Lurraldeak

Zuberoa

La Soule -Zuberoa, Ziberoa, Xubero según las diversas variantes fonéticas vascas utilizadas-, uno de los vizcondados territoriales creados en el condado de Gascuña a fines del siglo X, es hoy en día el más oriental de los territorios que han mantenido el uso de la lengua vasca al N. de los Pirineos. Más allá, los primeros valles bearneses de Ossau y de Aspe y el territorio de las gaves afluentes del Adour sólo han conservado vestigios toponímicos de etimología vasca o de origen aquitano no romano, numerosos por cierto, tanto en la montaña como en el llano. El territorio de Zuberoa está constituido esencialmente por el alto y medio valle del Saison, que confluye en la gave de Olorón a la salida del país suletino. La toponimia vasca, en particular en lo que respecta a los nombres de casas censadas desde el siglo XIV, sigue siendo importante en varias poblaciones del antiguo territorio oloronés (vizcondado de Olorón anexionado por el Béarn a comienzos del siglo XI) entre el Saison y la gave de Olorón. La Soule es mencionada desde los tiempos de Cesar, durante la conquista de Aquitania por los romanos a mediados del siglo I AC, y, luego, en los conflictos con la monarquía franca: el rey Dagoberto sometió la Wasconia, más adelante denominada "Gascuña", pero el general de su ejército, el duque Arimberto, perdió la vida en Zuberoa el año 636.

El primer nombre atestiguado es el de los habitantes, que las fuentes antiguas denominan, con diversas variantes, Sibulates, Sibyllates, Sybillates... Es comprensible la duda de los clásicos antiguos para escribir el nombre, para ellos poco familiar, de este pequeño pueblo comprendido entre los Aquitani o Aquitanos, luego, bajo el Imperio, en el país de los "nueve pueblos" o Novempopuli. Ver Novempopulania. Dejando de lado el sufijo -ates, que en latín servía para llamar a los pueblos, nos encontramos con el radical sibul-sibyll-, sybill- en el que se hallan los elementos principales del nombre vasco zuber(o): la lateral latina, simplificada si en principio fue geminada, desembocó en la vibrante vasca siguiendo la regla habitual; se añadió el sufijo -o, muy frecuente en toponimia vasca antigua (Berrio, Elorrio, Zabalo...), y el nombre quedó emparentado muy de cerca a Arbero(a)/Arbelo(a), nombre medieval frecuentemente citado del país de Arberoa en la Baja Navarra. En la tradición latino-romance, el nombre medieval, documentado desde el siglo VII hasta mediados del siglo XII y derivado de la misma base, fue, en principio Subola, luego, por eliminación de la sílaba átona, Sola, que en gascón da Sole y Soule y pasa al lenguaje administrativo francés. Algo antes de la infructuosa tentativa que efectuó, a comienzos del siglo XII, el rey de Aragón y de Navarra Alfonso el Batallador, de asediar Bayona, diciéndose en 1131 regnante me (...) de Belforado usque ad Pallars et de Bayona usque in Regalis Monte, había residido en Zuberoa, donde mandó construir -o reconstruir- una fortaleza: castello novo quod fecimus incapo de Sobola.

Es muy probable que fuera el castillo de Mauléon, símbolo del poder público en la zona, en la que gaztelua, nombre que recibe, quiere decir también "prisión". Su nombre latino Mallus Leo, en romance Mauléon, reducido en euskera a Maule, por lo demás bastante banal para un recinto fortificado y amenazador, aparece en los textos a mediados de ese mismo siglo XII. También puede ocurrir que su nombre procediera de antes, del de un castillo más antiguo, o tal vez se hubiera adaptado, es decir, latinizado, utilizando como base un topónimo local anterior, del que no existe, sin embargo, prueba alguna.

Es en esa época, asimismo, cuando la documentación, poco abundante antes del siglo XIV, cita los primeros nombres, escasos aún, de las villas y pueblos suletinos. En el seno de textos latinos o romances (en este caso gascones), aparecen habitualmente bajo una forma fonéticamente romanceada los nombres locales, vascos en su mayor parte. Teniendo en cuenta que estos últimos, por lo general, sólo aparecen citados mucho más tarde, las reglas de evolución fonética romance no dejan la menor duda sobre su anterioridad en casi todos los casos. En el siglo XI: 1080, Leguinge es una adaptación romance del vasco Liginaga; 1096, Laruns: el vasco moderno Lahüntze resulta más alterado en relación con el nombre primitivo que el nombre oficial.

En el siglo XII: 1119, Domesang por Domezain, en vasco actual Domintxine que forma parte de una serie de formación aparentemente latina y de base antroponímica; 1120 Trium villarum, genitivo latino para Trois-Villes, en euskera Iruri con el mismo sentido. Más adelante, a finales del siglo (1174- 1189), se suceden: Giestars por Gestas, contentándose el vasco Jestatze con adaptar el nombre romance alusivo a "genestière" (retamal); Larraun que es la forma etimológica vasca, moderno Larrañe por cambio fonético tardío, por Larrau; Restoa por Restoue, en vasco Arstoe; Sivas por Sibas, en vasco Ziboze o Zibaze (forma parte de los nombres que ni el euskera ni el latín explican); Sancta Gracia por Sainte-Engrâce; Paguola (salvando la grafía es el vasco Pagola) por Pagolle; Lachari (la grafía -ch- representa la oclusiva -k- a veces) por Laccarry; Alos, nombre sin duda arcaico y poco explicable, en vasco Aloze; Haussa por Haux, en vasco Hauze o Haunze, con nasal también en 1327 anaus; Osaas por Ossas, en vasco Ozaze, sin duda nombre relacionado con los hidrónimos pirenaicos Osse etc., pero, poco explicable; Osfran por Osserain, en vasco Osaraine; Auçuruc por Aussurucq, fonetización romance del vasco Altzürükü derivado de haltz "aliso"; Urdiarp por Ordiarp, forma procedente del vasco Urdiñarbe tras la caída romance bastante regular (infinitamente más que en vasco) de nasal intervocálica, siendo, por tanto, la palatalización de la nasal vasca tras -i- tardía.

En el siglo XIII: 1224, Cheraltus, que no es más que una latinización abusiva de Chéraute, en vasco Sohüta, que procede dialectal y tardíamente del común sorhoeta "lugar de praderas"; 1249, Tardedz brota, probablemente, del vasco Atharratz(e). Tendremos que llegar a dos textos desigualmente importantes del siglo XIV, ambos redactados en gascón, para poder poseer una visión casi completa de la toponimia medieval suletina: nombres de poblaciones y de casas antiguas, cerca de un total de alrededor de 1.200 topónimos, en su mayor parte todavía en uso y conocidos a finales del siglo XX. El primero de estos textos consiste en la composición de la Asamblea General de los dueños de casa de Zuberoa en 1337 para decidir la reanudación de una donación de vacas y salmones al rey de Navarra, interrumpida por las guerras, y cuyo origen remontaba tal vez al año 1125 (o ¿1135?; Alfonso el Batallador reina hasta 1134) en que el Rey de Navarra, Sancho Ramírez, donó al monasterio de Leire el de Santa Engracia de Urdax, en el que se ha reconocido a la colegiata de Sainte-Engrâce, cuyos religiosos se comprometieron a entregar, a modo de censo a Leire, dos salmones y dos bueyes.

Este texto cita 65 casas y a sus dueños, la mayoría por primera vez. El segundo texto, mucho más considerable, es conocido bajo el nombre de Censo Gótico. Se trata de un recuento, pueblo por pueblo y casa por casa, de fines del siglo XIV, de las diversas obligaciones de cada casa y de las imposiciones que debían al Rey, tanto en especie como en moneda. Sin ser totalmente exhaustivo, sólo en él se citan cerca de 1.200 topónimos, la mayoría vascos. La única versión conocida es una copia "vidimada" en 1690, fiel en principio al original. A este texto se añaden algunos documentos más tardíos: listas de fines del siglo XV para algunas poblaciones, un Terrier de 1515, la Coutume (Fuero) de 1520 que contienen también numerosos topónimos y nombres de casas.

Zuberoa se dividía en tres mensajerías ("messageries") -Alta Zuberoa, Arbailles y Baja Zuberoa-, subdivididas, a su vez, en "vics" o "dégairies", dejando de lado las "villas reales", que constituían una categoría aparte (vide infra "Organización foral").

  • Alta Zuberoa

El nombre Haute-Soule deriva del gascón citado en 1337 Sole sobiran, que equivale con exactitud a "Soule superior" (sin ninguna idea de "soberanía"), bastante diferente del nombre vasco Basabürü, topónimo vasco muy extendido utilizado para nombrar los límites exteriores de las tierras roturadas y puestas en cultivo: "límite, extremidad" es el sentido ordinario de buru en toponimia vasca (lo que en gascón sería el también frecuente cap), y baso "tierra inculta, forestal, montañosa", asimismo muy usual en toponimia y que corresponde con bastante exactitud en euskera al latín saltus, préstamo que hallamos en vasco y en Zuberoa: una casa de Licharre aparece en el Censo como Salthia, forma dialectal del común zaldua, que hallamos en el pueblo limítrofe de Sorhapuru de Mixe en los compuestos Zaldugarate y Zaldumburu, doblete exacto de basaburu (dejando de lado la anticipación nasal de -b). El territorio recibe, pues, su nombre por aquello que le caracteriza: el límite en el que se detienen las implantaciones humanas.

A la altura de Trois-Villes el Saison recibe un afluente a su izquierda, reuniendo dos valles, hasta entonces separados, que forman una "dégairie" cada uno, que toman el nombre del "degan" -en euskera Zainhoa- que cada "vic" debía de elegir para velar por el orden público: reciben su nombre en dirección río arriba y el "saltus" no habitado (a excepción de Sainte-Engrâce y Larrau, posesiones religiosas que no formaron políticamente parte de la antigua Zuberoa), de espaldas al llano de la Baja Zuberoa: de Trois-Villes/Iruri a Athérey (que contiene tal vez el elemento athe "puerta, pasaje", como la casa noble Athagi al extremo del valle opuesto) se halla el "Val Senestre" o Ibarrezker. Es el más poblado con (contando Sainte-Engrâce y Larrau y las dos "villas reales" de Haux y Montory; esta última de nombre romance y de fundación medieval) 16 localidades medievales, algunas poco pobladas y reagrupadas para constituir las modernas comunas.

Más arriba, el Saison está formado por dos gaves: una que baja de Sainte-Engrâce y otra de Larrau. Sainte-Engrâce tiene un nombre ligado a la historia religiosa regional y a la dependencia del monasterio navarro de Leire; pero su topónimo verdadero, que designa a la vez a las rocas y a los llanos que caracterizan el lugar, es el bien conocido Urdaitz. El nombre de Larrau, del Larraun medieval, que es el étimo "lugar de landas", el mismo que el "La Rhune" laburdino y otros, hasta el Larrañe moderno surgido del cambio habitual en suletino del diptongo -au- a -ai- y de la palatalización de la nasal tras -i, designa una vez más su función primitiva de "landa de pastoreo", en un territorio destinado a la ganadería estival. Los pueblos más bajos, salvo los ya citados, son, de arriba a abajo y a uno y otro lado del curso de agua: Etchebar, Licq, forma romance procedente del euskera Ligi, Sunhar (variante local para zuhar/zugar/zumar "olmo"), Lichans, del euskera Lexanzü (el radical es lexar para el común leizar "fresno" o, tal vez, leize "sima", con sufijo abundancial), Laguinge procedente de Liginaga (como Licq construido sobre ligi "lodazal" con sufijo locativo), Restoue en euskera Arstue, Abense-de-Haut (ver Abense-de-Bas), Sibas, Tardets, que engloba hoy la "Villanueva" medieval, y Trois-Villes, en el que las "villas" eran sin duda los tres dominios (en euskera antiguo iri/uri/ili como el latín villa) principales: dos nobles, el domec (nombre gascón para Jauregi) y Etxekopar forma local moderna para el medieval etxagapare "casa principal", y probablemente la casa enteramente franca de deberes feudales llamada Berraute, forma romance clásica que encontramos también en el Béarn medieval (fuegos de 1385) y en la Baja Navarra, procedente del euskera común berroeta "lugar de matorrales".

Remontando por la derecha el afluente del Saison, hallamos La Baigdaxtre del Censo o "Val Dextre", Ibarreskün, constituido por nueve poblados antiguos. Dejando de lado Alos y Camou (antaño célebre por un manantial salado con virtudes curativas que le dan sin duda, como en toda la región, comprendido el Béarn, su nombre, que origina en euskera un Gamere que recuerda el Akhamarre de Came en Laburdi), los nombres constituyen claros topónimos vascos conforme bajamos al valle: Laccarry (base lakhar "grava"), Charritte-de-Haut (ver Baja Zuberoa), Arhan ("valle", extremadamente difundido en toda la región, comprendidos los Pirineos centrales), Alçay y Alçabéhéty (base haltz "aliso", sin aspiración aquí como en los diversos nombres bajo-navarros y laburdinos: es, junto con el olmo, el álamo y el sauce, el arbol de las orillas de los cursos de agua), Sunharrette (doblete de Sunhar con el sufijo locativo -eta romanceado fonéticamente) y Cihigue (de zihi "bellota" o zuhi "encinar", ambos de igual base).

  • B) Arbailles

La "mensajería" suletina intermedia entre la Alta y la Baja Zuberoa está constituida por las dos Arbailles, grande y pequeña, incluyendo los caseríos de Roquiague, nombre procedente del vasco Arrokiaga, y sobre todo Barcus, en euskera Barkoxe procedente de un antiguo Barkoitz: ambos topónimos los encontramos en el país de Cize. Junto con Musculdy (de igual formación que el bajo-navarro Iholdy, pero sobre la base muskil "retoño" o musko "cepa") y Pagolle, el territorio toca la Baja Navarra (camino del collado de Oskix) y con Garindein (de base probablemente antroponímica como Domezain) las puertas de Mauléon. El vasco Arballa es igual al nombre oficial, habiendo añadido éste, como ocurre a menudo en los nombres romanceados, un plural sin duda ausente en su origen: puede que tenga que ver, sin que se nos alcance explicarlo con mayor claridad, con los nombres de los Tarbelli, todo ese territorio, y al menos con los países bajonavarros de Ostabarret y de Mixe, que le suceden, habiendo estado vinculados en un principio a la ciudad de Dax, capital de ese pueblo en la Antigüedad.

En la orilla derecha se suceden Sauguis (1347 salguys de base probable zalke "cizaña"), Saint-Etienne o Doneztebe, Gotein o Gotañe que perpetúa, como muchos lugares, casas y pueblos de la región, el recuerdo de la presencia visigótica en Aquitania, que duró mas de un siglo (del V al VI), Libarrenx, con los pueblos descartados de Roquiague y de la "villa real" de Barcus. A la orilla izquierda encontramos: Ossas, Suhare (otro doblete de Sunhar etc. tras pérdida de la nasal de Soner 1337), el pueblo descartado de Aussurucq que ocupa un pequeño valle, con su única casa noble Urrutia -romanceado en "Ruthie"- separada (de ahí su nombre "del otro lado") del pueblo por un pequeño curso de agua, los poblados de topónimos geminados de Mendy y Menditte (romanización procedente del vasco Mendiko(e)ta "lugar de pequeñas montañas"), Idaux, el vasco Idaunze, nombre misterioso, finalmente, hacia Oskix, los diversos barrios de Ordiarp o Urdiñarbe (nombre trasparente: "bajo rocas grises") que son "Peyriède" o "pedregal", nombre gascón que representa sin duda el equivalente de Ahetze, casa noble importante con sus "fivatiers" medievales, Mirande (latinismo muy extendido), Larroson alterado del medieval Larhuntsun, Garraybie "el vado de la roca", cuya base oronímica antigua garr- se mantiene como en numerosos lugares de la región, en Arberoa y Laburdi. Musculdy con sus barrios de Erbis (la base tal vez sea erbi "liebre") y Eiheregi "borde del molino", y Pagolle limitan el territorio por la parte de la Baja Navarra de Ostabarret.

  • C) Baja Zuberoa

Ocupa la parte baja del valle a partir de Mauléon: recibía en gascón el nombre de Barhoue, que se daba a las tierras bajas y regadas, como uno de los tres "mandes" del vecino país de Mixe. El vasco moderno la llama curiosamente Pettarra, que, de hecho, es el nombre de pueblo y de origen confeccionado sobre -pe "bajo": "el que habita el (país) bajo". No se sabe si el origen fue un herripe "bajo del país" o Zuberope "lo bajo de Soule", pero probablemente uno u otro: nombre proporcionado sin duda por las gentes de "arriba", ya que la toponimia antigua, vasca o no, privilegia y valoriza en general los lugares elevados desde los que se domina o se defiende mejor. Es el territorio de los grandes dominios nobles con sus numerosos fivatiers, pero de pocos dominios de "franc alleu", como en la Alta Zuberoa donde eran los más numerosos, protegido por el castillo de Mauléon, sede del poder vizcondal, luego real, erigido sobre los primeros contrafuertes, en las cercanías del lugar de la asamblea general de la corte de Licharre, en euskera Lextarre, población situada frente al castillo pero en la otra orilla del Saison.

En la orilla derecha se suceden Chéraute en vasco Sohüta (ver más arriba), Berrogain, Laruns, Moncayolle (nombre de apariencia romance como el de kaiolar o "majada de montaña", aunque el vasco Mithikile haga suponer otro origen sin duda alterado) que separa Mendibieu y Larrebieu, formaciones romances sobre Mendibil y Larrabil, Larrory con la misma base larre que el precedente, Arrast que parece tener dos étimos: una base larre para la forma medieval Larrast, y urritz "avellano" con una asimilación vocálica habitual para el vasco Ürruxtoi que significa "avellaneda"; finalmente, más lejos, en los límites del Béarn, los dos pueblos poco vascófonos de Gestas, que ofrece bastante poca toponimia vasca en la Edad Media, y Rivareyte, que aún tiene menos (un Otharren basado en othe "aulaga"). En frente, en la otra rivera, se halla Osserain, (base probable otsar que ha podido ser toponímico tanto como antroponímico, cuyo señor, uno de los diez "podestats" que ocupaban el primer rango de la nobleza en las 80-90 casas nobles medievales de Zuberoa, tenía su castillo, reconocible por los vestigios de sus murallas, enclavado en un montículo que vigilaba el curso del Saison.

Remontando la orilla izquierda, el territorio más amplio entrecruzado de extensos bosques, de campos y de pequeñas alturas se extiende sobre dos ejes: en la parte más cercana del río y en el camino que conduce de Mixe a Mauléon, se halla Domezain (otro nuevo "podestat": su castillo medieval ha sido transformado en iglesia), cabeza de una "dégairie", que contiene muy importante toponimia vasca a veces original (Leitzelarre, Muxikondo, Ayhartz, Ihult-urruti, Muxubeltz, Agerrezahar, etc.); luego, algo aparte, Berraute, Ithorots (es el bien conocido vasco ithurrotz "fuente fría") y Olhaïby (el "vado de la cabaña"), y sucesivamente, en el camino, Etcharry (el mismo nombre que en Navarra, cuyas dos casas nobles se llaman en el Censo Oyhanart, epónimo del célebre escritor, de la que no queda más que el montículo desgastado, y Amichalgun "lugar de precipicios", otro "podestat"), Aroue, Charritte-de-Bas (el nombre romanceado, en Zuberoa como en Mixe, procede de Sarrikota "lugar de pequeño matorral"), Undurein (base antroponímica muy probable: el nombre medieval de las dos aldeas era Endurein, y la casa noble de Ezponda es el epónimo del célebre secretario de Juana de Albret, Eneco de Sponde, y de sus hijos, Jean, el gran poeta barroco francés, y Henry, obispo de Pamiers), Espès en euskera Espeize, Abense-de-Bas en euskera Onizepe (Abense es la resultante romance regular del topónimo oniz que se halla en la casa noble Onizmendi 1381 "monte de Oniz"), Viodos procedente del vasco usual Bildoz (como Biaudos en Béarn), que evoca, sin duda, el terreno redondeado al modo de los otros compuestos toponímicos de bil. Sobre un eje más elevado encaminándonos hacia Mixe se suceden los pueblos de Aïnharp, nombre oficial procedente de Ainharbe "bajo el brezal" (variante ainhar para el más extendido ilhar), Oyhercq originado en oiher(he)gi "borde o cresta de bosque" y Lohitzun, "lugar de aluviones" que alude, como en otras ocasiones, un terreno húmedo.

Antes de concluir esta visión de los principales nombres de la toponimia suletina y para completar, conviene describir, al menos de forma sucinta, los caracteres generales, semánticos y lingüísticos del conjunto de la toponimia de hábitat conocida desde la Edad Media. El conjunto de estos nombres apenas se diferencia, como ocurre con los nombres de países y poblaciones evocados, de lo que caracteriza al país interior, y ello en dos puntos principales:

1° Por el número algo mayor de nombres romances y comunes al territorio bearnés vecino, como Salaranque procedente de "Sallefranque" (eliminación vasca de la -f-), Lacuinhe, Cauhapé, Carrera, los componentes de karrika "calle" (latinismo bastante raro en otros sitios en toponimia medieval, frecuente aquí) y algunos más.

2° Por los dialectismos fonéticos propios del suletino, más visibles en los nombres modernos pero ya presentes en el Censo: cierre vocálico en diptongo en Uheitz (en otros sitios uhaitz "torrente"), oclusivas sordas tras lateral o nasal como en Uhalte, Jeintein, abundancia de aspiraciones, palatalización de laterales y de nasales después de -i-, aparición de formas como Utchurry para el común ithurri, implicando desde el siglo XIV la articulación de la vocal labializada ü y también una palatalización de -t-... En resumen, la toponimia proporciona, en Zuberoa como en otros lugares, una imagen de las realidades físicas y territoriales y, al mismo tiempo, humanas y lingüísticas.