Proceso de emancipación. Por fin el valle fue restituido a su antigua libertad en el 1456 legalmente por Ejecutoria Real despachada en contradictorio juicio por el Consejo Supremo de Castilla e incorporado a la Hermandad de Guipúzcoa en tiempo de los Reyes Católicos. El 25 de setiembre de 1458 (Ubeda) Enrique IV mandó al valle de Léniz y a la villa de Salinas, que entrasen en la Hermandad de Guipúzcoa (Ref. Cartulario Real de Enrique IV a la provincia de Guipúzcoa, SEV, 1983). La orden no fue cumplida por la oposición ejercida por el conde de Oñate que, en 1475, celebró nuevas capitulaciones con los habitantes del valle (más Salinas) que consiguieron un nuevo ensanchamiento de sus libertades. El 31 de agosto de 1476 (Vitoria), el rey Fernando el Católico se dirigió, por medio de una Provisión real, a todos los habitantes de sus territorios incluida la tierra de Lenis, ordenando que las provincias de Alava, Vizcaya y Guipúzcoa entrasen a formar parte de la Hermandad General del reino, nacida a raíz de las Cortes de Madrigal (Ref. Cartulario Real a la provincia de Alava, SEV, 1983).