Sociedad Anónima. Empresa privada de ingeniería que acaba de cumplir (2006) los primeros cincuenta años prestando servicios tecnológicos a sociedades que desarrollan su actividad en variados sectores económicos.
La empresa con el nombre de Sener Técnica Industrial y Naval se constituyó como Sociedad Anónima el 15 de junio de 1956 siendo sus fundadores Enrique de Sendagorta y su esposa María Luz Gomendio con el 50% del capital, y la sociedad Erhardt y Compañía, con la restante mitad. La participación de esta última era de gran interés para la nueva entidad pues sus propietarios los hermanos Erhardt Hormaeche tenían una gran experiencia en los negocios hispano-alemanes siendo los representantes de Krupp en España participando también en el capital de Construcciones Metálicas Mecánica de la Peña.
Hay que destacar el carácter pionero de Sener pues en la época no había ninguna sociedad de ingeniería en España, siendo cada empresa la que tenía que dar respuesta a las necesidades que se le planteaban, lo que habitualmente trataban de hacer con un departamento específico. La ayuda de especialistas de otros países también era muy difícil de conseguir dado el aislacionismo español y la rígida política autárquica de la dictadura.
Pero si algo ha caracterizado a Sener a lo largo de su historia ha sido su capacidad de adaptarse a las circunstancias de cada época de modo que habiendo iniciado sus actividades con 18 trabajadores, superó el centenar a mediados los años sesenta del siglo XX y emplea a unos 1300 en el cincuentenario de su puesta en marcha. Su sede social inicial en Bilbao se ha visto completada con delegaciones en importantes ciudades españolas y foráneas.
Enrique de Sendagorta Aramburu se graduó en la promoción de 1947 en la Escuela de Ingenieros Navales sucesora de la Escuela de Ingeniería de la Armada convirtiéndose en uno de los ciento cincuenta titulados en esta especialidad que había en España pasando a trabajar en la factoría de Sestao de la Sociedad Española de Construcción Naval. Este empleo le permitió visitar empresas europeas avanzadas y conocer sus formas de gestión, trabajo e innovación (la suiza Sulzer, la británica Vickers y varias alemanas e italianas entre otras). Sus trabajos le llevaron a ingresar en la Royal Institution of Naval Architects. Dejó la Naval para poner en marcha Sener en 1956.
Su hermano José Manuel (1928) terminó en 1954, con el número uno, los estudios en la Escuela de Aeronáutica aún dependiente del Ejército y todavía con menor número de graduados que los Ingenieros Navales. Tras varios viajes de estudio a Inglaterra, trabajo en el departamento de aerodinámica de la Saunders-Rae Ltd, en la isa de Wight, ingresando en el Instituto Nacional de Técnica Aeronáutica (INTA), en el departamento de Propulsión y Aerodinámica. Tras participar en proyectos internacionales, impartió clase de mecánica de fluidos en la Escuela Superior de Ingenieros Navales habiendo también prestado sus servicios en Mecánica de la Peña. En 1961 se incorporó a la dirección de Sener.
Los comienzos de la pionera empresa estuvieron llenos de dificultades al coincidir con la aguda crisis de la economía española de finales de los años cincuenta del siglo XX y el inicio del Plan de Estabilización de 1959. Los proyectos de buques para distintos armadores que siguieron, al primero, el Sierra Madre, desempeñaron un papel importante en la época. En algunos casos fue necesario impulsar iniciativas, como Indunaval, constituida junto con Mecánica de la Peña e inversoras particulares y que obtuvo importantes encargos de Brasil, Argentina y Paraguay. Tras una breve presencia de Enrique de Sendagorta -1961-1963- en cargos políticos en Madrid durante la cual su hermano José Manuel se hizo cargo de la dirección de Sener lo que duró hasta 1985, volvió a reintegrarse a la Naval como consejero-director general.
La trayectoria de Sener ha sido brillante desarrollando su actividad de ingeniería y consultoría en las áreas espacial, arquitectura, civil, energía y procesos, naval, sistemas de actuación y control y aeronáutica y vehículos. En el campo inicialmente citado cabe destacar el diseño y construcción de un modelo de combustión en micro-gravedad y la participación en el Airbus A-380. En el campo energético hay que recordar su fundamental participación en la Central nuclear de Lemoniz y dentro de las obras marítimas, las de Punta Lucero. También ha estado presente en el desarrollo español de refino y petroquímica así como en la promoción de I.T.P.
Los ingenieros, físicos, químicos, economistas, abogados y otros profesionales en su mayoría de titulación académica superior han integrado la plantilla de Sener y con los mismos la dirección de la Sociedad ha formado eficaces equipos, que han hecho posible que la empresa haya llevado a buen fin un gran número de proyectos.
Carmelo URDANGARIN ALTUNA (2006)