Actor navarro nacido en Pamplona el 3 de marzo de 1933. Fallecido en Madrid el 9 de mayo de 2013.
Se marchó a vivir a San Sebastián con su familia siendo un niño. Allí estudió el Bachillerato e inició estudios de Derecho. En la universidad dio sus primeros pasos en el terreno del arte dramático con el Teatro Universitario de San Sebastián. Abandonó la carrera para probar suerte en Madrid como actor.
Durante tres temporadas formó parte de la compañía titular del Teatro Nacional María Guerrero. En estos primeros años obtuvo grandes éxitos con montajes teatrales como La felicidad no lleva impuesto de lujo o Ninette y un señor de Murcia.
Debutó en el cine con Atraco a las tres (1962) de José María Forqué. Inició entonces una carrera cinematográfica en largometrajes de carácter, generalmente, cómico y popular. Algunas de las películas más destacadas de estos inicios son La verbena de la Paloma (1963) de José Luis Sáenz de Heredia, El verdugo (1963) de Luis G. Berlanga, Nobleza baturra (1965) de Juan de Orduña, Ninette y un señor de Murcia (1965) de Fernando Fernán-Gómez, La ciudad no es para mí (1965) de Pedro Lazaga, Los guardiamarinas (1966) de Pedro Lazaga, Cuatro noches de boda (1969) de Mariano Ozores o Cateto a babor (1969) de Ramón Fernández.
En 1970 tuvo un gran éxito de público con la película No desearás al vecino del quinto (1970) de Ramón Fernández. A partir de ese momento se inició una etapa en la carrera de Alfredo Landa que giraba obsesivamente en la represión sexual de la España de los setenta. Fue el cine del "landismo". De la mano de directores como Pedro Lazaga, Mariano Ozores, Fernando Merino o Luis María Delgado, Alfredo Landa compuso con eficacia un personaje cómico en su patética frustración sexual en películas como Vente a Alemania, Pepe (1970) de Pedro Lazaga, Aunque la hormona se vista de seda (1971) de Vicente Escrivá, París bien vale una moza (1972) de Pedro Lazaga, Manolo la nuit (1973) de Mariano Ozores, Un curita cañón (1973) de Luis María Delgado, Dormir y ligar, todo es empezar (1974) de Mariano Ozores o Los pecados de una chica casi decente (1975) de Mariano Ozores.
Su trabajo en El puente (1976) de José Antonio Bardem, interpretando a un hombre que parte hacia Torremolinos con la idea de ligar con una extranjera y se encuentra, durante el viaje, con una serie de injusticias que le hacen tomar conciencia de clase, supuso un giro en su trayectoria cinematográfica. Sus interpretaciones en El crack (1981) y El crack 2 (1983) ambas de José Luis Garci y sobre todo, su magistral caracterización de Paco, el pobre campesino que lleva una vida de esclavo al servicio de los señores del cortijo extremeño en Los santos inocentes (1983) de Mario Camus mostraron de pronto a un actor absolutamente genial desaprovechado, en muchas ocasiones, en películas insustanciales. Landa demostraba que no sólo era un cómico brillante sino que además era capaz componer un personaje de carácter trágico con una hondura y un talento fuera de lo común. Su trabajo en esta obra maestra del cine español le valió el Premio ex aequo con Paco Rabal al Mejor Actor en el 37 Festival de Cannes en 1984.
A partir de ese momento, como no podía ser de otra manera, su carrera siguió creciendo con títulos como La vaquilla (1984) de Luis García Berlanga, Los paraísos perdidos (1985) de Basilio Martín Patino, Tata mía (1986) de José Luis Borau -Premio al Mejor Actor en el Festival de Cartagena de Indias-, El bosque animado (1987) de José Luis Cuerda -Premio Goya al Mejor Actor en 1987-, Sinatra (1988) de Francesc Betriu -Premio al Mejor Actor de la Generalitat de Catalunya-, La marrana (1992) de José Luis Cuerda -Premio Goya al Mejor Actor en 1992, Premio al Mejor Actor en la II edición de los Premios al Cine Vasco de El Mundo (1993)-, Canción de cuna (1994) de José Luis Garci, Historia de un beso (2001) de José Luis Garci -Premio al Mejor Actor en los XI Premios "El Mundo" al Cine Vasco- , La luz prodigiosa (2003) de Miguel Hermoso, Tiovivo c.1950 (2004) de José Luis Garci o Luz de domingo (2007) de José Luis Garci.
Interesante ha sido también su faceta de actor en series de televisión como Ninette y un señor de Murcia, Don Quijote de la Mancha, (donde hizo una espléndida recreación de Sancho Panza), Por fin solos o Lleno por favor que le han convertido en uno de los actores preferidos de los telespectadores. En el 2002 el Gobierno de Navarra le impuso la insignia de Oro de Navarra en reconocimiento a su carrera cinematográfica. En el transcurso de la inauguración de la 51 edición del Festival Internacional de Cine de San Sebastián (2003) la asociación de actores AISGE le otorgó el premio "a toda una vida" en homenaje a su trayectoria profesional. También en el 2003 recibió un homenaje de la Mostra de Valencia. En marzo de 2007, en el Festival de Málaga, durante la gala en la que recibió el Premio Especial Décimo Aniversario del Festival de Cine Español de Málaga, Alfredo Landa hizo oficial su retirada del cine. Si la decisión del actor navarro es firme queda Luz de domingo (2007) de José Luis Garci como su última interpretación en su larga trayectoria filmográfica. A principios de 2008 recibió el Goya de Honor 2007 de la Academia de las Ciencias Cinematográficas de España en reconocimiento a toda su carrera artística.
También en 2008 recibió el Premio Príncipe de Viana de la Cultura que otorga anualmente el Gobierno de Navarra y la XIV Muestra de Cine Español de Tudela dedicó un homenaje a su trayectoria artística. La publicación en 2008 del libro de Marcos Ordóñez Alfredo el grande: vida de un cómico, Landa lo cuenta todo desató una gran polémica debido a las declaraciones vertidas por el actor sobre algunos de sus antiguos compañeros de profesión.