Lekaide eta lekaimeak

SAN VEREMUNDO

Abad del monasterio navarro de Irache desde el año 1056 al 1092 aproximadamente. Nació hacia el año 1020 en Arellano, aunque el también navarro pueblo de Villatuerta -ambos cercanos a Irache- ha disputado siempre la cuna del santo. Algunos incluso dudan de su origen navarro, basándose para ello en su nombre, Veremundo o Vermudo, desconocido en la antroponimia del reino en aquella época. Ingresó en la comunidad benedictina de Irache hacia el año 1032. Veinte años después fue elegido para sustituir al hasta entonces abad del monasterio, su tío Munio. Durante su gobierno la abadía vivió una esplendorosa época, instituyéndose como parada imprescindible de los peregrinos jacobeos. El monasterio de Irache alcanzó una fama sin límites, siendo muy favorecido por el rey Sancho IV de Penalén, quien realizó diferentes donaciones -3 iglesias, 12 monasterios y 6 villas-. También el monarca Sancho Ramírez acrecentó las posesiones de la abadía, llegando a tener ésta bajo su dominio a 25 monasterios, grandes extensiones de tierra y privilegios. La importancia espiritual de Iratxe se refleja en su participación en la polémica del cambio litúrgico. Defensora del rito mozárabe, la abadía envió dos libros litúrgicos a su aprobación por Roma: un Liber orationum y un Liber antiphonarum. Tras una época de gloria, las donaciones reales fueron disminuyendo y la figura del abad dejó de aparecer en la documentación. Esto coincidió con la fundación de Estella por el rey Sancho Ramírez (1090), hecho que relegó a segundo plano a Irache. Entre esta fecha y 1099, año en que se cita ya un nuevo abad, parece que la dirección del monasterio recayó en manos del prior García Iñiguez. Según distintas fuentes, San Veremundo murió el 8 de marzo de 1092 ó 1099, día en que se instituyó su festividad, tras ser canonizado en 1163 por el papa Alejandro III. Aunque los testimonios que se poseen sobre su vida y su personalidad son escasos y tardíos -El becerro de Irache y el Leccionario de Irache (1547)- desde muy antiguo se adoraron sus prodigios, entre los que destacan: la profetización del futuro, la curación de enfermos, los exorcismos, etc. Estos y otros muchos hechos le valieron su fama y su culto. En 1614 el obispo de Pamplona otorgó la autorización de una romería anual de Arellano y Villatuerta, pero hoy día la fama del abad ha sobrepasado estos dos municipios, siendo muy célebre en toda Navarra el dicho "Mientras el mundo sea mundo, el ocho de marzo San Veremundo". En Arellano y Villatuerta existe otra festividad, que coincide con el traslado de los restos y reliquias de san Veremundo, hecho que se lleva a cabo alternativamente por quinquenios entre las dos localidades navarras el 3 de septiembre.

Ainhoa AROZAMENA AYALA

  • Fortún Pérez de Ciriza, L. J.: San Veremundo, en "Gran Enciclopedia Navarra", Pamplona, 1990, t. XI;
  • Jimeno Jurio, J. M.: Calendario festivo invierno en "Panorama", nº 10, 1988, pp. 49-50;
  • Saralegui, C.: El dialecto navarro en los documentos del monasterio de Irache (958-1357), Pamplona, 1977, pp. 41-42.