Cinématographiques

La pelota vasca, la piel contra la piedra

Sexto largometraje dirigido por Julio Medem. La producción corrió a cargo del propio Medem y de Koldo Zuazua para Alicia produce en 2003.

El origen de este proyecto personal está en la campaña de linchamiento y calumnias por parte del nacionalismo español contra el nacionalismo vasco en la campaña electoral de las elecciones vascas de mayo de 2001.

Medem asistió horrorizado desde Madrid a este espectáculo y se decidió a realizar un documental sobre el conflicto vasco que tituló La pelota vasca, la piel contra la piedra-Euskal pilota, larrua harriaren kontra. El proyecto contó con las siguientes fases; un largometraje para salas de cine con 70 entrevistas. Una serie de tres capítulos de 55 minutos para televisiones con más de 80 entrevistas. Un doble DVD de 5 horas con más de cien entrevistas. Un libro recopilatorio de las entrevistas y, finalmente, una página Web con intervenciones de los entrevistados y un foro de debate. A este documental, en principio, le seguiría una película de ficción titulada Aitor, la piel contra la piedra-Aitor, larrua harriaren kontra. Ambas obras serían hermanas que compartirían incluso el mismo apellido (la piel contra la piedra). Medem intentó entrevistar a personas de todos los ámbitos e ideas del espectro social y político vasco para crear un escenario simulado de diálogo pero ese propósito no prosperó porque ni la cúpula de ETA ni el Partido Popular quisieron participar en el proyecto. En vísperas de su estreno en el Festival de San Sebastián el documental sufrió una feroz campaña de linchamiento por parte del Partido Popular y del nacionalismo español más radical, similar, curiosamente, a la campaña de difamaciones contra el nacionalismo vasco vivida en las elecciones de 2001 que impulsó a Medem a realizar esta película.

El documental fue acusado de justificar la violencia y en un alarde de cinismo injustificable -hay que recordar que el Partido Popular voluntariamente declinó la invitación para emitir su opinión- se acusó a Medem de dar más protagonismo a la ideología nacionalista vasca en detrimento del constitucionalismo españolista. La portavoz del P.P. en el ayuntamiento de San Sebastián pidió además al alcalde de Donostia que convocara al Consejo del certamen para tomar una decisión sobre la conveniencia de exhibir el documental. Incluso la ministra de Cultura del gobierno español, aun reconociendo que no había visto la película, se atrevió a despotricar contra la obra de Medem y se mostró sorprendida ante el hecho de que el Festival mantuviera el pase del film. La libertad de expresión se impuso y La pelota vasca pudo verse en el certamen donostiarra recibiendo un apoyo incondicional por parte del público y de la crítica. Y es que Medem logró un hermoso y trágico documental convertido tras su estreno, pese a quien pese, en un referente cinematográfico e histórico para el futuro. Artísticamente hablando hay que resaltar la habilidad del cineasta para combinar las entrevistas con insertos de paisajes vascos, planos de otras películas sobre Euskal Herria, como las maravillosas tomas realizadas por Orson Welles en Around the World with Orson Welles o imágenes documentales de archivo. El intercambio de opiniones encontradas genera en cierto modo una sensación de asfixia y frustración, sensación, por otra parte, frecuente en el cine vasco moderno. Si a eso se le une el lirismo y la trascendencia de las imágenes captadas por la cámara que recoge con sensibilidad paisajes y formas ancestrales de la vida vasca queda este documental como una obra plena de emoción y belleza. Algo habitual en el cine de Julio Medem.

  • Angulo, Jesús; Rebordinos, José Luís: Contra la certeza. El cine de Julio Medem, Donostia-San Sebastián, Euskadiko Filmategia/Filmoteca Vasca-Festival de Cine de Huesca, 2005, 322 pp.
  • Roldán Larreta, Carlos: Los vascos y el séptimo arte. Diccionario enciclopédico de cineastas vascos, Donostia-San Sebastián, Filmoteca Vasca-Euskadiko Filmategia, 2003, 351 pp.