Ternero rojo. En Ataun fue frecuente oír que en ciertas simas y cavernas de la región hay genios que hacen su aparición en figura de txaalgorri.
Se dice que no hay que lanzar piedras a las simas de Askaata ni a la cueva de Usategi (sobre Urrestarasu); de hacerlo, sale un ternero rojo en actitud amenazadora.
A este propósito cuentan que en tiempos en que los jóvenes pastores de la zona de Marumendi se reunían los días festivos en Agaoz para divertirse bailando al son de la trompa y de la pandereta, tres de ellos lanzaron piedras hacia el interior de una cueva que allí existe. Luego les salió un txaalgorri. Los tres se echaron a correr precipitadamente. Uno de ellos murió por la fatiga en la cumbre de Agaoz; el otro, en el prado de Aralegi, y el tercero llegó a su caserío de Urrestarasu y murió a los tres días.