de París Poncher y Oliver, presidente del Parlamento; por parte española, Guillermo de Croy, señor de Chièvres, y representando a Navarra, los consejeros de Catalina, Pedro de Biaix y el señor de Montfauçon. La reunión estaba planteada para dirimir las diferencias franco españolas respecto a Nápoles y para dilucidar el derecho de Navarra a ser reintegrada a sus reyes, derecho que nunca fue negado teóricamente por parte española; fue organizada como vista judicial con el cuerpo diplomático como juez. La delegación navarra, confiada en el apoyo francés, permanente en teoría pero ineficaz en sus resultados, debía pedir la simple restitución del reino, así como la libertad del mariscal Pedro de Navarra. Ante las previsibles evasivas (que se venían sucediendo desde hacía 4 años) de la corona castellana, la delegación navarra guardaba como argumento diplomático la propuesta matrimonial de alianza entre el heredero navarro, hijo de Catalina I y Juan de Albret y una hermana de Carlos I, que no prosperó. Los acuerdos dieron como resultado una frágil alianza franco-española que dirimía el conflicto de Nápoles, que sería cedido como dote en base a un acuerdo matrimonial entre Francia y España y el aplazamiento del problema navarro, que Francia no se atrevía a plantear con eficacia, por suponer esto un enfrentamiento directo a Carlos I, si bien se obtuvieron nuevas promesas de restitución. Transcurrido el plazo señalado para la restitución, la parte española, bajo el gobierno efectivo del cardenal Cisneros, incumplió los pactos, fracasando una vez más todos los intentos navarros por recuperar la soberanía.
Xabier LASALLE
Xabier LASALLE