Los Gramont, alcaldes hereditarios de Bayona, desempeñaron también la función de gobernadores. Esta familia había jugado un papel importante durante mucho tiempo en el reino de Navarra. Roger de Gramont, señor de Bidache, que había seguido el destino de Jean de Albret, fue el primero que entró al servicio de Francia. Su hijo Francisco murió en las guerras de Nápoles, no dejando más que una hija llamada Clara, que llevó los bienes y el nombre de Gramont a la casa de Aure, oriunda de la Bigorre. Los Gramont se titulaban conde de Guiche y Louvigny, vizconde de Aster, barón de Hagetmau, etc., soberano de Bidache, lugarteniente general del reino de Navarra y país soberano de Béarn. En 1601, el primer conde de Gramont, que fue gobernador hereditario de Bayona, hizo su entrada solemne en la ciudad, y fue recibido con una recepción espléndida. Se le prepararon cuatro galeones ocupados cada uno por diez remeros, ocho arcabuceros y un tambor y un trompeta "con insignias de coronel de la ciudad a cada uno". Debían remontar el Adour, hasta Urt, y allí recoger a los ilustres visitantes, saludarlos con disparos de arcabuz y hacer lo posible por distraer a Madame de Gramont y a su compañía. El ama de llaves debía bajar a la puerta de St: Esprit y la Corporación municipal, con vestidos negros, debía encontrarse allí, también, y desearle la bienvenida, mientras que el cañón de la ciudad dispararía salvas al mismo tiempo que el de los castillos. Además se decidió que se le ofrecería como presente una vajilla de plata por un total de 250 escudos; que el gobernador recibiría seis barricas de vino; M. de Roquelaure recibiría 120 escudos y las señoras de Roquelaure y de Gramont doce pares de guantes de olor. La recepción tuvo lugar como había sido previsto por la Corporación municipal, y además podemos señalar un paseo al Boucau del conde de Gramont, de la condesa, de su madre y de su hermana, del conde de Louvigny y otros nobles; para esta ocasión se equiparon dos chalupas tripuladas por diecisiete hombres y tres trompetas. Ref. Edouard Duceré: Dictionnaire historique de Bayonne, 2 vols, Bayonne, 1911-1915.