Lexique

PEDERNAL

Léx. Variedad de cuarzo, que se compone de sílice con muy corta cantidad de agua y alúmina, y da chispas herido por el eslabón, suarri, suharri (c), sukarri (B), sutarri (BN, R), muger (B, L, BN), arri-muger (G, Añ.), harri muger (Ax.), txingarri (G, Añ.); trapo o torcida que se enciende con las chispas que se sacan del pedernal, tunda (B, BN), tundra (BN), dunda (G, AN, L, BN); harri mugerraren pare dira, barrenean dute sua, asko dute ukitzea (Ax.), (los iracundos) son como el pedernal, dentro tienen fuego, basta tocarlos; beti erabilliko ebazan orrek aldean tundea, arrata ta suarria (B), siempre llevaba ése consigo mecha, eslabón y pedernal.

Diccionario Auñamendi
El suarri o pedernal es conocido en algunas comarcas vascas con el nombre de muguer. Axular, en su «Guero» le llama arrimuguerra. Su empleo como material para encender fuego ha sido general en el país hasta principios del siglo XX. Como material cortante ha sido utilizado, en forma de lascas toscamente talladas, en los trillos hasta nuestros días, principalmente en ciertas regiones de Navarra y de Álava. La fabricación del trillo y, sobre todo, la talla del pedernal para el mismo, son labores que se encomiendan a especialistas en la materia. Estos, con un burro cargado de pedernal que ellos mismos extraen de las canteras locales, recorren los pueblos ofreciendo su material y sus servicios a los campesinos en la época que precede a las faenas de la trilla. Así vimos hace cuatro años a dos trilleros que arrancaron pedernal en una cantera de Samiano y andaban por los pueblos del Condado de Treviño, Peñacerrada y Lagrán, reparando trillos o construyendo otros, no con mucho optimismo, a causa de la rápida decadencia de su oficio por el avance de la motorización del trabajo de la trilla. El trillo es, pues, un aparato que va desapareciendo. Sus nombres vascos son: estrazi, txistarrazi, ixtexi y aultzi, empleados en diferentes pueblos del país (en Navarra, principalmente) hasta nuestros días. El uso del pedernal en operaciones mágicas aparece mencionado en un decreto del tribunal de la Inquisición de Logroño (14 de marzo de 1725) que, entre las prácticas usuales a la sazón en el reino de Navarra, describe una contra la herpe con estas palabras: «Para remedio de la enfermedad de Erpes, dicen estas palabras Bascongadas: Vasasua, Ichasua, ozanera, y ducaelen semearquen semeorobano Jaunchecago. Y sacando con un Eslabón de alguna piedra tres veces las chispas, las aplican a los que tienen dicha enfermedad». Las lascas de pedernal que se hallan en los campos son tenidas en algunas regiones como piedras de rayo, es decir, como rayos caídos de la nube durante las tormentas, del mismo modo que, según creencias más extendidas, caen las hachas prehistóricas de piedra pulimentada. v. FUEGO. Ref.: José Miguel de Barandiaran: Eusko-Folklore, 1924, p. 46, 47.

José Miguel de BARANDIARAN