Udalak

Zerain

En el núcleo de Zerain se pueden admirar varios edificios de un valor singular. La Casa Consistorial fue erigida en 1705 con trazas de Esteban de Larraza. Cercana a ella y en los bajos de la casa Ostatu se encuentra la Cárcel o Mazmorra de Zerain y en ella se ha realizado una curiosa recreación de las celdas del siglo XVIII con los cepos y argollas que servían para tener apresados a los reos. Al lado de la plaza, centro social de la villa, se encuentra una bolera de madera ensamblada, una de las más largas de Gipuzkoa y que aún mantiene su función de esparcimiento de los vecinos.

Otra construcción de carácter público y testigo de la importancia de las minas de hierro para la economía vasca en general y guipuzcoana en particular, es la Montaña de Hierro o las minas de Aizpea, ubicadas en el Parque Natural de Aizkorri-Aratz y declaradas Conjunto Monumental. El Centro de Interpretación Aizpitta se encarga de la puesta en valor de este conjunto. En esta montaña se encuentran los hornos de calcinación mineral, tres hornos de altura considerable y de planta circular en los que el hierro recién extraido de las minas recibía su primer tratamiento.

La serrería hidráulica de Larraondo es otra huella de la actividad económica de Zerain. Se construyó hacia 1890 y se ha mantenido en activo hasta 1960. Mantiene toda su estructura de madera del edificio y el torno, cepillo, sierras y demás elementos de la serrería.

En lo que a arquitectura privada se refiere, una de las viviendas más interesantes de Zerain es la casa Jauregia, antiguo solar de los señores de Zerain que tiene unos elementos singulares como los muros de sillería, una puerta de arco apuntado con grandes dovelas, una piedra con una inscripción en aristadas letras góticas y el blasón familiar. La parte superior de la casa es de mampostería y el último piso, de ladrillo con entramado de madera. Posee además un pozo de agua en el frente principal.

Otras bellas casas de Zerain son Bikario Etxea, Benefiziadokoa, Olabide, Tellerietxe y Errementari entre otras, todas grandes casas de mampostería que tienen bellos entramados de madera, balconadas y zaguanes. De estas residencias se diferencia la casa Etxeberri por un soportal abierto que posee en la planta baja, compuesto por arcos de medio punto y piedras con encadenados geométricos que evidencian su ejecución en el siglo XVII.

En una de las casas rurales ubicadas en la plaza y empleada como casa de cultura municipal se encuentra el Museo Etnográfico de Zerain, puesto en marcha por iniciativa popular. Muestra diversos muebles, aperos de labranza, documentos y objetos que representan la vida y economía de la localidad.

  • Parroquia de la Asunción de Nuestra Señora

Templo de tres naves y tres tramos cubiertos por sencillas bóvedas de crucería. Fue edificada en su mayor parte durante el siglo XVIII por tres generaciones de la familia de arquitectos Carrera, aunque conserva algunos elementos del siglo XV. Uno de ellos es un sepulcro gótico de pared perteneciente a los Cerain, señores del lugar, que tiene forma de arcosolio y el interior del arco se adorna con unas cresterías caladas. Se debió hacer en 1457. La antigua puerta del templo, de arco apuntado y grandes dovelas, es también un elemento de la primitiva iglesia, así como la pila bautismal cuya copa, de sección poligonal, se apoya en una base con columnillas adosadas. En la copa tiene unos relieves de carácter popular pero muy interesantes, con símbolos astrales y escudo de la villa.

Como se ha dicho anteriormente, la iglesia fue construida en su mayor parte en el siglo XVIII, a partir de la licencia obtenida por su patrona, Josefa de Zarauz y Ceráin, en 1709. Las obras comenzaron en 1714 y se sucedieron durante varias décadas. El resultado fue una iglesia austera. El coro es tal vez la parte más decorada, ya que se apoya sobre unos arcos cuyas enjutas muestran unos roleos vegetales y un friso clasicista.

La portada principal la realizó Martín de Carrera en 1734 y es una bonita obra dinámica, con volúmenes entrantes y salientes, propios del barroco. La puerta es adintelada y está enmarcada por unas volumétricas orejas que tienen una tímida decoración vegetal. Esta puerta está rodeada por dos pilastras de orden corintio, apoyadas a su vez en sendas retropilastras, que sustentan un segundo cuerpo de frontón roto que cobija un nicho avenerado con la talla de la titular, la Asunción de la Virgen. Se caracteriza por su sobriedad y elegancia y dinamiza el muro liso de sillería de la iglesia. Todo el templo está circundado por un pórtico de techumbre de madera ensamblada que cobija y protege esta portada.

La cabecera de la iglesia está ocupada por un retablo mayor barroco en su fase clasicista, construido por Diego de Mayora entre 1624 y 1627. Se compone de banco, dos cuerpos y ático, y cinco calles. El soporte empleado es la columna entorchada, propio de esta cronología. Los elementos ornamentales que se emplean son unas cadenetas, frisos de triglifos y metopas y algunos roleos vegetales, temas éstos más propios del manierismo de la época de formación del artista. El sagrario de este retablo es un templete de planta circular rematado en cúpula, evocando el Santo Sepulcro y anunciando su función de contenedor del Santísimo.

Las tallas, aún con resabios romanistas pero fuertemente influenciadas por el naturalismo barroco de Gregorio Fernández, son de mediana calidad y representan a San Pedro, San Pablo, Santo Domingo, San Francisco, San José con el Niño y otros santos. Como valores plásticos de este mueble se pueden destacar el adelantamiento de la calle central y la alternancia de nichos curvos y adintelados.

A ambos lados del retablo mayor, en el presbiterio, hay otros dos laterales de autor desconocido. Uno es de estilo churrigueresco, está dedicado a San José y en su cuerpo superior alberga una talla de San Sebastián. El frontero, realizado en torno a 1705 tiene las tallas de San Luis Gonzaga y San Antonio de Padua.

Otros dos retablos laterales existen apoyados en el muro de las naves laterales. Los dos están trazados por Diego Martínez de Arce en 1746 y fueron construidos por Juan Antonio de Iriarte y José Joaquín de Arizaga entre 1756 y 1757. Obedecen a un diseño idéntico y tienen un banco con sagrario, cuerpo central convexo y ático, y se encuadran en el rococó. Uno está dedicado a Nuestra Señora del Rosario y tiene la imagen de San Ignacio en su parte superior, y el segundo, al otro lado de la iglesia, tiene como titular a San Juan Bautista y a Santa Águeda en el ático. Los titulares son de autor anónimo y son tallas de cierta prestancia, mientras que las dos esculturas de los áticos se deben a la gubia del escultor Miguel Martín de Hontañón.

En el ajuar litúrgico de esta parroquia se pueden hallar varias obras de valor, como una pequeña cruz procesional flordelisada del siglo XIII. El relieve de Cristo Crucificado que muestra es algo hierático, de tres clavos y un largo paño de pureza. Se trata de una de las obras de orfebrería más antiguas de Gipuzkoa. Otras piezas de orfebrería litúrgica interesantes son varios cálices del siglo XVII, un relicario de Santa Águeda y San Blas también del siglo XVII y una custodia realizada en Madrid en 1767 que fue una donación de José de Múgica.

  • Ermitas

En el término municipal de Zerain existe una ermita bajo la advocación de San Blas, un santo de devoción popular muy extendida. La construcción es sencilla, como es costumbre en este tipo de edificios de ámbito rural, y tiene un pequeño retablo de principios del siglo XVII en el que se venera la imagen del santo vestido de pontifical, de estilo romanista y cierta prestancia. El coro de esta ermita es una obra de ensamblaje de madera.

  • ASTIAZARÁIN, Mª Isabel. Arquitectos guipuzcoanos del siglo XVIII: Martín de Carrera, Manuel Martín de Carrera. Donostia: Diputación Foral de Guipúzcoa, 1988.
  • CENDOYA ECHÁNIZ, Ignacio. El retablo barroco en el Goierri. Donostia: Kutxa fundazioa, 1992.
  • Guía Histórico Monumental de Gipuzkoa. Donostia: Diputación Foral de Gipuzkoa, 1992.
  • IPARRAGUIRRE, Ignacio. Cinco villas del Alto Goyerri: Cegama, Cerain, Mutiloa, Idiazábal, Ormáiztegui. Donostia-San Sebastián: Caja de Ahorros Municipal de San Sebastián, 1975.
  • MIGUÉLIZ VALCARLOS, Ignacio. Zilargintza Gipuzkoan. XV.-XVIII. mendeak = El arte de la platería en Gipuzkoa. Siglos XV-XVIII. Donostia-San Sebastián: Gipuzkoako Foru Aldundia, Kultura eta Euskara Departamentua = Diputación Foral de Gipuzkoa, Departamento de Cultura y Euskera, 2008.

AEM 2011